Antes de actuar quieren conocer. Es, a grades rasgos, el mensaje que la consejera de Cultura, Berta Piñán, lanzó ayer al equipo de gobierno municipal en relación a la situación que atraviesa la plaza de toros. El Principado quiere conocer todos los detalles sobre el proyecto y las actuaciones que prevé realizar el Ayuntamiento en el coso antes de rebajar su nivel de protección para poder acometerlas. Hay que recordar que el pasado mes de noviembre, el alcalde, Alfredo Canteli, solicitó la colaboración del Principado de Asturias para actuar en la plaza de toros con la intención de cubrir el recinto para transformarlo en un espacio multiusos con capacidad para 5.000 personas.
En un acto celebrado ayer, en la biblioteca de El Fontán en torno al legado del autor de 'La Regenta', Leopoldo Alas 'Clarín', la consejera de Cultura aseguró que
su departamento está a la «espera de conocer formalmente» el proyecto para la plaza de toros, catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC), antes de decidir rebajar su nivel de protección.
Piñán se comprometió a estudiar el proyecto del Ayuntamiento en cuanto llegue a Cultura y Patrimonio, peno no sin antes señalar que «más allá de que la plaza de toros sea BIC o no sea BIC» en medio hay una normativa de transformación de los monumentos en nuevos usos. «No podemos decir nada hasta que ese proyecto no lo tengamos encima de la mesa», incidió.
Lo mismo para La Vega
En el mismo sentido apuntó sobre el proyecto para la fábrica de La Vega y los accesos a la ciudad atravesando parte de su superficie, con el fin de salvaguardar la iglesia prerrománica de San Julián de los Prados. «Estoy pendiente de las actuaciones y de los proyectos que el Ayuntamiento, de alguna manera, va diciendo como posibles para la desviación de la entrada a Oviedo, pero los estudiaremos cuando los tengamos encima de la mesa». Una declaración de intenciones que pasa por posponer la opinión técnica de la Consejería a la presentación formal del proyecto. Todo en un contexto en el que el Ayuntamiento ha planteado al Principado que asuma el desarrollo de los usos industriales en La Vega a través del plan diseñado por Alcaldía. El Consistorio asumiría, preferentemente el aspecto cultural, mientras que la administración autonómica se encargaría de la herencia industrial para desarrollar centros de investigación e incubadoras de empresas.
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