Esto yá me gusta más...Apuntamos esa posibilidad también.

Nortes | Centraes na periferia Víctor Guillot es periodista y adjunto a la dirección de Nortes. Ha trabajado en La Nueva España, Asturias 24, El Pueblo de Albacete y migijon. Una marcha del acero. Es un paisaje posible. No sería la primera vez que se produce en Asturias. Explica una situación de emergencia, aunque a Adrián Barbón, a Álvaro Queipo o a Adrián Pumares, todavía no les quepan los pies en las botas. Las calzarán, llegado ese momento. Y lo saben. Es más que probable que la tensión entre la familia Mittal y el gobierno de Pedro Sánchez aumente varios grados en el corto plazo si la propietaria de Arcelor no se atiene al cumplimiento de sus compromisos. 425 millones de los Fondos Europeos inyectados en las cuentas de los Mittal para financiar la mitad del coste de una planta DRI o lo que es lo mismo, la descarbonización de las plantas de Arcelor, dan buena cuenta del interés del Ministerio de Industria para que se ejecuten. Es por eso que se puede deducir, y es fácilmente contrastable, que el Ministerio de Jordi Hereu, nuevo en la plaza, tiene prevista una alternativa a la actual situación. Un gobierno que se toma en serio las cosas siempre tiene dibujados escenarios diferentes. El gobierno de Pedro Sánchez los contempla ahora mismo todos, incluso la renacionalización. Del Ministerio de Jordi Hereu depende el PERTE de descarbonización, el mecanismo con el que el gobierno español trata de avanzar hacia una industria más verde. En conjunto, este PERTE prevé una inversión pública de 3.170 M€, una inversión total de hasta 11.800 millones y la creación de unos 8.000 puestos de trabajo de calidad. El nuevo ministro ya trabaja en una segunda convocatoria. Las botas de la marcha junto al retrato de Jovellanos en el Ayuntamiento de Xixón. La coordinación del ejecutivo asturiano con el gobierno de Pedro Sánchez y su nuevo ministro está siendo, de momento, testimonial, aunque Adrián Barbón haya manifestado este viernes desde Fitur que el “planteamiento valido respecto a la transformación siderúrgica integral es en lo que está trabajado el Ministerio de Industria coordinadamente con el gobierno de Asturias”. Es de suponer que la falta de sincronía entre la agenda de Barbón y la agenda de Sánchez, desconexión arrastrada desde la anterior legislatura, podrían perjudicar seriamente a los trabajadores de Arcelor Mittal. Recuerden las palabras de José Manuel García, Secretario de la Sección Sindical UGT-FICA de Arcelor Gijón. Salvo la Agrupación Socialista de Gijón, ninguna fuerza política le ha invitado a una reunión. UGT es el sindicato mayoritario en Arcelor. La derecha asturiana también ha reaccionado al planteamiento de Monchu García. Las palabras de Adrián Pumares primero, de Carmen Moriyón y Álvaro Queipo después, han cargado la suerte sobre el diputado autonómico y Secretario de la Agrupación Socialista de Gijón. La derecha asturiana, a excepción de Vox que no se ha pronunciado todavía, ha achacado el incumplimiento de los acuerdos de la familia Mittal al Estatuto de las Industrias Electrointensivas aprobado por Sánchez al tiempo que han reprochado a García, incluso en términos personales, su irresponsabilidad a través de las redes sociales. Álvaro Queipo se mostraba completamente en desacuerdo con la renacionalización de Arcelor Mittal, quien considera que es una propuesta “que no se puede cumplir”. Más agresiva ha sido Carmen Moriyón, quien acusaba a García “de vivir de la política”. Por su parte, Adrián Pumares tildaba de “ocurrencia” el escenario planteado por el Secretario Socialista junto al Secretario sindical José Manuel García. La crítica varía por barrios. De la condescendencia al menosprecio. En cualquiera de los tres casos, la rueda de prensa del PSOE de Gijón parece haber descalabrado la agenda informativa de los dos partidos. Ahora les tocará llevar a cabo su propia evaluación de daños. Mientras tanto, la izquierda parece dispuesta a iniciar una nueva singladura. Ha gustado y mucho la actitud de Monchu García a quien no le faltan botas y camina bien.