No lo cambio por aquella Estación!

El complejo de El Vasco generará hasta un millar de empleos a partir de 2021

Palmeras. La urbanización tiene estas jardineras, con bancos incorporados, en las que se ha apostado por palmeras. /FOTOS: ALEX PIÑA

Tras la entrega de las viviendas, el parking y los espacios públicos, en octubre abrirán los restaurantes, el Mercadona y el gimnasio

PAZ DE ALVEARA finales de 2021, El Vasco tendrá 120.000 metros construidos. El complejo está a punto de llegar a su ecuador. En abril se entregarán las viviendas con las tres torres residenciales, a la par prácticamente que el aparcamiento de 40.000 metros cuadrados. En otoño, se inaugurará la zona del zócalo, que albergará negocios hosteleros, comerciales, de ocio y oficinas, cuyas obras avanzan a buen ritmo. Y para finales del próximo año, está prevista que finalice la construcción de las otras tres torres, dos serán de uso socio sanitario y una se convertirá en un hotel. Para entonces, «este transatlántico», en palabras de José Manuel Ferreira, del equipo de promotores, «generará entre ochocientos y mil empleos», y será «la nueva puerta» de la ciudad, que espera enlazar en un futuro con el proyecto del Bulevar de Santullano.

Un nuevo Oviedo, «moderno», que comenzaron a idear un grupo de inversores locales hace más de dos años para cerrar la «herida abierta» que había en El Vasco tras el fracaso de Vasco XXI, el Palacio de Justicia ideado por la socialista Paloma Sainz o las 'trillizas' que Santiago Calatrava dibujó al amparo de Gabino de Lorenzo.

Los creadores de la idea de El Vasco Gran Bulevar invirtieron cien millones de euros para crear esta nueva 'puerta' de la ciudad: «Es la obra, por inversión, más importante que hay ahora mismo en Asturias, salvo evidentemente la variante de Pajares».

Una obra que en tiempos de incertidumbre para el sector ha supuesto, desde sus comienzos, «un trabajo medio sostenido de 250 personas», directamente. Trabajo que, para algunos, ha supuesto una importante tabla de salvación para afrontar la desacelarión.

Cien millones de euros, 250 trabajos directos durante la obra, y hasta un millar de empleos cuando el complejo esté completamente en funcionamiento, con sus 120.000 metros cuadrados construidos. Su interior, más imponente de lo que se aprecia desde el exterior, ya muestra en lo que se convertirá «este proyecto con vocación metropolitana», en palabras de Ferreira, que no duda ni un momento en que será «un faro inspirador de La Vega de la innovación, de la Fábrica de Gas y del Bulevar de Santullano. Será un gran centro cívico», añade.

Medio kilómetro hay exactamente desde la entrada por Gascona hasta la salida a Martínez Vigil. Un perímetro que pronto bullirá. En abril, comenzarán a ocuparse las tres torres residenciales: cien viviendas, que ya están rematadas y todas vendidas, rodeadas de «modernidad», con portales perfumados, amplios, en los que no faltará música ambiental y ascensores de gran velocidad para asemejarlos a un 'lobby' de un hotel. En la urbanización que las rodea, acaban de colocarse jardineras que forman «esculturas con grandes palmeras».

A la par que las viviendas, el aparcamiento, que gestionará una empresa especializada, se abrirá a los propietarios de los pisos (400 plazas) y al público en general (800) con estacionamientos en rotación. Una 'puerta', en definitiva, para dejar el vehículo y moverse a pie después por la ciudad.

Desde un primer momento, los promotores tuvieron claro que este debía ser «un proyecto de ciudad», por lo que Oviedo ganará, a partir de abril, 14.000 metros cuadrados de espacio público, para disfrute de todos. Un espacio que liberará la presión que, en ocasiones, existe sobre la popular calle Gascona.

En octubre, se inaugurarán los locales hosteleros, el Mercadona y el gimnasio. El supermercado asomará directamente a la planta de la calle, junto al aparcamiento, frente a la glorieta de la Cruz Roja. Encima, estarán los restaurantes. Habrá más de mil metros cuadrados para Nacho Manzano y otros tantos para Tierra Astur, por ejemplo, como buques insignias. Los operarios trabajan con ahínco en esta planta para cumplir los plazos. En otoño, Manzano, por ejemplo, exhibirá cocina en vivo con vistas a la iglesia de Santullano; y del interiorismo de Tierra Astur se encargará Julio Valle. Unas dimensiones de negocios que permitirán realizar grandes banquetes que en este momento son imposibles en Oviedo. Completarán la nómina de restaurantes, una cervecería artesana, la Competencia, Vips, y otro restaurante de comida italiana. A ellos se podrá acceder por el ascensor panorámico, que exhibe la letras de Oviedo, por el interior del complejo o por la ampliada calle de Víctor Chávarri.

En la planta del medio, habrá oficinas (alquiler y venta), un local de 2.500 metros cuadrados que aguarda licencia y que, según Ferreira «se resolverá en breve», y una zona de ocio de juegos online, con Esports. El centro deportivo de Supera, con cinco mil metros, ocupará parte de dos plantas del complejo.

El hotel de cuatro estrellas, de Blue Hoteles, y las dos torres, para usos socio-sanitarios, con apartamentos para mayores y jóvenes, adquiridas por Ovida, tendrán la licencia «en estos días». Las tres torres «no serán miméticas, pero mantendrán un diálogo de construcción».

Así se completará «este transatlántico», que tendrá un encaje perfecto con la remodelación de la glorieta de la Cruz Roja prevista en el proyecto del Bulevar de Santullano, que los promotores aplauden. «Será la respuesta perfecta a las necesidades de El Vasco», completó Ferreira.