"Cuidado, que viene el coco". La antes insospechada posibilidad de queDonald Trump se convirtiera en presidente de los Estados Unidos podría está más cerca de lo esperado y los mercados no han tardado en reaccionar.
Hillary Clinton, la favorita del S&P 500, ha visto que los últimos sondeos situaban a su rival como el ganador de las elecciones del próximo 8 de noviembre, lo que llevaba al índice a retroceder un 0,68%, caída replicada en el Nasdaq.
Para las bolsas europeas, el escenario no pinta mejor: el Ibex 35 encadena dos sesiones cayendo más de un 1%, arrastrado por una banca contagiada de los miedos políticos. Y la situación parece que no va a cambiar en los próximos días, ya que "los mercados habían descontado casi al 100% la victoria de Clinton… y ahora retroceden", tal y como apunta Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG.
En la misma línea se expresa el analista de XTB Joaquín Robles, que asegura que las bolsas están descontando la posibilidad de que Trump sea presidente. "Hillary sigue siendo la favorita de los mercados y no les gusta la incertidumbre, por lo que se podrá esperar una tónica parecida en los próximos días", continúa.
Así, tras siete sesiones en negativo, los índices norteamericanos "ya habrían descontado gran parte del movimiento, algo que no ocurrió con el Brexit", incide Robles. Y es que el Ibex sufrió su mayor caída tras el sí de los británicos, "lo que nos hace darnos cuenta de lo poco que le gustan al mercado las dudas", tal y como recuerda Victoria Torre, analista de Self Bank. No obstante, la debacle sería mucho menor en este caso en el corto plazo, tal y como apunta Pingarrón.
Los más pesimistas apuestan por la debacle. En su último informe a inversores, Barclays cifra el impacto de la victoria de Trump en caídas de hasta el 13% en el S&P 500. El índice se ha mostrado muy sensible a todas las informaciones que han ido surgiendo en los últimos días sobre los candidatos. De hecho, la nueva investigación del FBI sobre los 'emails' de Clinton ha traído nuevas incertidumbres al mercado, como ya ocurriera con su leve bache de salud.
Este hecho, sumado esto a la escasa concreción de los planes políticos de Trump, podría llevar a que los inversores "se refugien en activos más seguros, como la deuda, el yen y el oro", según la analista de Self Bank.
No obstante, la volatilidad generada por una posible victoria de Trump, que traería "una oleada de ventas", se ceñiría al corto plazo, ya que a medio plazo la evolución de los índices "no depende tanto de la política", concluye Robles.
"Es imposible vaticinar un porcentaje de caída, pero podría superar el 5% en Wall Street, y acercarse al doble dígito en Europa", apunta Pingarrón
Por otro lado, el reflejo de las caídas en Estados Unidos en el caso de la victoria de los republicanos será inevitable en Europa. "Sin ninguna duda", apunta Pingarrón, "e incluso la caída podría ser mayor". El analista de IG señala dos razones: por un lado, Europa es mucho más vulnerable en fases correctivas del mercado y, por otro, "si la victoria de Trump debilitase el dólar, la apreciación del euro sería un daño adicional" al Viejo Continente.
Centrándonos en el Ibex 35, los que más podrían sufrir la victoria de Trump serían "los bancos, así como las empresas con exposición a Estados Unidos o valores cíclicos como las constructoras", añade Pingarrón. Como contrapartida, una Casa Blanca republicana podría beneficiar a las farmacéuticas y empresas del sector salud, por lo que una de las posibles implicadas "podría ser Grifols". Además, las empresas del sector materias primas podrían experimentar efectos beneficiosos, "si se implementan aranceles a las procedentes de China", concluye Victoria Torre.
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