miércoles, 17 de septiembre de 2014

Mañana....Scotland.


El referéndum de Escocia se celebra este jueves y puede pasar de todo. Es complicado aventurarse a vaticinar quién ganara; pues los últimos sondeos apuntan al empate técnico o victorias del sí o el no con muy poco margen. La pregunta será clara: "¿Debería Escocia ser un nuevo país independiente?". Las posibles respuestas son sí y no, y se tienen que marcar con una X en la casilla elegida. En lo referido al procedimiento, será todo muy sencillo. En la elección de la respuesta entran otros factores que dificultan la decisión.
Hasta el 2 de septiembre, la fecha límite, se registraron para votar 4.285.323 personas, de las cuales más de 700.000 lo harán por correo. Se trata de una cifra récord de registrados para votar en unas elecciones; aunque no podrán votar todos los escoceses. Pueden emitir su voto los británicos (escoceses, norirlandeses, galeses o ingleses –unos 400.000 entre estos últimos tres–), irlandeses, ciudadanos de la Unión Europea o de la Commonwealth con permiso de residencia en Escocia y que sean mayores de 16 años. Alrededor de 800.000 escoceses que viven en el resto del Reino Unido quedan excluidos. 
Desde las siete de la mañana, hora local, hasta las diez de la noche, estarán abiertos los 5.579 colegios electorales. Habrá 32 áreas de recuento y hasta la mañana del viernes 19 no está previsto que se conozcan los resultados. "A la hora del desayuno" se anunciará el desenlace, según ha dicho la responsable del recuento de votos, Mary Pitcaithly. La revista británica online de política New Statesman apunta que podría ser entre las seis y media y las siete y media de la mañana posterior a la votación, aunque remarcan que es una estimación no oficial. Además, el resultado anunciado será firme y no habrá ningún recuento, aunque la diferencia sea sólo de uno o dos votos, por lo que antes de hacer oficial si ha ganado el sí o no, deberán estar muy seguros. Para ganar es necesario tener la mitad más uno de los votos.
En caso de ganar el sí, la independencia no se aplicaría de manera inmediata el día siguiente. La formación del nuevo estado escocés sería un proceso lento y complejo que culminaría el 24 de marzo de 2016, con la entrada en vigor de una nueva carta magna y unas elecciones en mayo de ese mismo año. 
El nacionalismo escocés
Las primeras referencias a Escocia como país datan del año 843. Hasta 1707, con sus más y sus menos con los vecinos de Inglaterra, tuvieron su propio reino, pero en medio de una crisis económica, aquel año decidieron ceder su autonomía y depender de Londres para salir del paso, mediante el Union Act y así pasó a formar parte del Reino Unido. El movimiento nacionalista escocés resurgió en el siglo XIX, pero no fue hasta 1979 cuando hubo un primer referéndum para restituir el parlamento escocés, en el cual el sí no obtuvo la mayoría necesaria. Casi veinte años después, el 11 de septiembre 1998, se volvió a consultar lo mismo y en esa ocasión venció el sí, por lo que en 1999 se restituyó la cámara y el gobierno autónomo, todavía formando parte de Reino Unido.
El Scottish Nacional Party (SNP) ganó las elecciones de 2011 con la promesa de celebrar un referéndum y el 15 de octubre de 2012, Alex Salmond y David Cameron rubricaron el acuerdo para su celebración, el Edinburgh AgreementEl líder nacionalista escocés quería incluir una segunda pregunta que preguntará sobre una mejora del estatus de Escocia dentro del Reino Unido en caso de no querer la independencia, pero el premier británico no accedió y prefirió el todo o nada. No obstante, unos días antes del día señalado para el referéndum, ha cedido en eso y tanto él como otros líderes partidarios del no han ofrecido una mejora de las condiciones para Escocia y mayor autonomía para su parlamento en caso de ganar el no. 
El argumentario
Los partidarios del sí, han centrado su campaña en que económicamente, todo irá mejor y podrán aplicar sus propias políticas culturales y socioeconómicas, sin depender de Westminster. Los escoceses, históricamente, siempre han sido poco partidarios de las políticos neoliberales de Londres y allí los conservadores británicos tienen un papel residual. Además, estiman que el 90% de las reservas de petróleo de Reino Unido están en el Mar del Norte y pasarían a ser escocesas. Reino Unido, por detrás de Noruega, es actualmente el segundo productor de crudo de Europa. Pese a ganar el sí, la corona británica seguiría ostentando la jefatura de Estado en el nuevo país; y pretenden mantener la libra esterlina y permanecer dentro de la UE y la OTAN, algo que Barroso y Rasmussen, el presidente de la Comisión Europea (hasta que tome posesión Juncker) y el secretario general de la OTAN respectivamente, han negado que sea posible.
Los favorables al no, han hecho uso del discurso del miedo y han dicho que Escocia se empobrecería, además de perder privilegios, quedar aislada y no poder utilizar la misma divisa, algo que el Banco de Inglaterra y los principales partidos defienden. Sin embargo, Salmond amenaza con no pagar la parte correspondiente de la deuda. También advierten de que las grandes empresas y los bancos se irían del país y las pensiones bajarán mientras que las hipotecas subirán y estarán en entidades un país extranjero. En las últimas semanas, viendo el peligro real, la campaña Better Together (Mejor Unidos) capitaneada por el laborista Alistair Darling, ha intentado seducir con propuestas y mejoras para los escoceses para mantener la unión de Gran Bretaña. En los edificios de la administración ha ondeado el Saltire estos últimos días. Las dos campañas tenían un techo de gasto de un millón y medio de libras y han funcionado mediante donaciones.
Salmond aclaró hace unos días en la cadena británica BBC que en caso de obtener un resultado negativo no se repetiría: "Esto es una oportunidad para Escocia que se da una vez en cada generación, quizás una vez en la vida". Cameron, por su parte, suplicó esta semana en su último discurso en territorio escocés que no se rompiera el Reino Unido y pidió , por favor, el voto por el no, en un discurso muy efusivo en el que recalcó en reiteradas ocasiones que la independencia sería para siempre. El primer ministro británico pasará este jueves en su oficina de Londres. El viernes, saldremos de dudas.


Leer más: http://www.lavanguardia.com/internacional/referendum-escocia/20140917/54416037526/claves-referendum-escocia.html#ixzz3DYpth7cC
Síguenos en: https://twitter.com/@LaVanguardia | http://facebook.com/LaVanguardia

No hay comentarios: