“Para mí los coches eran más bonitos en el pasado, suponían un reto mucho mayor a la hora de pilotarlos; era más divertido en algunos aspectos. Por otro lado, quizás ahora tengamos más adelantamientos, pero a veces creo que sería bonito volver a competir con los coches de antes”. Kimi Raikkonenquizás sea el piloto de la actual parrilla con antecedentes más similares a los de Max Verstappen, el adolescente de Red Bull que el próximo año debutará en la Fórmula 1. El finlandés solo completó 23 carreras de monoplazas antes de dar el salto a la Fórmula 1 aunque, desde luego, no a la edad del piloto holandés.
La noticia de Verstappen ha puesto sobre el tapete el nivel de exigencia de un monoplaza actual frente a otras épocas, uno de los temas recurrentemente planteado a los pilotos durante este fin de semana. En general, parece que hay unanimidad de opiniones: un Fórmula 1 es hoy en día menos 'bestia' y más fácil de pilotar que en el pasado, especialmente en carrera.
Newey: "Si ves MotoGP... esos chicos son superhéroes"
 Adrian Newey fue el sábado muy gráfico al expresar su opinión, "lo más crítico es que los coches parezcan rápidos, y si te sientas ante la televisión, debería ser como “buah, estos chicos son superhéroes, no podría nunca hacer eso” y, si soy sincero, no creo que los coches actuales hagan esto”, explicaba el ingeniero británico de forma gráfica el viernes, “si ves MotoGP sí tienes esa sensación, la de que esos chicos son superhéroes, mientras que con los coches actuales su relación peso potencia no es fantástica”.
En relación a los recién llegados, el panorama actual facilita su más rápida adaptación, “ creo que el hecho de que los jóvenes pilotos -sin menospreciarles-, pueden subirse a un coche e instantáneamente estar delante o ser competitivos es algo interesante y, aunque no hay una respuesta fácil, sería bueno hacer los coches un poco más rápidos”, concluía el británico.

Al margen de la mayor o menor complejidad técnica, los pilotos con un cierto bagaje a sus espaldas sí pueden sentir las diferencias. “Probé un Fórmula 1 con 17 años (2002) y, desde el punto de vista del pilotaje, podría haber estado listo”, explicaba el jueves Nico Rosberg, “pero en aquel momento la limitación era física, porque todavía estaban los V10, había mucha carga aerodinámica, no sé si mas apoyo, pero el agarre de los neumáticos era mayor, esa era la limitación para mí a aquella edad, pero hoy en día es más fácil físicamente, así que esto le ayudará (a Verstappen)”. 
Agarre de neumáticos y repostajes
Rosberg necesitó cuatro años para debutar con Williams. De hecho varios pilotos de la actual parrilla se subían a un monoplaza por primera vez a esa edad, como reconocía por ejemplo Jules Bianchi. El francés recuerda que en su temporada debutante en monoplazas en la Fórmula 2.0, la misma categoría en la que competía Daniil Kvyat . 
“Estoy de acuerdo con Nico”, reconocía Felipe Massa, quien se subió a un Fórmula 1 por primera vez con veinte años, “era mucho más difícil entonces que ahora, diría que la carrera es muy fácil desde el punto de vista físico, lo que facilita a un piloto joven aprender y entender mejor, pero en aquella época era mucho más difícil, quizás sería mejor si pudiera hacer cada vuelta como una de clasificación”, apuntaba el brasileño, "con los neumáticos durando para siempre, cada vuelta en carrera como una clasificatoria, una carrera más dura físicamente".
Para Massa, al margen del mayor ‘grip’ de los neumáticos, también influía el repostaje en la mayor velocidad, “con un máximo de 60 kilos en el coche, y 55 siempre, era mucho más rápido la mayoría de las vueltas, es por lo que resultaba más difícil desde el punto de vista físico”. 

En general, como Alonso y Vettel ha reconocido esta temporada, a los pilotos les queda una sensación general de frustración ante un Fórmula 1 actual como máquina bruta y extrema. Y sobre todo en carrera, donde el consumo y el cuidado de los neumáticos acentúan la tendencia actual de los monoplazas hacia una menor exigencia física durante la prueba.
"Salir del coche y caernos al suelo”
Para Hamilton, “los coches son más fáciles de conducir porque son más lentos”, explicaba en su columna personal, en la que agradecía haber debutado con margen de formación y experiencia. De hecho, si se repasa la lista de récords de los circuitos actuales, muchas de las marcas se remontan a 2004, con algunas excepciones. Por ejemplo, en  Spa Francorchamps –con modificaciones recientes en el trazado- el récord se remonta a 2009 y en manos de Sebastian Vettel, con 1.47.263. El mejor tiempo de Hamilton este viernes, cfue de 1.49.189, con un monoplaza un segundo más rápido de media que sus perseguidores. 
“Quizás deberíamos sudar más”, remataba Daniel Ricciardo al respecto."Por supuesto, no terminamos la carrera como si estuviéramos físicamente muertos”, explicaba Bianchi para reafirmar las palabras de Massa, “todavía tenemos energía, así que quizás sea mejor para la gente desde fuera que salgamos del coche y nos caigamos al suelo”, comentaba a modo de broma el francés. Pues quién sabe, en esta Fórmula 1 que encuentra soluciones para todo, también podría ser una posiblidad...