El atípico Banco del Marqués....

Santander contrata a 1.000 personas para tramitar quejas en Reino Unido

La consejera delegada de Santander UK, Ana Patricia Botín, explicó ayer que el grupo ha contratado a 1.000 personas para atajar el aumento de quejas en Reino Unido. También adelantó que abrirán sucursales a lo largo del ejercicio y que terminarán 2011 con 1.700.

Cinco Días - Madrid - 19/01/2011
Ana Patricia Botín tuvo ayer su primera comparecencia pública desde que hace un mes accediera al cargo de consejera delegada de Santander UK. La directiva compareció ante una comisión del Parlamento británico que está preguntando a las cinco grandes entidades financieras del país sobre su política crediticia.
La banquera adelantó que la filial ha contratado a más de 1.000 personas en los últimos meses para hacer frente al aumento de quejas por parte de los clientes. 600 de estos trabajadores se han incorporado a oficinas, y otros 400 lo han hecho a centros de gestión de llamadas telefónicas.
Los legisladores habían recordado a Ana Patricia Botín que Santander UK se ha convertido en los últimos tiempos en una de las firmas que más quejas estaba recibiendo.
La expresidenta de Banesto también adelantó que planean seguir abriendo oficinas durante 2011. Pese a la adquisición de 318 sucursales de Royal Bank of Scotland hace cinco meses, el grupo bancario español seguirá apostando por el crecimiento orgánico. "Ahora tenemos 1.200 sucursales, pero esperamos cerrar el ejercicio con 1.700 agencias", apuntó.
Lloyds Banking Group, a quien Santander compró en diciembre otras 88 agencias, tiene la mayor red en Reino Unido, con 2.900 locales.
Modelo de negocio
Los congresistas británicos también se mostraron muy interesados por el modelo de negocio de Santander, basado en filiales muy autónomas.
El presidente de la comisión en la que compareció Botín, el conservador Andrew Tyrie, explicó a la agencia Efe que la estructura del primer banco español "es una opción muy interesante" que el Reino Unido examinará, entre otras, como una vía para minimizar el riesgo de futuras crisis sistémicas de la banca.
"Queremos evitar que haya bancos tan grandes que no puedan quebrar porque echarían abajo el sistema", explicó Tyrie, quien señaló que otras opciones que se barajan para impedir crisis como la desatada en 2008 son exigir reservas de capital de contingencia, los testamentos vitales (donde los bancos tienen que demostrar cómo podrían ser desmantelados en caso de crisis), así como la separación de la banca comercial y la de inversión.
La directiva también dio cuenta de la innovación en productos financieros, especialmente en productos de pasivo: "hemos duplicado el número de cuentas corrientes, de forma orgánica, en tres años. Con nuevos productos e innovación. Uno de los que mejor ha funcionado es la cuenta con comisiones cero, con la que captamos 176.000 clientes".
Preguntada por el deterioro de la economía española, Botín explicó que el país está en "una fase de ajuste, tras 15 años de crecimiento", alabó las medidas adoptadas por el Gobierno y puso especial énfasis en la nueva ley de cajas de ahorros, "que permitirá a estas entidades acceder a los mercados de capitales".
El regulador británico multa a Barclays
Barclays ha sido multado con 7,7 millones de libras (9,2 millones de euros) por el regulador financiero de Reino Unido por haber vendido productos de inversión inadecuados a sus clientes, a quienes además deberá indemnizar por valor de unos 71 millones de euros.

Según la Autoridad de Servicios Financieros (FSA), Barclays pasó por alto su deber de asesorar debidamente en cuanto a inversiones al ofrecer dos fondos de inversión a unas 12.000 personas sin tener en cuenta su perfil ni las verdaderas necesidades, ya que muchos de ellos eran jubilados.

La FSA dijo que, aunque el banco identificó las ventas erróneas, cometidas entre julio de 2006 y noviembre de 2008, no hizo nada para rectificar la situación.

Tras conocer la multa, la más elevada aplicada por la FSA a una entidad bancaria, Barclays se disculpó públicamente y aseguró que tomaría medidas para corregir los errores.