El equipo de gobierno quiere «partir de cero» en las negociaciones por la fábrica de La Vega
Rechaza una proposición del PSOE para pedir la corrección del valor catastral asignado a los terrenos de la antigua factoría armamentística
De lo andado hasta ahora, nada. El nuevo equipo de gobierno quiere partir de «base cero» en las negociaciones con Defensa para recuperar los terrenos de la antigua fábrica de armas de La Vega. El concejal de Economía, Javier Cuesta, justificó ayer así el rechazo de los dos grupos de gobierno a una proposición del portavoz socialista, Wenceslao López, para pedir al Catastro una revisión de la tasación de la antigua factoría armamentística, cerrada desde 2012.
Cuesta sostuvo que la proposición de los socialistas solo buscaba «enredar sobre lo que fueron incapaces» de resolver en cuatro años de gobierno, en lo que calificó como «el fiasco de La Vega». Insistió en que «lo único que hay» es un protocolo de intenciones «sin obligaciones para las partes». Por ello defendió la necesidad de «poner en marcha un proceso de interlocución con Defensa desde cero», cuando haya «una interlocución válida en Madrid». En su opinión, parte del «fiasco» es atribuible a que Wenceslao López negoció a un nivel demasiado bajo.
Lo que no está tan claro es cuál será el objetivo cuando se retomen las conversaciones. «Nuestra estrategia no pasa irrenunciablemente por la adquisición», explicó Cuesta, sino por el modo que «tenga el mínimo o ningún coste por la reversión». Recordó que el alcalde planteó al presidente del Principado un proyecto entre las tres administraciones para «actuar sobre los terrenos» y puso como ejemplo que «en La Coruña, hay un modelo distinto», un posible alquiler de las instalaciones militares.
Industrial o residencial
Las dos situaciones son «completamente distintas», contrapuso Wenceslao López. Para empezar porque las instalaciones de La Coruña están en uso y aunque la empresa que las emplea bordea la liquidación, «los juicios a veces se complican», pero sobre todo «porque Oviedo está en una disposición única de adquirir los terrenos de La Vega por un coste muy reducido».
Eso es lo que pretendía su proposición, explicó. En un escrito al Ayuntamiento, Defensa transcribió el pasado abril una valoración catastral de los terrenos de 22 millones de euros, «un valor que, multiplicado por dos, sirve de referencia del de mercado», expuso. Aquel informe, sostuvo, le permitió conocer que «existe un error en la valoración» porque tasa los terrenos como residenciales y no como industriales, como los define el PGOU. Para corregir ese «error», López proponía pedir al Catastro una corrección que, además, tuviese en cuenta que los suelos están afectados por los entornos de protección de Santullano, el Camino de Santiago y la Ruta de la Plata y la existencia de un importante patrimonio cultural por catalogar en el recinto. Factores, sostuvo, que reducirían «muy por debajo de los 44 millones» el valor de referencia de los terrenos para su compra a Defensa y recordó que «hay un protocolo en el que se dice que ambas partes valorarán los terrenos de acuerdo a su calificación actual».
Cuesta trató de desmontar el argumento. Afirmó que «le hemos preguntado al Catastro de forma extraoficial y nos dice que no hay ningún error», que «la valoración se hace en función de unos criterios, entre ellos el entorno». Preguntado acerca de por qué el equipo de gobierno no había solicitado una aclaración oficial, que, de paso desmontase el argumento de los socialistas, sostuvo que «no queremos abrir un expediente que nos conduzca» hacia una compra.
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