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Será el IVA, IRPF o la eliminación de los 400 euros?Prepárese para la subida de impuestosPese a que Ocaña insiste a que no hay reforma fiscal sobre la mesa, los expertos apuntan que la habrá después del verano05/07/2009 -

Prepárese para la subida de impuestos.El Gobierno tendría que recaudar al menos 15.000 millones de euros más para que la estructura presupuestaria de 2010 pueda mantenerse.Noticias relacionadas
Más informaciónToca subida de impuestos. Sin embargo, en momentos de crisis económica no es fácil acertar con la tecla adecuada. Hay recorrido para elevar la mayor parte de los impuestos, aunque los expertos apuestan por subidas en el IVA y por la supresión de las deducciones de los 400 euros y del «cheque bebé».


¿Se ha llevado una sorpresa con la declaración de la renta de 2008? ¿Está pensando en planificar lo que queda de 2009 para no pagar tanto a Hacienda el año que viene? Pues, además, aproveche para estudiar los cambios fiscales que se avecinan en 2010. Ya no es una sorpresa para nadie que a la vuelta del verano se decidirá una subida de impuestos. El Gobierno ha dejado claro que el déficit del Estado tiene que «reconducirse». No queda otra alternativa que contener el gasto público y aumentar la recaudación. Según unas recientes palabras del secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, el Gobierno está analizando todos los impuestos y todas las medidas concretas en materia de fiscalidad que puedan aumentar la recaudación. Pese a ello, Ocaña ha insistido en que no hay una reforma fiscal sobre la mesa.

No obstante, si nos atenemos al volumen de recaudación que se maneja en el sector, el Gobierno tendría que recaudar al menos 15.000 millones de euros más para que la estructura presupuestaria de 2010 pueda mantenerse. Según los expertos, serán el IRPF y el IVA los impuestos que más probabilidades tienen de subir en 2010. Por ello, hemos realizado una encuesta entre los fiscalistas más destacados del panorama nacional para ver qué impuestos pueden subir y qué medidas pueden tomar los contribuyentes.

Tramos y tipos de tarifa. La mayor parte de los expertos destacan subidas en la tarifa del IRPF, aunque señalan que sería una opción válida, si no fuera por el perverso efecto que tendría sobre el consumo de las familias. «Dada la capacidad recaudatoria del IRPF, la solución más sencilla y contundente para corregir el desequilibro presupuestario puede estar en incrementar la carga tributaria por dicho impuesto», explica Eduardo Ramírez, socio de Cuatrecasas, Gonçalves Pereira. Por su parte, Luis del Amo, director del Registro de Economistas y Asesores Fiscales (REAF), señala que no puede descartarse una subida para las rentas altas. Aunque indica que meter otro tramo o subir el que hay no soluciona mucho y perjudicaría la posición competitiva de España, ya que el tipo máximo es el que se suele utilizar para las comparaciones con otros países.

400 euros y «cheque bebé». En cambio, la mayoría de los fiscalistas si que ven posibilidades de que se eliminen las deducciones de los 400 euros y del «cheque bebé», de 2.500 euros. «La supresión o drástica reducción de la deducción de 400 euros, que puede aportar unos 4.000 millones de euros. La limitación, según tramos de renta o la supresión de los 2.500 euros por hijo, puede suponer también unos cientos de millones de euros», explica Francisco de la Torre, secretario general de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE). Pero los expertos señalan que para ser efectiva, esta medida tendrá que afectar a la casi totalidad de los contribuyentes. «Si se limita a las rentas mayores de 24.000 euros, el importe recaudado sólo ascendería, en el caso del los 400 euros, a unos 2.000 millones», indica Luis del Amo, de REAF.

Deducción por vivienda. La deducción por adquisición de vivienda habitual no tendría un efecto inmediato, ya que se conservarían los derechos adquiridos de los contribuyentes que actualmente se benefician de ella. Sin embargo, los fiscalistas apuntan que podría ser una medida muy efectiva para reducir el déficit público en ejercicios posteriores, cuando se acabe el recorrido de las subidas que se aprueben a la vuelta del verano. «La deducción por adquisición de vivienda, parece que se tocará en 2011 y no en 2010», afirma Francisco de la Torre. «Con la eliminación de esta deducción, además de seguir los consejos de organismos internacionales, se conseguiría un importante ahorro. En 2006, última estadística publicada sobre el IRPF, la deducción por vivienda habitual en todas sus modalidades supuso 6.310 millones. Sin duda la partida más importante en materia de deducciones», señala José Manuel Díaz-Arias, presidente del Bufete Díaz-Arias y de Datadiar.com. «El contribuyente que tuviera intención de tomar alguna decisión respecto a su vivienda habitual, deberá tener presente que si la realiza en 2009, se respetarán sus derechos adquiridos», añade Díaz-Arias.

