Las asociaciones vecinales cargan contra Almeida
Tigre Juan, El Fontán y Oviedo Antiguo acusan al presidente de Hostelería de Asturias de "despreciar" la ley y reclaman al ayuntamiento que no ceda con Gastromateo
MARTES 04 DE AGOSTO DE 2015
Las asociaciones de vecinos Tigre Juan, El Fontán y Oviedo Antiguo han instado al Ayuntamiento de Oviedo a que se mantenga firme, desoiga las pretensiones del presidente de Hostelería de Asturias, José Luis Álvarez Almeida, y se garantice el obligado cumplimiento de la ordenanza de terrazas aprobada por el pleno municipal.
Representantes de estas asociaciones han defendido la ordenación del posible uso de espacios públicos por locales de hostelería atendiendo a la "sensatez" y respetando el "bienestar de la ciudadanía". Así, han apoyado a los concejales de Cultura, Roberto Sánchez Ramos, y de Urbanismo, Ignacio Fernández, en su decisión de dejar de celebrar Gastromateo en el Campo San Francisco y sostienen que si el alcalde, el socialista Wenceslao López, quiere revisar la reciente ordenanza para mejorarla la "única mejora sustancial es suprimir la disposición transitoria", preguntándose "cómo se puede mejorar algo que aún no se ha usado".
Los vecinos remarcan que no están en contra de la actividad hostelera pero sí del abuso del espacio público por parte de algunos empresarios que, señalan, además hacen contratos precarios, pagan parte de los salarios en dinero negro o defraudan a Hacienda.
Especialmente críticas son estas asociaciones vecinales con José Almeida, presidente de Hostelería de Asturias, reprochando a través de una carta pública su "total desprecio por las leyes en vigor, además de por los ciudadanos de Oviedo, cuya voluntad, expresada unánimemente por sus representantes en la Corporación municipal, rechazan contundentemente las presiones de tal vocero".
En dicho escrito, que no descartan presentar por registro municipal en septiembre si la situación lo precisa, los vecinos apoyan a los ediles Sánchez Ramos y Fernández "en su negativa a ceder una parte importante del Campo San Francisco a satisfacer una codicia que, al parecer, no tiene límites".
Del mismo modo, les agradecen que se nieguen a continuar con el "abuso indecente de la permisividad municipal, que dañando gravemente el patrimonio de todos, satisfacía el egoísmo feroz de este sector que, para proteger sus beneficios extras no duda en pretender terminar, sustituyéndolos, con otros modos de ejercer esa labor profesional".
Con todo, desde las asociaciones de vecinos Tigre Juan, El Fontán y Oviedo Antiguo advierten de que "nunca" estarán sentados "en una mesa de trabajo en la que estén sentados miembros del sector de la hostelería", apuntillando que fueron dos años de redacción y más de un mes de exposición pública en periodo de alegaciones el tiempo dedicado a la elaboración de la ordenanza sin que se realizase "ninguna" alegación por parte de la asociación de Hostelería
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