El alcalde achaca el retraso en la recuperación del Pevidal a la falta de plantilla municipal
La segunda edición de la Jira al Naranco se convierte en un «grito de ayuda» para «no seguir viviendo de espaldas al monte»
La Jira al Naranco fue ayer una fiesta, ese era su cometido, pero también fue un acto reivindicativo para poner de manifiesto la necesidad de recuperar este espacio para todos los ovetenses. Fue el mensaje común que lanzó el equipo de gobierno durante la segunda edición de esta fiesta popular recuperada el año pasado tras noventa años sin celebrarse. La Jira sirvió para poner de manifiesto la necesidad de ir «concienciando» y «sensibilizando» a los ovetenses de «que tenemos un patrimonio muy importante en este mudo de naturaleza y de patrimonio histórico artístico» avanzó el alcalde. Wenceslao López incidió en el mismo mensaje que el resto de socios de gobierno: hay que dejar de dar la espalda al monte.
En este sentido aún existe un proyecto en el aire para recuperar este entorno. Se trata de la finca del Pevidal. Propiedad en parte municipal y en parte regional, López avanzó ayer que «hay una negociación hecha con el Principado» para que este ceda su parte al Ayuntamiento y darle así un uso didáctico y recreativo.
Negociaciones aparte, lo que reconoció el socialista es la falta de proyecto para dar vida a esta finca del Naranco. Lo achacó a la falta de recursos: «Si tuviésemos medios humanos suficientes podríamos haber elaborado ese proyecto futuro y haber rematado esa operación», explicó el alcalde. Ante esa escasez, justificó que el Ayuntamiento debe declinarse por sacar adelante proyectos más prioritarios.
Plan especial
Entre ellos, y también en el Naranco, la redacción del plan especial. Tal como adelantó EL COMERCIO, el área de Urbanismo tiene previsto que salga adelante este otoño, tras dos licitaciones fallidas. El alcalde está convencido de que a la tercera irá la vencida, pero pido «precaución» en los tiempos. «A nivel teórico, esa es la previsión, esa es la intención y la voluntad, pero cojámoslo con la precaución que hay que coger todo proceso administrativo», argumentó.
En este sentido, la vicealcaldesa Ana Taboada aseguró que «se pondrán todos los mecanismos legales posibles» para lograr el objetivo. Anunció que se va a desarrollar un proceso negociador sin publicidad invitando a varias empresas con solvencia técnica suficiente para llevar a buen puerto el proceso. La ley de contratos permite esta maniobra, explicó Taboada, en el caso de haber quedado desierta la licitación en dos ocasiones, como ha así ha sido. El plan especial para el Naranco fue una de las grandes actuaciones previstas por el gobierno local para este mandato con el fin de rescatar para los ciudadanos esta parte de la ciudad. Este mensaje fue el que ayer se repitió durante la celebración de la Jira. En boca del presidente de Manos por el Naranco y promotor de esta fiesta, el evento busca recuperar una tradición perdida, convertirse en jornada de convivencia y reivindicativa. «Hoy tiene que ser un día en el que el Naranco pegue un grito de ayuda y que todos los oventense que durante tantos años le hemos dado la espalda empecemos a mirarle a la cara y recuperar el tiempo perdido para no seguir viviendo de espaldas al Naranco», enfatizó Carlos Fernández Llaneza.
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