Moncloa promete ante Bruselas liberalizar más los mercados en 2014
J.A.Bravo
También se prevé la creación de una Oficina Nacional de lucha contra el fraude laboral y la «racionalización» del mapa actual de títulos universitarios, a fin de restringir su número actua
El Plan Nacional de Reformas de España, que los dos primeros años de legislatura fue promocionado entre alharacas por el Gobierno para defender ante Bruselas el cambio de rumbo en la política económica, está pasando casi desapercibido en su edición de 2014, también aprobada el miércoles. Y_eso que medidas no le faltan:_184 siguiendo las recomendaciones específicas de la Comisión Europea en sus últimos informes y otras 156 adicionales para «apoyar el crecimiento».
Todas son desgranadas en un extenso informe de 233 páginas, elaborado por la Oficina Económica del Presidente -que dirige Álvaro Nadal, mano derecha de Mariano Rajoy- en colaboración con el Ministerio de Economía. Eso sí, su contenido no depara grandes novedades respecto a los planes ya anticipados por el propio Ejecutivo meses atrás.
De hecho, buena parte de las medidas repiten presencia respecto a anteriores ediciones del programa como, por ejemplo, la Ley de Colegios y Servicios Profesionales. Debería haber sido aprobada en 2013 -fue uno de los principales hitos que desde Moncloa se exhibió ante Bruselas para probar su afán reformador- pero, sin embargo, su puesta en marcha se demorará hasta este año.
Orientación dispar
Las actuaciones previstas son de orientación dispar, pues abarcan desde las medidas vinculadas a la anunciada reforma fiscal hasta otras en el ámbito sanitario. En este último capítulo se incluyen, por ejemplo, un nuevo «modelo retributivo de gestión clínica» que «ahorrará» 500 millones de euros anuales, o el cambio para que algunas bajas médicas incluyan la fecha de alta anticipada.
También se prevé la creación de una Oficina Nacional de lucha contra el fraude laboral y la «racionalización» del mapa actual de títulos universitarios, a fin de restringir su número actual.
En materia de liberalización, y junto a la anunciada apertura parcial al sector privado del transporte de viajeros en trenes AVE_y de Larga Distancia, también se prevé abrir más el negocio de la gestión urbana del agua. Asimismo, se revisarán -para «flexibilizarlos»- los requisitos exigidos a los operadores de juego, las instalaciones industriales energéticas y las empresas de servicios funerarios. La misma labor se hará en los centros educativos y de formación, los sanitarios y veterinarios, y las agencias de colocación.
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