¿El adiós definitivo de las monedas?
Cristina Casillas
Está disponible tanto para tarjetas de crédito, de débito o de prepago y, muy pronto, llegará a la telefonía móvil.
¿Se imagina pagar una compra acercando su muñeca al datáfono? No, no es ciencia ficción. Recientemente La Caixa ha lanzado al mercado una pulsera Visa contactless, que permite pagar cualquier tipo de compra en comercios adaptados.
Las tarjetas contactless tienen como objetivo fundamental ahorrar tiempo en las compras, como asegura Joan Morlá, director del área de tarjetas de Caixabank. Basta con acercar la tarjeta al datáfono o TPV y si el importe es menor de 20 euros no será necesario marcar el PIN, lo que hace a este proceso ideal para realizar pequeñas compras, sin que haya que presentar un documento de identidad. En el caso de que se supere dicha cantidad, sí que habrá que marcar el número secreto, igual que cualquier otra tarjeta. La aceptación es tan buena que los cajeros comienzan a incorporar esta nueva tecnología.
Otra de las ventajas es que el usuario de este tipo de tarjetas gana en comodidad, ya que no tiene que salir de casa con dinero en efectivo. Además, es fácil controlar los pagos, ya que, por muy pequeño que sea, viene reflejado.
Antonio Macías, director de Emisión de Tarjetas del área de medios de pago para España y Portugal de BBVA, destaca que se trata de una tecnología cada vez más extendida.«Grandes superficies como El Corte Inglés o cadenas de comida rápida como MacDonald´s así como todos los TPV de BBVA permiten el pago con tarjetas contactless». Es tal el grado de penetración que para 2015 la entidad espera que ya haya 2,5 millones de tarjetas de este tipo.
Según datos de Visa, ya se han emitido más de 6 millones de tarjetas Visa sin contacto y se han instalado 376.000 terminales de pago, incluyendo los de grandes cadenas comerciales como El Corte Inglés, o Carrefour.Como resultado, el número de transacciones se ha quintuplicado durante el pasado año.
Seguridad
¿Qué garantías de seguridad ofrecen? ¿Cómo identifica el comerciante que soy el propietario de la tarjeta? ¿Qué pasa en caso de robo? Desde Visa destacan que las tarjetas sin contacto no tienen fuentes de alimentación para transmitir datos y sólo funcionan cuando se les acerca a unos pocos centímetros un lector de tarjetas contactless en el punto de venta. Esto hace que sea imposible para los delincuentes acceder a la información de la tarjeta a distancia.
Además, en el caso de cajeros, siempre se exigirá marcar el PIN. Macías destaca que en los dos años que lleva BBVA ofreciendo este tipo de productos no ha habido ninguna reclamación y en el caso de robo por tarjeta se actúa como con las tradicionales, el banco responde de esos cargos hasta que se bloquea. Además, la entidad vasca ha lanzado BBVA Wallet que permite bloquear el dispositivo desde el teléfono móvil.
Por su parte, OCU, la Organización de Consumidores y Usuarios, cree que esta nueva tecnología no aporta nada, salvo un incremento del riesgo de fraude ya que «consideran que cualquier persona que robe la tarjeta puede realizar operaciones por importe inferior a 20 euros» y el ahorro de unos pocos segundos no compensa el riesgo que se corre.
Aunque no sea mucho dinero es algo que debe mejorarse, sentencia Ileana Izverniceanu Portavoz de OCU. «No se trata de sustituir al efectivo como medio de pago sino de extender el uso de tarjetas en nuestras compras», aclara Macías. Los jóvenes y los clientes entre 35-45 años son los que más las utilizan aprovechando su implantación en lugares estratégicos.
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