«He vivido con tristeza la salida de Anabel Santiago, ha enterrado su trabajo de meses»
Ana Taboada trata de cerrar «el espectáculo bochornoso» de la crisis de Somos Oviedo tras la dimisión de su número tres
La portavoz de Somos Oviedo, Ana Taboada, compareció ayer por primera vez tras la crisis abierta en el seno del partido con la dimisión y las duras críticas de su fichaje electoral, la exedil Anabel Santiago. Durante la rueda de prensa la concejal quiso dar «las primeras y últimas explicaciones» acerca de lo que calificó como un «espectáculo bochornoso» y «telenovela veraniega» de la que se ha sentido, afirmó, «protagonista». Máxime cuando el desgaste del partido dejaría en manos del PSOE la alternativa «al PP y su muleta naranja».
En medio de la «extrañeza» de este tiempo de pandemia, «se han sumado duras críticas a mi gestión» en Somos Oviedo por parte de Santiago, que afirmó dimitir por «un ambiente laboral irrespirable» en el grupo municipal. Críticas que, se defendió, «faltan a la veracidad». Y críticas a las que se sumó su número dos, Rubén Rosón, una vez que la coalición electoral fuera incapaz de cerrar las heridas en su seno interno. De hecho, que la partida se jugara en los medios y no en los órganos de representación del partido fue el principal reproche de Taboada a Santiago y Rosón. De la primera afirmó no arrepentirse de su fichaje electoral. «Para nada, creo que Anabel ha enterrado buena parte de su trabajo en estos meses, he vivido con tristeza su salida», indicó . «Creo que ha sido injusta no solo conmigo sino con sus militantes y votantes que la auparon a la concejalía», atacó Taboada. «Comprendo su salida solo desde la óptica de su carrera profesional en la que le deseo éxitos», concedió.
Para con Rosón el tono cambió y se manejó en términos de códigos internos de una organización que, dijo Taboada, se dispone a «reforzarse» de cara al próximo ciclo electoral. «He cumplido el código ético de Somos Oviedo y no espero menos de los miembros de la candidatura», desafió. «Seguiré trabajando por una candidatura abierta y municipalista y con relevos comprometidos». Unos 'relevos' que, a preguntas de este diario, Taboada no quiso precisar si atañen a Rosón, pero también a ella, dado el compromiso de Somos Oviedo con la limitación a dos mandatos de los cargos electos, salvo en el caso de alcaldes que pueden llegar a 12 años.
Todo, cuando, tras las comunicaciones internas de Santiago mostrando su malestar con Taboada, el partido decidió interponer a Ignacio Fernández del Páramo como mediador. La solución planteada, que no cuajó, era explorar que Taboada cediera la portavocía del grupo en favor de Rosón. Preguntada por este particular, la portavoz, de nuevo, miró adentro: «Las cuestiones que tienen que ver con la portavocía se debaten en el seno de Somos Oviedo».
«Hablar hacia afuera cuando se pierde en casa no nos parece la forma mas adecuada», apretó la concejala que invitó «a quien quiera a seguir trabajando en el ámbito de las normas que nos hemos dado», en alusión a Rosón. Si las «formas y el fondo» de las críticas de su compañero le pareceron inaceptables, el «momento», indicó Taboada, «es peor». Porque llegan «en medio de una pandemia mundial, con unos efectos gravísimos para la salud y el empleo y la economía» y ante lo que avecinó como «un invierno muy duro».
«Desde Somos Oviedo hemos trabajado denodadamente y muchos compañeros sin cobrar un euro para paliar los efectos de esta crisis. Creo que los militantes y esta portavoz se merecen un respeto», pidió antes de explicarse acerca de su silencio de estos quince días. Frente al «ombliguismo extemporáneo», como lo calificó, dijo haberse manejado en términos de «responsabilidad» para con el partido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario