«Relanzaremos Oviedo sin dejarle un Ayuntamiento en quiebra al que venga»
«Crearemos un traje a medida para cada empresario sin poner en riesgo las arcas públicas», asegura el encargado de reajustar el presupuesto. Javier Cuesta, Concejal de Economía y Transformación Digital
Javier Cuesta (Langreo, 1968) está a punto de cumplir su primer año al mando de la Concejalía de Economía del Ayuntamiento. En ese tiempo, lo que comenzó sin grandes altibajos ha dado paso a la antesala de una de las peores crisis que se recuerdan tras la expansión del coronavirus. Atiende a EL COMERCIO por teléfono cumpliendo con las medidas de distancia social y admite, por partes, estar «a la expectativa» y «preocupado». 2020 y 2021 serán años de «incremento de gastos y reducción de ingresos», dice. El alcalde le ha encomendado reordenar el presupuesto municipal y la puesta en marcha de un plan de acción integral, y quedan menos de tres semanas para presentarlo.
-Cuando termine esta crisis, ¿cuánto dinero habrá dejado de ingresar el Ayuntamiento?
-En estas seis semanas, y en grandes cifras, el impacto se mide en tres millones de euros. A partir de ahí solo hay incertidumbre. Estamos realizando estimaciones en distintos escenarios sobre cuál será el verdadero impacto en la recaudación. Es un trabajo de orfebrería complejo y es muy pronto, pero por poner solo un ejemplo, de las tasas de hostelería recaudaremos la mitad.
-¿La viabilidad económica del Consistorio está comprometida?
-No, en absoluto. El Ayuntamiento tiene una solvencia y un excedente de liquidez que le hubiese gustado a muchos otros municipios, y además somos un equipo de gestión con experiencia. Otra cosa sería que esta crisis durase una década. Ahí el panorama cambiaría.
-Estar en un plan económico financiero pone de su parte...
-Digamos que el hecho de estar en un plan económico financiero nos ha obligado a presupuestar con un cierto grado de conservadurismo.
-¿En qué punto avanza la reordenación del presupuesto?
-Aún estamos trabajando en ello, pero dentro del calendario fijado. Estamos fijando las medidas del plan de acción y analizando concejalía por concejalía las necesidades específicas. Tenemos una aproximación relevante, pero es como hacer un presupuesto nuevo.
-¿Cuáles son esas medidas en lo concreto?
-Las hubo inmediatas como la puesta en marcha del plan Oviedo Contigo, dotado con medio millón de euros, o la reubicación de los sin techo del municipio. Después, un gran paquete de medidas a medio y largo plazo organizado en cinco ejes: el social; el empleo, a través de un impulso a la hostelería, el comercio y la construcción; la empresa, con planes de acceso a crédito, ayudas directas y promoción; la transformación, digital y sanitaria de los locales; y la simplificación de los procesos administrativos, con licencias más rápidas y una adaptación del uso del suelo público que permitirá a partir de mañana incrementar las terrazas y la venta ambulante.
-¿A cuánto asciende el montante en ayudas a familias y autónomos?
-Las cifras de desempleo son muy preocupantes y tenemos que corregirlas. Para ello, el apartado social ya está en marcha y el empresarial, en camino. En cifras, todavía no lo sabemos, y estamos a la espera de que el Gobierno se sensibilice y permita a los ayuntamientos disponer de sus ahorros. Si no es así, las capacidades financieras estarán restringidas al presupuesto de este año.
-¿Teme que el Gobierno absorba el remanente?
-Lo temo. Cuando el río suena, agua lleva. Sería vergonzoso si se produce. El Estado tiene que ser tan responsable como un ayuntamiento para utilizar sus recursos y no otros. Son los ahorros de los ovetenses de lo que estamos hablando.
-¿Qué porcentaje destinarán si la balanza se vuelve a su favor?
-Tiene que estar disponible al cien por cien. En este momento está claro que nos encontramos con un marco de necesidad y la ciudad necesita de recursos para abordar sus proyectos sociales hoy, y de preparación para el futuro en cuanto a infraestructuras mañana. Sería una inyección determinante.
-¿El plan de acción estará consensuado como pide la oposición?
-Los partidos de izquierda son proclives a hablar de consenso cuando no ejercen el poder. El equipo de gobierno tiene la responsabilidad de gobernar. Por eso, el plan va a ser del equipo de gobierno y para ser gestionado por el equipo de gobierno, si bien puede recoger medidas de la oposición y otros agentes.
-¿Es viable suprimir el cobro de tasas hasta que finalice el año?
-No se puede plantear en términos absolutos, porque no sería justo. No todos los sectores se han visto afectados en la misma medida ni se van a recuperar a la misma velocidad. El comercio de alimentación no ha dejado de facturar, por ejemplo, y sería injusto plantear aplazamientos o bonificaciones. Crearemos un traje a medida para cada empresario. Relanzaremos Oviedo sin poner en riesgo las arcas municipales y sin dejarle un Ayuntamiento en quiebra al que venga después.
-¿2020 es un año perdido para la inversión?
-No, para nada. Este es un año de inversión en los grandes proyectos que en la ciudad tienen que ser acometidos y 2021 será uno bastante fuerte en este sentido. En cuanto a las obras relacionadas con la entrada a Oviedo por la 'Y' (el Bulevar de Santullano) se están avanzando los proyectos técnicos para empezar a trabajar. Del mismo modo, la Plaza de Toros, el plan de El Antiguo y la adaptación del Palacio de los Deportes a un espacio polivalente y la pista de atletismo del antiguo SPA... No, no es un año perdido.
-¿Cuándo estará listo el préstamo de 8,4 millones para la financiación de infraestructuras?
-Los planes pasaban por haber publicado el anuncio licitación el 16 de marzo, pero entonces se decretó el estado de alarma. Ahora, en pocos días estaremos en disposición de licitar esa operación, y los procedimientos serán muy cortos.
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