El Puzzle de la Izquierda no acaba nunca....

La federación madrileña de Izquierda Unida prioriza la construcción de una alianza electoral al estilo Sumar para los comicios europeos de junio, pero se ha abierto a defender en el seno de la organización que el partido se presente en solitario por sus discrepancias con el funcionamiento de la plataforma de Yolanda Díaz desde las pasadas elecciones generales. Ese posicionamiento, recogido en un documento aprobado por la coordinadora regional a finales de 2023 y enviado a toda la militancia madrileña, al que accedió EL PAÍS, será ahora trasladado a nivel nacional. El planteamiento, que llega mientras Izquierda Unida se prepara para una Asamblea General convocada para elegir a su próximo coordinador federal tras la salida de Alberto Garzón, multiplica las críticas contra Sumar que ya ha entonado Podemos, aunque solo represente, por ahora, a la federación de Madrid. De hecho, IU está en el Gobierno de la nación a través de Sumar, planea presentarse con esta plataforma a las autonómicas gallegas y la organización estatal recuerda que la decisión sobre las europeas no corresponde a ninguna federación. “El tema es sencillo, la competencia para decidir cómo acude IU a las elecciones europeas corresponde gestionarlo a sus órganos de dirección federales, no a ninguna federación”, resumen fuentes de la dirección federal del partido. No obstante, IU Madrid defiende con claridad su planteamiento en un documento interno. “[Las europeas] son una oportunidad para cubrir el hueco que Sumar deja a su izquierda y despertar motivación en nuestras filas y su entorno político”, se lee en la documentación enviada a IU Madrid. “Ante la propuesta verde y de una Europa reformable a la que se vincula Sumar, (...) nuestra propuesta debe apostar sin ambages por el GUE [Grupo de la Izquierda en el Parlamento Europeo], en tanto que representa actualmente como grupo parlamentario un cuestionamiento integral y no reformista de la UE”, sigue. “No tiene ningún sentido que Izquierda Unida asuma por principio no ser un agente electoral independiente y visible. Nuestra propuesta es reforzar a IU como (...) sujeto electoral independiente”, se subraya. “Izquierda Unida, no debe descartar ni tener miedo a presentarse en solitario a este proceso si no lográramos afianzar el Plan A [una convergencia de las izquierdas al estilo Sumar] y alcanzar un acuerdo amplio de cara a estos comicios”, se recalca. Y se remata: “A modo de conclusión, no planteamos cerrar ahora nuestra política de confluencia y alianzas electorales, nuestro objetivo es lograr una candidatura lo más amplia posible, pero no por debilidad sino por convencimiento en la propuesta y la naturaleza del proceso”. Los motivos del desencuentro con Sumar son variados y afectan tanto al pasado (el funcionamiento de la plataforma desde las últimas generales) como al futuro (las dificultades que tendrá IU en las municipales y autonómicas de 2027 si diluye constantemente sus siglas en otras). A eso se le añade un punto de fricción exclusivamente relacionado con las próximas elecciones europeas. Izquierda Unida, que aliada con Podemos logró dos eurodiputados en 2019, entre ellos la actual ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, se siente identificada con el Grupo de La Izquierda Europea. Sumar gravita hacia Los Verdes, a los que en IU Madrid se ve como “de centro”. “En el plano organizativo, [en Sumar] hasta ahora, no ha existido ninguna intención de democratizar la coalición ni de favorecer dinámicas de participación entre las organizaciones en el ámbito local, apostando por la creación de un nuevo partido, contradiciendo así la idea inicial de movimiento de movimientos”, se lee en el documento de IU Madrid. “En el ámbito político, su naturaleza está estrechamente ligada a la participación en el Gobierno, centrado en una línea personalista que no se atenúa, sino que, más bien, se intensifica”, se añade. “IU Madrid apuesta sin ambages por la construcción de un Frente Amplio, en sintonía total con lo aprobado por los órganos federales”, se sigue. “No obstante, por experiencia histórica, debemos tener previsto también un Plan B si, como ha ocurrido hasta el momento, ningún otro actor de la convergencia comparte ese objetivo, o no está dispuesto a desarrollarlo” En su conjunto, las divergencias motivan que la federación madrileña no sea la única de las que conforman IU que ve complicaciones en la alianza con la plataforma de Díaz, según una fuente conocedora de las interioridades de la organización. “La reflexión afecta a muchos otros territorios, es una preocupación que nos afecta a todos sin excepción, porque Sumar se está constituyendo como un partido al uso, y no como el frente amplio de izquierdas en el que aprobó participar IU, o Compromís, los Comunes o Podemos”, asegura este interlocutor. “Las europeas no son como otras elecciones, en las que pones en juego gobiernos, ni hay circunscripciones que te complican la vida”, recuerda. “Es una sola circunscripción, lo que penaliza mucho menos la desunión. No se pierde voto. Y son elecciones muy ideológicas”, añade. Aunque subraya: “Nuestro punto de partida no es ir por separado, pero no hay que tenerle miedo”. “Para nosotros lo ideal es que Sumar funcionase como un espacio de convergencia, pero tal y como está conformado y funcionando, no vemos que sea el idóneo”, resume otra fuente conocedora de los debates internos de la organización. “No descartamos que IU se presente en solitario a las europeas, ya que la actual dirección de Sumar quiere orientar la candidatura para que se conforme dentro de Los Verdes europeos, cuando nuestro espacio es la izquierda (The Left)”. Quedan seis meses para las europeas de junio. Antes se votarán las autonómicas gallegas, y, quizás, las vascas, recuerdan en Izquierda Unida. Con ese calendario por delante, las convocatorias regionales cobran prioridad, según analiza un estratega de un partido de izquierdas, que también refiere la dificultad de afrontar el debate sobre la candidatura de IU en las europeas mientras el partido también protagoniza el de la elección de un nuevo coordinador federal. Pero el momento llegará, e IU Madrid va fijando posición: lo ideal es una alianza al estilo Sumar, pero si no se dan las circunstancias adecuadas, lo mejor es presentarse con las siglas de IU.