Alianzas victoriosas entre el PS y la EELV, erosión del PCF, LFI invisible... Lecciones de mujeres municipales para la izquierda
Las autoridades municipales han demostrado que, para ganar, los socialistas y los ecologistas están ahora obligados a ponerse de acuerdo. Una situación que podría redibujar parte de la izquierda en el antes de las elecciones presidenciales de 2022.
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Están condenados a amarse el uno al otro. Un matrimonio de la razón, donde la pasión no está allí, pero donde convergen intereses bien entendidos. El Partido Socialista (PS) y Europa Ecología-Los Verdes (EELV) se han observado durante mucho tiempo, desconfiando unos de otros y entrando tan a menudo como sea posible en la competencia electoral. Las elecciones municipales, marcadas por una abstención masiva (58,4%), mostraron que estas dos fuerzas eran complementarias y que, por separado, la victoria era mucho más difícil. Ahora es un dúo que dibujan, marginando al PCF y a Francia insoumise.
Por lo tanto, la mayoría de los ayuntamientos conquistados por la EELV son el resultado de listas de reunión de izquierdas donde el PS ocupa un lugar importante. Este es el caso, en particular, de Lyon, Burdeos,Tours, Besanzón. Del mismo modo, el PS cosecha sus mayores éxitos en configuraciones donde EELV está en apoyo, como en París,Nantes, Rennes, Clermont-Ferrand o Villeurbanne (Ródano). Y dos de las principales conquistas socialistas -Montpellier y Nancy- son también el resultado de una alianza con los ecologistas.
Sobre todo, cuando nos fijamos en los resultados, vemos que el Partido Verde está funcionando muy bien en ciudades con más de 100.000 habitantes, cuando el PS, por otro lado, consolida su presencia local en las metrópolis pero también en las ciudades medias. "Las puntuaciones son fuertes cuando los alcaldes socialistas son muy verdes o cuando la lista fue dibujada por una EELV",señala el politólogo Yves Sintomer.
Simon Persico, experto en fiestas y movimientos ambientales, profesor de Sciences Po Grenoble: "Los Verdes están haciendo todo lo posible en grandes centros urbanos en lugar de en ciudades con una población de 30.000 habitantes. En esta entrega, el PS tenía muchas salidas, y EELV no puede pasar delante, excepto en Poitiers. »