Hay otra " Jira " popular, que llegó a reunir en los pasados 20/30 del XX a 25000 Romeros....

ersonas siguen la misa celebrada en lo alto del pico Paisano, bajo el Sagrado Corazón de Jesús. Álex Piña La jira al Naranco, un «símbolo de unidad de Oviedo» Tradición. El alcalde, parte de su equipo de gobierno y la portavoz de Vox estrenan el mandato en la eucaristía en Picu Paisano Covadonga del Nero Lunes, 19 de junio 2023, 01:07 | Actualizado 08:26h. El constante paso de vehículos por la avenida de los Monumentos durante la mañana de ayer presagiaba que mientras el tiempo lo permitiera, y lo hizo, la presencia en lo alto de Picu Paisano de vecinos de la ciudad para asistir a la eucaristía estaba asegurada. La cita lleva cuarenta y dos años realizándose. La Jira al Sagrado Corazón congregó a decenas de fieles y turistas frente a la estatua que 'cuida' a Oviedo desde el 21 de junio de 1963 tras dieciocho años de construcción. El director del Apostolado de la Oración en la diócesis, José Antonio García Quintana, compañero jesuita, acompañado del padre Pedro García Vera, superior de los Jesuitas en Asturias, ofreció una ceremonia en la que quiso resaltar aquello que une y no que divide. «Nos encontramos en el monumento al Sagrado Corazón de Jesús, símbolo de la unidad de la ciudad de Oviedo», aseguró García Quintana. Entre los asistentes, solo un día después del Pleno de investidura, el alcalde, Alfredo Canteli, y su mujer, Marta Suárez; y los concejales Mario Arias, Daniel Tarrio, María Velasco y Rosario Suárez. También la concejala Sonsoles Peralta, de Vox, acudió a la cita. Fue su 'estreno' en este nuevo mandato. El director del Apostolado de la Oración aprovechó la ocasión para recordar una conversación que mantuvo con Purita de la Riva, alma máter de esta cita, que no pudo acudir debido a su estado de salud: «En la base hay tierra recogida de todos los concejos de Asturias, nuevo símbolo de unidad y voluntad de todos para construir algo». Aunque ya no se vive como una gran fiesta multitudinaria, donde apenas quedaba espacio en lo alto del monte Naranco, y sin la posterior romería tradicional, la Jira sigue siendo meca para los fieles, incluso para quienes nunca habían subido hasta la zona más alta. «No sabía ni por dónde llegar, pero quería estar presente en la misa», aseguró María Luisa Ruiz, que no se la quiso perder. También llegaron hasta allí, senderistas y ciclistas de montaña que se encontraron con la cita religiosa. Una nueva ocasión que se inició y se cerró a cargo de la Agrupación Musical San Salvador de la Cofradía de los Estudiantes de Oviedo.