lunes, 21 de septiembre de 2015

La vergüenza de la Europa del Este...

Crisis de la vergüenza de Europa del Este

BERLIN - Mientras miles de refugiados verter en Europa para escapar de los horrores de la guerra, y muchos mueren en el camino, una especie diferente de la tragedia ha jugado en muchos de los estados miembros más recientes de la Unión Europea. Los estados conocidos colectivamente como "Europa del Este", incluyendo mi Polonia natal, se han revelado ser intolerante, no liberal, xenófobo, e incapaz de recordar el espíritu de la solidaridadque les llevó a la libertad hace un cuarto de siglo.
Estas son las mismas sociedades que clamaban antes y después de la caída del comunismo por un "regreso a Europa", proclamando con orgullo que compartían sus valores. Pero, ¿qué creen que Europa significa? Desde 1989 - y en particular desde 2004, cuando se unieron a la UE - que se han beneficiado de las transferencias financieras masivas en forma de fondos estructurales y de cohesión europeos. Hoy en día, no están dispuestos a aportar nada para resolver la mayor crisis de refugiados hacia Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
De hecho, ante los ojos de todo el mundo, el gobierno de Hungría, un estado miembro de la UE, ha maltratado a miles de refugiados. El primer ministro Viktor Orbán no ve ninguna razón para comportarse de otro modo: los refugiados no son un problema europeo, insiste; son un problema alemán.
Orbán no está solo en esta vista. Incluso los obispos católicos de Hungría están siguiendo la línea de Orbán, con Laszlo Kiss-Rigo, obispo de Szeged-Csanád, diciendo que los inmigrantes musulmanes "quieren hacerse cargo", y que el Papa, que ha pedido a cada parroquia católica en Europa a tomar en un familia de refugiados, "no conoce la situación."
En Polonia, un país de 40 millones de personas, el gobierno expresó inicialmente una disposición a aceptar 2.000 refugiados - pero sólo los cristianos (Eslovaquia propuso una estipulación similar). Los refugiados no son un problema de Europa del Este, un periodista polaco dijo a la Radio Pública Nacional de los Estados Unidos, debido a que estos países no participaron en la decisión de bombardear Libia (tampoco lo hizo Alemania).
Tener europeos del este no tiene sentido de la vergüenza? Durante siglos, sus ancestros emigraron en masa, buscando alivio de las dificultades materiales y la persecución política. Y hoy sus líderes comportamiento sin corazón y el juego retórica insensible al sentimiento popular. De hecho, la versión electrónica del periódico más grande de Polonia, Gazeta Wyborcza, ahora publica un aviso impresionante al final de cada artículo sobre los refugiados: "Debido al contenido extraordinariamente agresiva de las declaraciones que propugnan la violencia, en contra de la ley, y pidiendo racial, étnica y el odio religioso, no vamos a permitir a los lectores publicar comentarios ".
No hace mucho tiempo, en los años de la posguerra, de Oriente sobrevivientes del Holocausto judío europeos huyeron del asesino antisemitismo de su polaco, húngaro, eslovaco, o vecinos rumanos a la seguridad de los campos de desplazados en, de todos los lugares, Alemania. "Safe Entre los alemanes" proclamó el título de un libro importante por el historiador Ruth Gay sobre estos 250.000 sobrevivientes. Ahora refugiados musulmanes y sobrevivientes de otras guerras, habiendo no encontraron refugio en Europa del Este, también están huyendo a la seguridad entre los alemanes.
En este caso, la historia no es una metáfora. Por el contrario, la causa fundamental de las actitudes de Europa del Este ahora en exhibición sombría se encuentra en la Segunda Guerra Mundial y sus consecuencias.
Considere los polacos, que, merecidamente orgullosos de la resistencia anti-nazi de su sociedad, en realidad mató a más Judios que los alemanes durante la guerra. Aunque los católicos de Polonia fueron víctimas cruelmente durante la ocupación nazi, podrían encontrar poco de compasión por la suerte de las víctimas finales del nazismo. En palabras de Józef Mackiewicz, un escritor polaco anticomunista conservador con credenciales patrióticas impecables: "Durante la ocupación no había, literalmente, una sola persona que no hubiera escuchado el dicho -" Una cosa Hitler ha hecho correctamente es acabar con los Judios. Pero no hay que hablar de esto abiertamente ".
Por supuesto, hubo polacos que ayudaron a Judios durante la guerra. De hecho, el número de polacos "Justo entre las Naciones", reconocido por Yad Vashem de Israel por su heroísmo durante la guerra, es el más grande entre todos los países europeos (como era de esperar, ya que antes de la guerra Polonia tenía la población judía más grande de Europa con diferencia). Pero estas personas notables normalmente actuaban por su cuenta, en contra de las normas sociales imperantes. Eran inadaptados que, mucho después de que la guerra había terminado, insistieron en mantener su heroísmo durante la guerra en secreto de sus vecinos - miedo, al parecer, de que sus propias comunidades, de otro modo shun, amenazar, y condenar al ostracismo a ellos.
Todas las sociedades europeas ocupadas fueron cómplices en cierta medida en el esfuerzo nazi para destruir a los Judios. Cada uno hizo una contribución diferente, dependiendo de las circunstancias y condiciones del dominio alemán específicos de cada país. Pero el Holocausto juega más horriblemente en Europa del Este, debido al gran número de Judios en la región y la crueldad incomparable de los regímenes de ocupación nazi.
Cuando terminó la guerra, Alemania - a causa de los vencedores 'políticas de desnazificación y su responsabilidad por instigar y llevar a cabo el Holocausto - no tuvo más remedio que "trabajar a través de" su pasado criminal. Este fue un proceso largo, difícil; pero la sociedad alemana, consciente de sus fechorías históricas, se ha convertido capaz de enfrentar los desafíos morales y políticas del tipo que plantea la afluencia de refugiados en la actualidad. Y la canciller Angela Merkel ha dado un ejemplo de liderazgo en los migrantes que pone a todos los líderes de Europa del Este a la vergüenza.
Europa del Este, por el contrario, aún no ha llegado a un acuerdo con su pasado criminal. Sólo cuando lo hace la voluntad de su gente será capaz de reconocer su obligación de salvar a las personas que huyen de la cara del mal.

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