La Moralidad Griega...

Un cuento moral griega

J-Stiglitz

UEVA YORK - Cuando la crisis del euro comenzó hace media década, los economistas keynesianos predijeron que la austeridad que se están imponiendo en Grecia y los demás países en crisis sería un fracaso. Sería ahogar el crecimiento y aumentar el desempleo - e incluso dejar de reducir la relación deuda-PIB. Otros - en la Comisión Europea, el Banco Central Europeo, y algunas universidades - hablado de las contracciones expansivas. Pero incluso el Fondo Monetario Internacional sostuvo que las contracciones, como los recortes en el gasto público, eran sólo eso - contractiva.

Casi no necesitábamos otra prueba. Austeridad había fallado en varias ocasiones, a partir de su uso temprano con el presidente estadounidense Herbert Hoover, que resultó el crash bursátil en la Gran Depresión, a los "programas" del FMI impuestas en el Este de Asia y América Latina en las últimas décadas. Y sin embargo, cuando Grecia se metió en problemas, se intentó de nuevo.

Grecia logró en gran medida siguiendo el dictado establecido por la "troika" (la Comisión Europea, el BCE y el FMI): se convirtió un déficit presupuestario primario en un superávit primario. Pero la contracción del gasto público ha sido predeciblemente devastador: 25% de desempleo, una caída del 22% en el PIB desde 2009, y un aumento del 35% en la relación deuda-PIB. Y ahora, con abrumadora victoria en las elecciones del anti-austeridad Syriza del partido, los votantes griegos han declarado que han tenido suficiente.

Entonces, ¿qué se debe hacer? En primer lugar, seamos claros: Grecia podría ser culpado de sus problemas si fuera el único país donde la medicina de la troika fracasó miserablemente. Pero España tenía un superávit y un bajo ratio de deuda antes de la crisis, y que, además, se encuentra en la depresión. Lo que se necesita no es una reforma estructural en Grecia y España tanto como la reforma estructural de diseño de la zona euro y un replanteamiento fundamental de los marcos de políticas que han dado lugar espectacularmente mal desempeño de la unión monetaria.

Grecia nos ha recordado también, una vez más de lo mal que el mundo necesita un marco de reestructuración de deuda. Una deuda excesiva causada no sólo la crisis de 2008, pero también la crisis de Asia Oriental en la década de 1990 y la crisis de América Latina en la década de 1980. Se sigue causando sufrimientos indecibles en los EE.UU., donde millones de propietarios de viviendas han perdido sus hogares, y ahora está amenazando a millones más en Polonia y en otros lugares que tomaron préstamos en francos suizos.

Dada la cantidad de angustia provocada por la deuda excesiva, uno podría preguntarse por qué las personas y países se han puesto repetidamente en esta situación. Después de todo, esas deudas son contratos - es decir, los acuerdos voluntarios - así que los acreedores son tan responsables de ellos como deudores. De hecho, podría decirse que los acreedores son más responsables: por lo general, se trata de instituciones financieras sofisticadas, mientras que los prestatarios con frecuencia son mucho menos en sintonía con las vicisitudes del mercado y los riesgos asociados a los diferentes acuerdos contractuales. De hecho, sabemos que los bancos estadounidenses realmente presa de sus prestatarios, aprovechando su falta de sofisticación financiera.

Cada (avanzado) país se ha dado cuenta de que lo que el capitalismo funcione requiere dar a las personas un nuevo comienzo. Cárceles del siglo XIX de los deudores fueron un fracaso - inhumana y no precisamente para ayudar a asegurar el pago. Lo que sí ayuda era para ofrecer mejores incentivos para el buen crédito, por lo que los acreedores más responsable de las consecuencias de sus decisiones.

A nivel internacional, todavía no hemos creado un proceso ordenado para dar a los países un nuevo comienzo. Desde incluso antes de la crisis de 2008, las Naciones Unidas, con el apoyo de casi todos los países en desarrollo y emergentes, ha estado tratando de crear un marco de este tipo. Pero los EE.UU. se ha opuesto rotundamente; tal vez quiere restituir prisión por deudas para los funcionarios sobre los países endeudados (si es así, el espacio puede ser la apertura de la Bahía de Guantánamo).

La idea de traer de vuelta las cárceles de los deudores puede parecer descabellada, pero resuena con la charla actual de riesgo moral y la responsabilidad. Existe el temor de que si Grecia se permite reestructurar su deuda, simplemente obtendrá sí en problemas de nuevo, al igual que los demás.

Esto es un disparate. ¿Alguien en su sano juicio cree que ningún país estaría dispuesto a ponerse a través de lo que Grecia ha tenido que pasar, sólo para conseguir un viaje gratis de sus acreedores? Si existe un riesgo moral, es por parte de los prestamistas - sobre todo en el sector privado - que han sido rescatados en repetidas ocasiones. Si Europa ha permitido que estas deudas se muevan desde el sector privado al sector público - un patrón bien establecido en el último medio siglo - es Europa, no Grecia, que deben soportar las consecuencias. De hecho, difícil situación actual de Grecia, incluyendo la enorme carrera en el ratio de deuda, es en gran parte culpa de los programas de la troika equivocadas hayan impuesto en ella.

Así que no es la reestructuración de la deuda, pero su ausencia, es decir no hay nada particularmente especial sobre los dilemas que Grecia se enfrenta hoy "inmoral".; muchos países han estado en la misma posición. Lo que hace que los problemas de Grecia más difícil de abordar es la estructura de la zona euro: unión monetaria implica que los Estados miembros no pueden devaluar su camino fuera de problemas, sin embargo, el mínimo de solidaridad europea que debe acompañar a esta pérdida de flexibilidad de la política simplemente no está allí.

Hace setenta años, al final de la Segunda Mundial, los aliados reconocieron que Alemania debe dar un nuevo comienzo. Se entiende que el ascenso de Hitler tuvo mucho que ver con el desempleo (no la inflación) que resultó de la imposición de más deuda en Alemania a finales de la Primera Guerra Mundial los aliados no tuvieron en cuenta la estupidez con la que las deudas se han acumulado o hablar de los costos que Alemania había impuesto a los demás. En cambio, no sólo perdonaron las deudas; que en realidad siempre ayuda, y las tropas aliadas estacionadas en Alemania siempre un estímulo fiscal adicional.

Cuando las empresas van a la quiebra, un canje de deuda por acciones es una solución justa y eficiente. El enfoque análogo para Grecia es convertir sus bonos actuales en bonos vinculados con el PIB. Si Grecia hace bien, sus acreedores recibirán más de su dinero; si no lo hace, sus hijos recibirán menos. Ambas partes tendrían un incentivo poderoso para aplicar políticas a favor del crecimiento.

Rara vez las elecciones democráticas dan como claro un mensaje como el de Grecia. Si Europa dice no a la demanda de los votantes griegos para un cambio de rumbo, se está diciendo que la democracia no es de importancia, al menos cuando se trata de la economía. ¿Por qué no acaba de cerrar la democracia, como Terranova hizo efectiva cuando entró en suspensión de pagos antes de la Segunda Guerra Mundial?

Es de esperar que los que entienden la economía de la deuda y la austeridad, y que creen en la democracia y los valores humanos, prevalecerá. Ya sea que lo harán aún está por verse.

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