sábado, 29 de febrero de 2020

Nuevo palo a nuestro concejo...

Expal ejecuta el ERE tras no llegar a un acuerdo con los 52 trabajadores de Trubia: «Somos esclavos de la reforma laboral»

Expal ejecuta el ERE tras no llegar a un acuerdo con los 52 trabajadores de Trubia: «Somos esclavos de la reforma laboral»
Entrada a la fábrica de Expal en Trubia. / ÁLEX PIÑA

La plantilla consigue indemnizaciones por despido de hasta 56 días por año trabajado, «una salida digna»

ALBERTO ARCE
El combate ha terminado. Las negociaciones entre la compañía de Explosivos Alaveses (Expal), filial de la antigua Unión Española de Explosivos –ahora Maxam–, y el comité de empresa de la fábrica de municiones de Trubia no consiguieron llegar ayer a un acuerdo para suspender el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) después de dieciséis horas en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec). Un último encuentro que se saldó con los 52 empleados de la planta despedidos.
«Somos esclavos de la reforma laboral», confirmó, a eso de las cinco de la madrugada, el secretario general de UGT FICA Oviedo, José Luis del Mazo, después de que la plantilla aprobase por votación un principio de acuerdo de última hora, que se basó únicamente en los importes de las indemnizaciones por despido. «Creo que conseguimos una salida digna, el máximo legal de 33 días por año trabajado más una cantidad fija ligada a la antigüedad en la empresa», anunció Del Mazo. En resumen, una media de 56 días por año trabajado por empleado.
Los trabajadores sabían que la otra opción era complicada, pero lucharon hasta el último asalto. «La empresa quiere tenerlo cerrado hoy (por ayer)», había explicado el presidente del comité de empresa de Expal, Javier Rodríguez. «Pero nosotros estamos dispuestos a negociar hasta el último minuto», afirmó, durante uno de los muchos recesos que se vivieron durante la extensa jornada y que continuó durante la madrugada. Así lo hicieron, hasta eso de la una y media de la madrugada, pero no han conseguido evitar el despido colectivo.
Eso sí, la plantilla fue a negociar con apoyos sólidos. El Gobierno del Principado de Asturias, a través de la Dirección General de Empleo y Formación, instó anteayer a la compañía a acordar con los trabajadores una ampliación del periodo de consultas del ERE de extinción para buscar «soluciones no traumáticas» y «explorar todas las opciones posibles ante el posible cese de la actividad». Una solicitud de última hora apelando a la «buena fe negociadora» de los implicados y reiterando la necesidad de que la empresa busque alternativas.
Sin embargo, al primer descanso de la mañana la dirección de Expal Metallurgy ya había rechazado esa opción. Al séptimo, ya casi todo parecía perdido. «Está muy encallado», manifestó, a las nueve horas de infructuosa reunión, el presidente del comité.
La postura de Expal era clara, Indemnizaciones más cuantiosas -cercanas a los 7.000 euros, según ha podido conocer este diario-; la de los trabajadores también, «queremos que se mantenga el empleo, es por lo que estamos aquí», concluyó Rodríguez, antes de entrar a uno de los últimos asaltos. Al menos parte, ya que la contrapropuesta presentada por los sindicalistas clamaba por el mantenimiento del taller de vainas de la factoría con empleo para la mitad de la plantilla. Al final no se logró.
La medida se hará efectiva el lunes y los 52 despedidos de Expal, por lo pronto, cesarán en sus movilizaciones y reivindicaciones. Después de dieciséis horas negociando con la empresa, y de un mes de huelgas, cortes de carretera y contactos políticos, el antiguo taller de Quintana no volverá a abrir sus puertas al empleo en la villa cañonera.

No hay comentarios: