La independencia de Cataluña lastraría la enconomía de Asturias
Los expertos destacan los efectos negativos que tendría para el Principado la ruptura
LUIS FERNÁNDEZ
@LUISCAMPIELLO
SÁBADO 26 DE SEPTIEMBRE DE 2015
Una hipotética Cataluña independiente tendría importantes consecuencias en toda España y Asturias no se escapa a esta realidad. En los últimos meses se ha especulado sobre cómo afectaría económicamente la secesión al resto de comunidades. Aunque con matices, los economistas asturianos coinciden en lo fundamental. Perdería Cataluña, perdería España y, en consecuencia, perdería Asturias, motivo por el que las elecciones que se celebran mañana cobran especial relevancia en el Principado.
La última balanza fiscal elaborada por el Ministerio de Economía, publicada el mes de julio del año pasado, señala que Cataluña es, solo por detrás de Madrid y junto a la Comunidad Valenciana y Baleares, una de las cuatro comunidades que tiene un saldo negativo. Es decir, aporta al Estado más dinero del que recibe. Por el contrario, Asturias es una de las regiones cuyo saldo es positivo, lo que significa que recibe más dinero del que aporta a las arcas estatales. En concreto, las cifras publicadas por Hacienda señalan que Cataluña aporta 8.455 millones de euros mientras que Asturias recibe 1.666 millones. Si se tienen estas cifras en cuenta, parece claro que la hipotética independencia tendría nefastas consecuencias en el Principado.
Santiago Álvarez, vicerrector de Planificación Económica de la Universidad de Oviedo, no tiene dudas. "Está claro que perjudicaría a Asturias porque España dejaría de tener una de las comunidades autónomas que más aportan". En la actualidad, el sistema fiscal español se basa "en el principio de solidaridad", explica Álvarez, quien señala que "ahora hay unos flujos redistributivos mediante los cuales los más ricos aportán y los menos ricos son receptores". Por lo tanto, añade, con menos dinero para repartir, Asturias saldría perdiendo. Un planteamiento similiar es el que defiende Fernando Rubiera, profesor de la Universidad de Oviedo en el departamento de Economía Aplicada, quien considera que "el peligro" para Asturias es que una posible revisión del modelo actual "sacrifique, parcial o totalmente el mecanismo de solidaridad entre territorios", puesto que, en su opinión, el actual sistema es "muy importante para nuestra región".
Consecuencias para Cataluña
La posible independencia no es buena para Asturias pero, en términos económicos, tampoco lo es para Cataluña. Esa es al menos la opinión unánime entre los expertos asturianos. Santiago Álvarez considera que las nuevas reglas del juego "romperían el mercado interior español", un hecho que tendría sus consecuencias en las empresas catalanas. "Serían un tercer país y su relación Asturias y con el resto de comunidades autónomas cambiaria. Habría que replantearse las relaciones comerciales e industriales y eso tendría sus consecuencias en la economía catalana". Además, deja la puerta abierta al posible boicot de productos catalanes por parte de los consumidores del resto de España. "Eso ya pasó con el cava cuando se discutía el estatuto", recuerda.
Miguel de la Fuente, decano del Colegio de Economistas de Asturias tiene una opinión similiar. En el nuevo escenario "Cataluña perdería un mercado importante y se resentirían las cuentas de resultados de sus empresas". De la Fuente va más allá y apunta otro problema, el de la banca. En su opinión, las entidades bancarias, como La Caixa o Banco Sabadell "seguramente tendrían que deslocalizarse y cambiar su domicilio fiscal", ya que "sería la única forma que tendrían de acceder a las subastas de liquidez del Banco Central Europeo".
Los economistas tienen claro que todos los agentes serían más fuertes unidos que por separado. Fernando Rubiera explica su punto de vista. "Una España sin excesivas desigualdades territoriales beneficia tanto a los territorios pobres como ricos, como le hubiera beneficiado a Europa el haber tenido una integración fiscal mas avanzada para hacer frente a la actual crisis". Por su parte, Santiago Álvarez considera que la independencia sería ir contracorriente en un mundo cada vez más globalizado. "En todo el mundo se están realizando uniones económicas que lo que buscan es ampliar mercados", por lo que, en su opinión, el escenario catalán "va en la dirección contraria porque restringiría el mercado en un mundo que busca precisamente lo contrario". El economista asturiano considera que la salida de Cataluña sería "el peor escenario posible" y augura consecuencias "catastróficas" para la economía española si se declarase la independencia.
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