El Ayuntamiento de Oviedo culpa a Adif de las goteras que inundan la estación de ferrocarril
Los técnicos defienden que la obra municipal se hizo «correctamente» y que «las filtraciones se producen por la visera de la marquesina»
A cada uno lo suyo. Eso es lo que defendió ayer el servicio de Infraestructuras del Ayuntamiento, que se vio obligado a desmentir que la culpa de la caudalosa catarata que se precipita en el interior de la estación de ferrocarril cada vez que llueve sea suya. Fuentes de la concejalía defendieron, por contra, que la obra de impermeabilización de la Losa que acometió el Consistorio durante el pasado mandato «funciona» y que se realizó «correctamente». Los técnicos municipales, un tanto molestos con las dudas acerca de las mejoras en la impermeabilización de la plaza de Los Ferroviarios que finalizaron el pasado marzo, pasaron la pelota al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias informando de que «las filtraciones se producen por la visera de la marquesina de la estación gestionada por Adif».
Acometida durante el pasado invierno por 1, 3 millones de euros, la obra para reparar la capa de impermeabilización eliminó las farolas y la fuente central para minimizar el riesgo de futuras filtraciones. La demolición incluyó toda la infraestructura que, desde 1999, había agujereado la membrana original. Todo: las arquetas, los servicios, las conducciones... Todos los puntos por los que se podía filtrar el agua. Después, se reconstruyeron las galerías de los servicios y se aplicó una capa de mortero especial. Sobre ella, los técnicos aplicaron una membrana de poliuretano «para una impermeabilización con elevada elasticidad, con capacidad de punteo de fisuras, elevada resistencia química y resistente a la abrasión», que de todo eso sufría la estructura de la cubierta de la estación del Norte. Gráficamente, el exalcalde Wenceslao López afirmó que se encontraron «estalactitas y estalagmitas» en las tripas del tinglado.
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