domingo, 2 de agosto de 2020

El Asturcón en la encrucijada ( de nuevo )

¿Para qué sirve un asturcón?

La emblemática raza de caballo asturiano continúa en peligro de extinción. La comercialización de su carne para alimentos infantiles podría garantizar su futuro

¿Para qué sirve un asturcón?
PILAR ALONSO
¿Para qué sirve un asturcón? A Germán Concheso, presidente de la Asociación de Criadores de Ponis de Raza Asturcón, ACPRA, le disgusta que todavía haya gente que se lo pregunte. Aunque lo cierto es que esta raza autóctona asturiana es perfecta para usos lúdicos y terapeúticos, para actividades agrarias o incluso como alimento, este criador se pregunta por qué debe buscarse siempre una funcionalidad a las razas. Consciente de que la búsqueda de la rentabilidad por encima de todo puede incluso poner en riesgo la conservación de la pureza de un caballo que en la actualidad conforma una cabaña de 2.600 ejemplares y que aún está en peligro de extinción.
Evitarlo, por todos los medios, es algo en lo que se comenzó a trabajar ya en los años 70, de la mano del divulgador Félix Rodríguez de la Fuente y del ingeniero agrónomo Miguel Ángel García Dory. Aunque fue en los años 80, y promovida por entidades como la Asociación para la Conservación del Asturcón del SueveACAS, y también por particulares como Antón Álvarez Sevilla, al que alude Concheso, cuando la raza, en su variedad negra, recibió el impulso definitivo, para consolidarse, ya a mediados del 2005, con la recuperación de la variedad castaña

En la actualidad, y con más 800 explotaciones con asturcones, la intención de ACPRA es avanzar hacia la homogenización de la raza. «Aunque no está fuera de peligro, si contamos con un número importante de ejemplares, por lo que creemos que es el momento de estandarizar y ser más estrictos a la hora de seleccionar los sementales», explica el presidente de la entidad. Superado un número crítico de asturcones, Germán Concheso se inclina así por trabajar la pureza de una raza autóctona, que es patrimonio de Asturias y de la que existen menciones de historiadores romanos desde el año 80 a.c.
Ahora bien, esto en ningún caso está reñido con su comercialización, aclara el presidente de ACPRA, que admite que esta sería una opción que podría garantizar el futuro del asturcón. En ese sentido, desde la asociación de criadores trabajan desde varios frentes. De un lado, por su tamaño y fácil manejo, el asturcón es una caballo ideal para iniciar a los más pequeños en la equitación. Pero también para los adultos. Sobre todo «personas mayores que ya no montan, pero que continúan disfrutando del enganche, sobre todo en la zona sur de España».
Hasta allí han viajado también asturcones para desempeñar tareas agrícolas. En Almería, el propietario de una explotación de olivares adquirió ejemplares para el cuidado de sus fincas, relata Concheso, que apunta a que esa labor de conservación del terreno bien podrían también desarrollarla en las fincas y montes asturianos, a los que están perfectamente adaptados.
Por el mismo motivo que el asturcón es un caballo óptimo para los niños que se están iniciando en la monta, lo es también para hipoterapia. Es decir, para realizar terapia con personas con algún tipo de discapacidad a quienes el tratamiento con caballos contribuye a estimular, a mejorar el control postural o el equilibrio.
Y pese a que aquí en Asturias y en España el consumo de la carne de equino no está muy arraigado, lo cierto es que «está creciendo la demanda, tanto de potros como de ejemplares adultos, por parte de la industria de la elaboración de alimentos infantiles, ya que se trata de una carne con muy poca grasa».
Otra opción que también está empezando a barajarse es la del cruce comercial, para destinarlo tanto a consumo como a uso lúdico. Son opciones que ya están sobre la mesa. Mientras, ajeno a todo, el asturcón cabalga por los montes asturianos como, afortunadamente, lleva haciéndolo desde hace siglos.
Desde hace apenas un par de semanas, un total de 24 ya lo hacen por la sierra del Sueve, donde pastarán a lo largo del verano. Hasta allí fueron conducidos por un grupo de miembros de ACAS acompañados de savia nueva, chavales jóvenes que representan el relevo generacional para «garantizar la supervivencia del asturcón», subraya en este sentido Víctor Villar, responsable de relaciones de la entidad conservadora de asturcones del Sueve.

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