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La Monarquía es un tema de riesgo para el Gobierno de coalición, dado el distinto posicionamiento de PSOE y Unidas Podemos frente a cualquier tema que salpique a la Casa Real.
El PSOE siempre han tenido un duro debate interno sobre cómo posicionarse sobre la Monarquía. Sin ir más lejos, en el 39º Congreso Federal fue el único motivo de discrepancia interna, y a punto estuvo de provocar una grave crisis. Sin embargo, la moderación y la comodidad llegaron y se consensuó que se evitaba plantear un referéndum sobre Monarquía o República, y se limitaba la enmienda a reafirmar los valores republicanos del PSOE.
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Las comisiones de investigación se solicitaron a raíz de unas informaciones publicadas que apuntan a que Juan Carlos de Borbón podría haber llevado a cabo una donación millonaria a la aristócrata Corinna Larsen, un dinero que podría tener su origen en una donación anterior del régimen saudí al entonces jefe del Estado.
Los socialistas han demostrado hasta en tres ocasiones que no quiere entrar en el fondo del asunto, y para ello no le importa aliarse con las derechas. Se limita a recordar que los letrados del Congreso ya han fijado posición en varias ocasiones a este respecto, dada la inviolabilidad del monarca.

1º. 10 de marzo

En los primeros días de marzo, el día 10 en concreto, PSOE, PP y Vox rechazaban por primera vez la creación de una comisión de investigación de las finanzas del rey emérito Juan Carlos I.
Antes de la celebración de la reunión de la Mesa, los letrados de la Cámara habían elaborado un informe sosteniendo que no era pertinente abrir una comisión de investigación por este asunto. El argumento de los servicios jurídicos del Congreso es que la Constitución establece la inviolabilidad del rey, una figura que, por lo tanto, «no está sujeta a responsabilidad». Esto es algo que será común en los tres rechazos de los tres partidos.
Fueron registradas dos peticiones: una de ERC y el Grupo Plural, y otra de Unidas Podemos. Ambas solicitudes estaban también apoyadas por Bildu, JxCat, Más País, Compromís y el BNG. 

2º. 30 de marzo

A finales de marzo de este año, del día 31, el PSOE volvía a unir sus votos a los del PP y Vox para tumbar una iniciativa que contaba con la firma de hasta ocho formaciones políticas y que volvía a ser apoyada por Unidas Podemos en el órgano de gobierno de la Cámara.
En esta ocasión la reunión de los miembros de la Mesa se celebraba a través de vías telemáticas, dado que el Congreso se encontraba en servicios mínimos por la emergencia sanitaria del coronavirus.
Las formaciones que respaldaban con su firma el registro de esta comisión volvían a ser ERC, PNV, JxCat, Bildu, CUP, Más País, BNG y Compromís, salvo que en esta ocasión fallaba Unidas Podemos.
La inviolabilidad de la que supuestamente goza Juan Carlos I ha servido de nuevo como argumento jurídico fundamental para rechazar una investigación en el Congreso.
Unidas Podemos apoyó su admisión en la Mesa, pero no firmaron la petición porque, a su juicio, «no es acertado el momento, y lo responsable es hacerlo después de la pandemia. En cuanto hayamos vencido a la epidemia, nosotros seremos implacables en este asunto, como siempre, y buscaremos todas las vías para investigar las presuntas actividades corruptas de Juan Carlos de Borbón», matizaron.

3º. 16 de junio

La Mesa del Congreso rechazaba este martes, de nuevo gracias a la suma de los votos del bipartidismo, junto con la muleta de la extrema derecha, dos peticiones para abrir una investigación parlamentaria que incluyera indagar en las finanzas de Juan Carlos I.
La excusa volvía a ser que la decisión de la Mesa está avalada por el criterio de los servicios jurídicos de la Cámara, que elaboraron un informe, conocido este lunes, en el que argumentan el rechazo en base a varios criterios, entre los que destaca la «inviolabilidad con efectos jurídicos permanentes» de la que gozaría el monarca respecto a los hechos que pretenden ser objeto de investigación.
Sin embargo, los informes de los letrados no son vinculantes, ya antes de conocer el criterio de los servicios jurídicos del Congreso se preveía que estos tres partidos votaran en contra de las dos peticiones para crear una comisión parlamentaria.
En este último intento había un elemento diferencial: la asunción por parte de la Fiscalía del Tribunal Supremo de la investigación de las finanzas del rey emérito, con el objetivo de «delimitar o descartar» si se han producido hechos susceptibles de tener relevancia penal después de la abdicación del monarca en su hijo, en junio de 2014.
Esto no ha sido suficiente para que el PSOE, un partido teóricamente republicano, diese su brazo a torcer para que finalmente se investiguen los desmanes del polémico monarca. No sabemos si habrá una cuarta oportunidad, pero tenemos claro, visto lo visto, que el voto del PSOE seguirá protegiendo la monarquía española.