Caída sin precedentes de la inversión en España que se sitúa a niveles de 1960
No hay precedentes: en el primer trimestre de este año se desplomó hasta el 17,6% del PIB
El Plural.
La inversión en España, tanto pública como privada, y su impacto en el Producto Interior Bruto (PIB) comenzó a medirse en 1960 y cada crisis económica refleja en la serie histórica una contracción de la inversión. En el primer trimestre de este año la inversión se desplomó hasta el 17,6% del PIB, según datos del Banco de España, el porcentaje más bajo en 54 años y desde que se registran estos datos en nuestro país.
No hay precedentes
Desde que el Banco de España comenzó a contabilizar y analizar el dato de la inversión nunca se había registrado una caída semejante. Hasta el primer trimestre de este año el peor dato correspondía a 1983, en plena crisis industrial de la década de los 80 del siglo pasado, pero aún así el dato de ese año fue mejor y la inversión pública más la privada representaron el 18,2%. El peor dato de la serie histórica se produce cuando el Gobierno asegura con rotundidad que la crisis se ha acabado, no solo eso sino que desde el Presidente Rajoy hasta todo el PP proclama que la economía crece como en ningún otro país europeo. El dato del desplome de la inversión parece no existir en el Ministerio de Economía.
Desde que el Banco de España comenzó a contabilizar y analizar el dato de la inversión nunca se había registrado una caída semejante. Hasta el primer trimestre de este año el peor dato correspondía a 1983, en plena crisis industrial de la década de los 80 del siglo pasado, pero aún así el dato de ese año fue mejor y la inversión pública más la privada representaron el 18,2%. El peor dato de la serie histórica se produce cuando el Gobierno asegura con rotundidad que la crisis se ha acabado, no solo eso sino que desde el Presidente Rajoy hasta todo el PP proclama que la economía crece como en ningún otro país europeo. El dato del desplome de la inversión parece no existir en el Ministerio de Economía.
A la mitad en cinco años
Al comenzar la crisis actual la inversión llegó a alcanzar el 30,7% del Producto Interior Bruto y cinco años después está en casi la mitad (17,6%). Es un recorte brutal en un período de tiempo tan corto, un recorte que algunos expertos cifran en 120.000 millones de euros. La inversión pública no solo se ha frenado en seco (ni infraestructuras ni nuevos servicios), sino que se ha recortado año tras año, y la inversión privada sigue sin arrancar porque las empresas que quedan están ocupadas en reducir deuda y los bancos no abren el grifo del crédito. La única inversión que se produce en España en la de los grandes fondos de inversión extranjeros que vienen en busca de gangas.
Al comenzar la crisis actual la inversión llegó a alcanzar el 30,7% del Producto Interior Bruto y cinco años después está en casi la mitad (17,6%). Es un recorte brutal en un período de tiempo tan corto, un recorte que algunos expertos cifran en 120.000 millones de euros. La inversión pública no solo se ha frenado en seco (ni infraestructuras ni nuevos servicios), sino que se ha recortado año tras año, y la inversión privada sigue sin arrancar porque las empresas que quedan están ocupadas en reducir deuda y los bancos no abren el grifo del crédito. La única inversión que se produce en España en la de los grandes fondos de inversión extranjeros que vienen en busca de gangas.
La inversión de las familias cae a menos de la mitad
La espiral de desempleo, recortes salariales, recortes en las prestaciones por desempleo, subida de impuestos y recortes en prestaciones sociales ha tenido un impacto brutal en la economía de las familias españolas. Según datos del Banco de España, al comienzo de la crisis la inversión de las familias representaba el 9,7% del PIB y en el primer trimestre de este de 2014 ha caído al 4,3%, menos de la mitad.
La espiral de desempleo, recortes salariales, recortes en las prestaciones por desempleo, subida de impuestos y recortes en prestaciones sociales ha tenido un impacto brutal en la economía de las familias españolas. Según datos del Banco de España, al comienzo de la crisis la inversión de las familias representaba el 9,7% del PIB y en el primer trimestre de este de 2014 ha caído al 4,3%, menos de la mitad.
Inversión pública inexistente
El recorte de la inversión pública ha sido el mayor de todos. Tradicionalmente se ha considerado que la inversión pública debe suponer el 3% del PIB anual para mantener una economía sostenible a largo plazo, sin embargo en el primer trimestre de 2014 ha caído hasta el 1,5% del PIB, es decir a poco menos que tareas de mantenimiento. En el año 2009 la inversión pública llegó a alcanzar el 4,5% del PIB gracias al Plan E de Zapatero, un macro plan de inversiones públicas puesto en marcha para contener el derrumbe de la construcción. Siguiendo la doctrina ‘Keynesiana’ se evitó la destrucción de un millón de puestos de trabajo, pero el PP y la derecha mediática se encargaron de ridiculizar el plan asegurando que los ayuntamientos lo utilizaban para despilfarrar. Dentro del “Plan E” iban también las ayudas a las empresas del automóvil , la únicas que el PP ha prorrogado. El resultado es que con Rajoy sigue habiendo, a día de hoy, más parados de los que ‘heredó’ de Zapatero.
El recorte de la inversión pública ha sido el mayor de todos. Tradicionalmente se ha considerado que la inversión pública debe suponer el 3% del PIB anual para mantener una economía sostenible a largo plazo, sin embargo en el primer trimestre de 2014 ha caído hasta el 1,5% del PIB, es decir a poco menos que tareas de mantenimiento. En el año 2009 la inversión pública llegó a alcanzar el 4,5% del PIB gracias al Plan E de Zapatero, un macro plan de inversiones públicas puesto en marcha para contener el derrumbe de la construcción. Siguiendo la doctrina ‘Keynesiana’ se evitó la destrucción de un millón de puestos de trabajo, pero el PP y la derecha mediática se encargaron de ridiculizar el plan asegurando que los ayuntamientos lo utilizaban para despilfarrar. Dentro del “Plan E” iban también las ayudas a las empresas del automóvil , la únicas que el PP ha prorrogado. El resultado es que con Rajoy sigue habiendo, a día de hoy, más parados de los que ‘heredó’ de Zapatero.
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