Barcelona 6-1 Roma: La MSN vuelve a funcionar
El Pistolero. Ya nadie se acuerda de sus mordiscos y de su carácter polémico que envolvió su fichaje por el Barcelona. No le importó al club de la Ciudad Condal en esperar los cuatro meses de sanción que le cayeron a un Luis Suárez, donde primero en laPremier League y después en la FIFA le habían marcado con una cruz. Con el peso de llevar un 9 azulgrana que había podido, entre otros, con Samuel Etoo, Zlatan Ibrahimovic o incluso conDavid Villa, el charrúa tenía la obligación de lavar su imagen a la vez de consolidarse de una vez por todas en la elite mundial. Un año después, la respuesta no ha podido ser más contundente. Hoy el Barcelona pasó por encima de la Roma (6-1) y selló su pase a la siguiente ronda como primero de grupo.
Estaba en el aire hasta esta jornada por aquel empate que se dejó en el Olímpico. Pero esta noche no ha tenido piedad con el rival contra el que no había ganado nunca en la Champions League (con al menos dos partidos jugados). Los focos estaban reservados para la vuelta de Leo Messi al once titular, pero la gloria se la llevó Luis Suárez con dos tantos y una asistencia. No hay nadie en la Champions League que haya conseguido más dobletes que el charrúa en 2015. Y junto con Leo se convierte en los únicos futbolistas de esta edición en repetir goles y asistencias. Cinco goles en cinco partidos de Champions League, nueve en los últimos seis. Una bestia que sirvió de ejecutor a una Roma muy roma, que se dedicó a juntar las dos líneas para jugar de forma peligrosa al fuera de juego. El resultado no fue otro que el 3-0 camino de los vestuarios.
Muerto por la envidia estadística, Leo Messi le copió en la segunda mitad cuando el “pescado estaba vendido”. El Barça empezó la segunda parte como terminó la primera: controlando (Sergio Busquets había dado 69 pases en la primera mitad y fue sustituido), y avasallando. No tardó el conjunto culé en marcar el cuarto. La MSN en acción para que Gerard Piqué se beneficiara de ello y empujara a la red a pase de la Pulga el gol que el pasado sábado le quitó Munir. Solo hay tres defensas en la historia de la Champions League que han marcado más tantos que el catalán:Roberto Carlos, Panucci e Iván Helguera.
El tridente de moda no paró y Leo Messi, no contento con reencontrarse con el gol más de dos meses después, marcó su doblete. Neymar lanzó desde la izquierda, Luis Suárez tocó y Leo Messi remató. Que Szczesny tocara y dejara muerto el balón evitó el doblete en asistencias del uruguayo. La manita era una realidad y lejos de que el partido se durmiese no dejaron de pasar cosas. Como, por ejemplo, que el Barcelona tuviera como saldo negativo la lesión de Sergi Roberto, o como que Leo Messi, en tareas defensivas, estuviese a punto de cometer penalti siendo amonestado. Toda una novedad. El protagonismo del epílogo se lo adjudicó dos penas máximas que detuvieron los porteros a sendos penas máximas mal lanzadas. Leo Messi fue generoso y perdonó el hat-trick para darle el balón a Neymar, ya que había provocado el penalti y que a esas alturas era el que más lo intentaba para buscar su golito. Por la carrerilla que tomó normal que no le salieran las cosas de cara. El portero polaco adivinó la intención pero se la dejó franca a Adriano para fusilar, estrenarse en Champions League con el Barça tras tantos años y dejar el resultado en un marcador de tenis.
Acto seguido, Cakir no lo dudó y señaló como máxima infracción la obstrucción de Vermaelen sobre Dzeko. El bosnio emuló a Neymar y provocó que Ter Stegen, que ya había hecho alguna parada de mérito (pregunten al ex canterano culé Iago Falque), se llevara una de las enésimas ovaciones de la noche. Todo ello en un partido que concluyó con el tanto del honor de la Roma, marcado por el propio Dzeko de cabeza, que no evitó que este encuentro confirme el gran estado de forma del Barcelona y que vaya a pasar a la historia, antes de que el devenir político se anticipe, como la mayor goleada española en Europa sobre un conjunto italiano.
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