El atletismo español empieza a resurgir. Después de unos años de muchas dudas, por fin España está cumpliendo con creces en un campeonato internacional. Hasta el momento, el equipo nacional ya se ha colgado cuatro medallas y todavía quedan por delante pruebas como el salto de altura o el salto de longitud donde Ruth Beitia o Eusebio Cáceres son firmes candidatos a estar en el podio. El Europeo de Zúrich es un campeonato que quedará en la memoria de España. Primero, porque Borja Vivas se convirtió en el primer atleta español de la historia en colgarse una medalla en lanzamiento de peso en un campeonato internacional al aire libre. Y después, porque Aauri Bokesa e Indira Terrero fueron las primeras mujeres en la historia en representar a España en una final de 400 metros lisos, y por si fuera poco, ésta última se colgó la medalla de bronce. Pero también será recortado porque el mediofondo español vivió uno de sus peores momentos.
David Bustos será el único representante español en la final de 1.500 metros que se disputará este domingo en Zúrich (15:05/ TDP). El atleta balear terminó último en su serie debido a una caída tras un empujón del austriaco Andreas Votja, por lo que la organización lo recalificó y correrá mañana. Ni Manuel Olmedo ni Adel Mechaal, en categoría masculina, ni Isabel Macías, en femenina,  lograron entrar en la final de una de las pruebas fetiche para el atletismo español en los últimos años. “Ha habido una recesión tremenda”,reconocía Juan Carlos Higuero a El Confidencial. El atleta de Aranda de Duero es un especialista en fondo y mediofondo y es en la prueba de 1.500 metros donde ha cosechado algunos de los  mayores éxitos de su carrera deportiva.
Arturo Casado, junto a Manuel Olmedo, tras proclamarse campeón de Europa en Barcelona 2010 (Efe). Arturo Casado, junto a Manuel Olmedo, tras proclamarse campeón de Europa en Barcelona 2010 (Efe).
Mientras continua con su recuperación tras una larga lesión, Juan Carlos Higuero sigue muy de cerca lo que está sucediendo en Zúrich, con especial atención al 1.500, donde había cuatro representantes españoles. El burgalés ha explicado a este periódico las causas de este retroceso en la disciplina. “Creo que ha sido una mezcla de todo. Todos los años no es lo mismo. Es una cuestión de generaciones. Las ha habido muy buenas y ahora no tenemos esa materia prima. Hay que esperar, todavía es pronto pero saldrán nuevos talentos. También se trata de una cuestión económica. Las ayudas se han reducido. Los patrocinadores se han ido más a la ruta y las becas se han reducido un 50%. Si tienes que compaginar atletismo y trabajo, no le puedes dedicar al atletismo todo lo que le tendrías que dedicar”, reconoce.
Fermín Cacho, Reyes Estévez, Arturo Casado, Natalia Rodríguez o Nuria Fernández son algunos de los nombres propios de esta disciplina junto con los de Manuel Olmedo y David Bustos. Ambos atletas ya saben lo que es subirse a un podio en un Europeo después de que lo hicieran en Barcelona 2010 y Helsinki 2012 respectivamente, pero en Zúrich sólo Bustos tendrá la oportunidad de luchar en la final por estar entre los tres mejores.
El atletismo español se ha descubierto en otras pruebas como una potencia. “Ahora mismo, el lanzamiento de peso es casi lo mejor que hay”, reconocía Higuero. Sin olvidar, por supuesto, disciplinas como el salto de altura o el salto de longitud donde el equipo español todavía tiene opciones de hacer un buen papel, o modalidades como los 400 metros lisos y la marcha donde Samuel García, Aauri Bokesa, Indira Terrero y Miguel Ángel López demostraron que hay presente y futuro. España está con cuatro medallas en su casillero y todavía queda competición por delante para seguir sumando más metales que devuelvan al atletismo a la gloria.