¿Pero tiene futuro Foro?
Cascos y Coto quieren ampliar la estructura directiva del partido, crear las juventudes casquistas y cerrar cualquier hueco al PP para evitar la desaparición
DOMINGO 27 DE SEPTIEMBRE DE 2015
¿Tiene futuro Foro? La convención de militantes celebrada en Llanera debatió el devenir de una formación ligada a Cascos tan estrechamente como demuestran sus datos electorales. La desaparición en las listas de su fundador supuso un tsunami en las últimas autonómicas y municipales, un varapalo del que aún no parece haberse repuesto. La pérdida de alcaldías y el desplome de diputados pueden confirmarse en los comicios generales de diciembre. “Tenemos que remontar una situación difícil”, afirmó ayer Francisco Álvarez-Cascos. La receta: cerrar filas, reforzar la estructura interna, encomendarse a las juventudes casquistas (Foro Joven) y negar hasta la saciedad la reunificación con el PP, que puede suponer una sangría de votantes.
El partido de derechas vive su momento más bajo aunque la autocrítica no es su punto fuerte. La cuesta abajo es muy visual y está representada gráficamente por la pérdida de votos que sufre Foro y que empezó justo en el momento en que comenzó a gobernar en 2011 (133.000 votos se esfumaron en cuatro años). La segunda convocatoria electoral tras la fuga casquista, las europeas y los comicios de mayo suponen una caída sin paliativos. A lo largo de su intervención, Cascos insistió en el que ha sido su discurso en los últimos cinco años. A saber: que Asturias es víctima de la marginación de los Gobiernos centrales. Especialmente del pacto “insólito y oculto” pergeñado entre PP y PSOE que “ignoran y desprecian al Principado”. Por esas causas, “Asturias está hundida en un pozo. La solución pasa por cambiar el camino o no será posible el cambio de destino para promover el resurgimiento”. Cascos evitó citar errores propios para centrarse en los enemigos externos. El Pacto del Duernu o la izquierda anacrónica.
El objetivo del veterano político consiste precisamente en hacer más política. Es decir, incrementar la presencia del partido en la sociedad a través de la estrategia y de la táctica. “Tenemos que conseguir que la presencia de Foro en la vida política de Asturias sea reconocida por los asturianos". Un hecho complejo por la política de tierra quemada que Foro aplicó en su atribulada gobernación. Y más prioridades: fortalecer la estructura directiva, lo que implica ampliarla o recambiarla. Y la creación de Foro Joven, que se pondrá en breve en marcha con su primera comisión directiva. Foro busca la juventud, pero hay mucha competencia. Es un anhelo común al PP y al PSOE, que sufren el envejecimiento paulatino de su militancia. "Necesitamos más que nadie voz propia para defender las decisiones adecuadas, sin ataduras partidistas, para garantizar la cohesión territorial sin discriminaciones", asegura.
El otro capítulo que afronta Foro es el de la (imposible) unificación de la derecha. La unión de una familia cuyo ADN necesita ruido de sables. Sucedió con Sergio Marqués al frente del Gobierno del Principado, una historia que se repitió tras el rechazo del PP a que Cascos tomase los mandos del partido en Asturias. Las derechas se niegan a abrazarse y defienden su territorio, lo olisquean. "Que nadie se venga arriba profetizando la reunificación", avisó ayer Cristina Coto, presidenta del partido y última cabeza electoral. "Alguna pretendida reunificadora ni ha reunificado nada, más allá de cinco centésimas, ni ha hecho nada por cambiar la política asturiana desde el día que firmó su pacto antiForo con el PSOE para que todo siga igual", añadió, en referencia a Mercedes Fernández, presidenta del PP. Coto, de paso, le lanzó un bofetón verbal a Fernando Lastra, quien le aconsejó recientemente afiliarse al PP. “Lastra es el bufón del PSOE”, replicó Coto. A los socialistas les pidió como "socios históricos del PP que le facilite una afiliación de las varias que tiene en su cartilla".
"Soy consciente de que tenemos muchos retos por delante, del momento que vive el partido, y de la frustración que muchos experimentamos tras las elecciones", admitió. Coto tiene sus recetas: trabajo de cara a los comicios generales. Se trata de no perder el estaco de Enrique Sostres. La tarea parece ardua.
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