Un trozo de Oviedo para Aurelio Argel
Una bocacalle de Azcárraga estrena el nombre del músico, «referente» del folk
Entre un río de lágrimas, la música de una gaita asturiana y el sol del mediodía. Así homenajeó la ciudad de Oviedo a la figura del crítico musical y referente del folk fallecido hace un año, Aurelio Argel, que cuenta desde ayer con una calle en su memoria. Un reconocimiento a la «profunda huella» que ha dejado, destacó el alcalde, Wenceslao López, que se encargó de descubrir la placa identificativa junto a la hija del músico, Gael García; la madre, Luzdivina González, 'Ludi'; y el hermano, Marco Antonio.
Al acto, celebrado en lo que hasta ayer solo era una bocacalle de Azcárraga sin nombre, asistieron, además, representantes municipales del equipo de gobierno y personalidades del ámbito de la música asturiana. El regidor subrayó el compromiso «incansable» de Argel: «Un hombre que vivió por y para la música, pero nunca de ella».
Cuando Gael tomó la palabra, las lágrimas apenas le permitieron hablar, pero pudo afirmar que «no podría estar más orgullosa de ver el nombre de mi padre aquí reflejado». El director de musicales de Radio Asturias, Alberto Toyos, y el gaitero, José Manuel Tejedor, glosaron la figura del que fuera su compañero. «No era nada sectario y manejaba una documentación increíble», señaló Toyos. Tejedor, a su vez, admitió encontrarse «con el nudo en la garganta» ante una «celebración tan emotiva».
El gaitero Vicente Prado, 'El Pravianu', cerró la emotiva velada interpretando 'Despedida'. Al final, el hermano de Argel reconoció que esta calle es «un honor» para su familia y que servirá para que su figura «quede para siempre». Mañana, en los premios AMAS, se le concederá un galardón honorífico a título póstumo.
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