El G-20 pide más salidas comerciales a la política de aranceles de EEUU
- Trump podría anunciar el viernes tasas a China de 60.000 millones
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En la imagen, Donald Trump, presidente de Estados Unidos. Foto: Reuters.
El primer acercamiento entre los ministros de Economía y Finanzas del Grupo de los 20 desde que Estados Unidos anunciase los aranceles globales al acero y al aluminio se mostró más bien tenso. Es por ello que, desde Buenos Aires, el comunicado al cierre de la reunión ministerial, donde también estuvieron presentes los banqueros centrales de las principales economías, reafirmó el compromiso para combatir el proteccionismo. El G-20 abre la puerta a avanzar en la regulación de las criptomonedas
Dicho esto, en el texto se reconoció la necesidad de "más diálogo y acciones" comerciales, antes de que la administración Trump active el 23 de marzo los gravámenes del 25% y el 10%, respectivamente, a las importaciones del acero y el aluminio.
Una decisión de la que quedan exentos países como Canadá, México y Australia, mientras que la comisaria de Comercio europea, Cecilia Malmström, intenta defender ante el secretario de Comercio de EEUU, Wilbur Ross, que el Viejo Continente y aliado de Washington también se libre de estos aranceles.
"El comercio internacional y la inversión son importantes motores de crecimiento, productividad, innovación, creación de trabajo y desarrollo", aseguraron los altos funcionarios en la declaración conjunta. "Reafirmamos las conclusiones de nuestros líderes comerciales en la Cumbre de Hamburgo y reconocemos la necesidad de más diálogo y acciones. Estamos trabajando para fortalecer la contribución al comercio de nuestras economías", añadió el comunicado.
Un mensaje que llega en un momento en que la Casa Blanca, además de los gravámenes al acero y al aluminio, ha impuesto aranceles a las importaciones de paneles solares y lavadoras. Al mismo tiempo, está previsto que el presidente Donald Trump anuncie tan pronto como el viernes represalias comerciales en forma de aranceles adicionales por valor de 60.000 millones de dólares contra China por el robo de propiedad intelectual llevado a cabo por el gigante asiático.
Sin embargo, las medidas unilaterales emprendidas por Washington, que busca reducir la brecha comercial con Pekín en al menos 100.000 millones de dólares, afectan de forma indiscriminada a muchos aliados tradicionales de EEUU, entre ellos Europa. El ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, se reunió con el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, durante la jornada del lunes y dejó claro a su homólogo americano que "espera una completa exención de estos nuevos aranceles estadounidenses para la UE en conjunto". "Creo que deberíamos poder alcanzar ese objetivo. Es difícil pero no está fuera de nuestro alcance", matizó.
Desde la Brookings Institution, su investigador Max Bouchet recuerda que si la UE no consigue sumarse a la lista de países exentos de estos gravámenes, contraatacará imponiendo aranceles sobre una variedad de productos estadounidenses. "Además de la UE, otros socios comerciales clave han anunciado su intención de tomar represalias, incluidos China y Brasil", recuerda Bouchet, quien considera que los costes potenciales para las economías locales y estatales de estas medidas "revelan cuán miopes y contraproducentes son los aranceles de Trump".
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