O sea el Grupo asturiano de referencia, LOS MASAVEU.
Se busca director general para la Fundación Príncipe de Asturias: candidatos, envíen CV con foto reciente
Desde 1980, el periodista Graciano García dirige la Fundación Príncipe de Asturias, pero ha llegado la hora de su jubilación. Los patronos aún no han definido el perfil ideal para el puesto, ni han acudido a los servicios de ningún head hunter especializado. Así las cosas, se ruega a los candidatos interesados que envíen su currículum actualizado o, en su defecto, postulen en los distintos sectores de la crème asturiana.
Por un lado, figuran pretendientes como Jacobo Cosmen, heredero de la saga autobusera Alsa. Jacobo forma parte del patronato Príncipe de Asturias como representante de la sociedad CMC XXI que construye el Palacio de Congresos Princesa Letizia, diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava. Su padre, el empresario Pepe Cosmen, apoyó a la Fundación desde sus orígenes. Además los Cosmen Menéndez-Castañedo construirán un Palacio de Justicia que arrendarán al Principado durante treinta años con opción a compra. Por tanto, las relaciones con el Gobierno regional son inmejorables.
Jacobo vive en Somió, la Moraleja asturiana, donde sueña con recibir en su casoplón a los premiados. No en vano, el heredero se ha comprado un palacete que perteneció a la ex suegra de Fernando Fernández Tapias (Fefé) y “por el que pagaron 400 millones de las antiguas pesetas”, murmuran sus allegados. (Piscina climatizada, tres pisos y amplio sótano con choco). Antes habitaba otro chalecito que vendido a Alberto Concheso, el Bill Gates de las tecnológicas asturianas.
Los Masaveu habitan cerca, pero Fernando, el primogénito de la saga, pese a ser gran amigo de Jacobo, parece ser que apoyará a Felipe Fernández, yerno de los oftalmólogos oficiales del reino, los Fernández Vega, los más malvados lo llaman “el jarrón chino”. No en vano, Felipe es director general de Cajastur y en su día fue consejero de Agricultura del Principado con el Gobierno socialista de Pedro de Silva. Aunque el mismísimo Gabino de Lorenzo le invitó públicamente a “fichar por el Partido Popular y olvidar sus pecadillos políticos de juventud…”.
El año pasado, en el nombramiento del actual presidente de la Fundación Matías Rodríguez Inciarte, hubo pataleo por parte del sector integrado por Felipe; Manuel Menéndez, presidente de Cajastur, y Fernando Masaveu, al considerar que la entidad financiera asturiana al aportar una fuente considerable de fondos tendría derecho a un puesto de relevancia en el sanedrín principesco. El lobby de los Masaveu incluso expresó su disidencia por escrito. Para los más pragmáticos Felipe es el mejor aspirante.
No obstante, existe un tercero en discordia. Se trata del ex rector Juan Vázquez. Las lenguas más viperinas de la jet local opinan que “lleva años trabajándose a Botín, don Emilio, y ahora que el académico está en paro necesita un puesto para demostrar su valía. Sin embargo, aunque siente simpatía por el PSOE, no pasa por su mejor momento en las relaciones con el presidente Areces”.
Sea como fuere, al ser preguntado por la posibilidad de sucesión, Vázquez responde con sonrisa y evasivas: “Ni sí, ni no…, debería decir que no sé y no contesto. Graciano García es un gran director, yo le ayudaré en todo lo que me pida”. De momento quizá se tanteen las simpatías para luego convencer al Príncipe Felipe sobre la idoneidad del sucesor. ¿Quién logrará el codiciado puesto? Se abren
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