Base del ahorro. Los expertos no ven con buenos ojos una subida de los impuestos que gravan las rentas de capital, aunque no descartan que no puedan verse afectadas por las medidas que tome el Gobierno. «La base del ahorro (18 por ciento) probablemente suba y puede ayudar a la recaudación. Aunque tendrá efectos negativos en la competitividad y en el ahorro, aun así, es probable que se haga», recalca Francisco de la Torre. Los analistas indican que, además, tendría un escaso efecto recaudatorio: este tipo de rentas sólo representa, aproximadamente, el 3,84 por ciento de las fuentes de renta declaradas. «No obstante, cualquier modificación que pueda adoptarse al respecto ha de ser congruente con los niveles de carga tributaria asociada a estos conceptos de renta en los países de nuestro entorno», advierte Eduardo Ramírez. Los asesores fiscales coinciden en que, ante la duda, una buena estrategia del inversor puede ser realizar una buena gestión de la compensación de pérdidas y ganancias, teniendo en cuenta que parte de las minusvalías que haya realizado en 2009 pueda compensarlas con plusvalías en 2010 y siguientes, si se sustenta una recuperación de los mercados.

Beneficios de los planes de pensiones. La unanimidad es total entre los expertos consultados. No se deberían cercenar más los sistemas de previsión social si se pretende motivar a su implantación, indican en Díaz-Arias. «La incidencia de los beneficios fiscales de los planes de pensiones es muy directa en las decisiones de ahorro en productos de previsión social», señala Eduardo Ramírez. Los inspectores de Hacienda, indican que si estos beneficios se reducen de forma importante, se acabará con el sector, y será muy negativo para el ahorro a largo plazo. Por ello, los asesores creen que la tradicional manera de reducir la factura fiscal en el IRPF mediante aportaciones al plan de pensiones seguirá siendo una estrategia válida en el futuro.

Peaje fiscal a los fondos de inversión. Los fiscalistas tampoco ven las ventajas de eliminar el peaje fiscal de los fondos de inversión por el escaso impacto que tendría en la recaudación. Las ganancias patrimoniales sólo representan un 0,53 por ciento de las fuentes de renta declaradas, indican en Díaz-Arias. Además, los inspectores de Hacienda señalan que «si se cambian drásticamente las reglas de juego, el efecto desincentivador puede ser muy importante y puede limitar en el futuro la capacidad para hacer política económica, porque nadie se fíe de que las medidas implantadas no sean revocadas en el futuro. Este tema es muy relevante en algo tan volátil como el capital».

IVA e Impuestos Especiales. «En momentos de baja inflación, el incremento en algunos tipos de IVA y en algunos Impuestos Especiales, pueden ser una solución en la recaudación. Es la solución de otros países europeos», indica José Manuel Díaz-Arias. «Los impuestos especiales subirán con toda probabilidad. En España son bajos en comparación con la UE», afirma Francisco de la Torre. El incremento puede llegar incluso en este 2009, como ha sucedido con los carburantes y el tabaco. «El alcohol es más posible que se suba después del verano para no desincentivar la entrada de turistas», señala Luis del Amo. Los expertos no las tienen todas consigo, sin embargo, en el caso de posibles subidas del IVA. Es probablemente donde mayor impacto recaudatorio se conseguiría. «Pero castigaría el consumo y, fundamentalmente, existe el riesgo de que un incremento del fraude suponga menos recaudación en lugar de más. Ya ha ocurrido con anterioridad», matiza De la Torre.

Sociedades. Los fiscalistas señalan que no hay márgenes de subida para este Impuesto por encima de las medias de la UE. Además, supondría un fuerte impacto negativo en la confianza de los inversores y empresarios subir un impuesto que se acaba de bajar. Al igual que en IVA, una subida de Sociedades conllevaría un grave problema de control.