viernes, 20 de octubre de 2023

Un problema en ascenso...

Nortes | Centraes na periferia ActualidáDestacaesEntrevistas “El rentismo no puede ser más favorable que la inversión productiva” Jorge Dioni López presenta "El malestar de las ciudades" en el CM de El Llano este viernes a las 19.30 con la Sociedad Cultural Gijonesa Por Víctor Guillot 19 octubre 2023 Jorge Dioni. Foto: Arpa Editores Recomendados Triángulo de Amor Bizarro: “Somos críticos con la nostalgia y en los 90, lo normal era que te robasen” 20 octubre 2023 Convocan concentración por la masacre en Gaza frente al Teatro Campoamor 20 octubre 2023 El Ayuntamiento comprará Naval Gijón 20 octubre 2023 “El rentismo no puede ser más favorable que la inversión productiva” 19 octubre 2023 Víctor Guillot Víctor Guillot Víctor Guillot es periodista y adjunto a la dirección de Nortes. Ha trabajado en La Nueva España, Asturias 24, El Pueblo de Albacete y migijon. “Este verano ya hubo un desembarco importante de turistas en Gijón. Estaba en el bulli bulii y en cuanto se consolide el AVE será una línea muy golosa para los operadores low cost y para aquellos turistas que quieran pasar sus vacaciones en Gijón” afirma Jorge Dioni López, el periodista que reveló en La España de las Piscinas como existía una ideología del comportamiento urbano tras el boom inmobiliario. Jorge Dioni López acaba de publicar ahora “El malestar de las ciudades” (Arpa), donde analiza el sentido que tienen hoy las viviendas, entendidas estas como un negocio que ya no está destinado para las personas. El rentismo, la gentrificación y la turistificación han sustituido a las ciudades como espacio donde habitaba una burguesía y una clase obrera que desarrollaba sus planes de vida y convergían en las fábricas por decorados dedicados a la hostelería. Como consecuencia de ello, las ciudades han perdido su identidad y se han homologado sirviendo de base para la especulación, el turismo desregulado y consumismo dominguero que destruye el arraigo de los vecinos, obligados o tentados a irse a otra parte. Este viernes, tendrá lugar la presentación de su libro, organizada por la Sociedad Cultural Gijonesa a partir de las 19.00 horas en el Centro Municipal del Llano, Más allá del movimiento de maletas recurrente cada domingo en hoteles y portales de Gijón, parece que la ciudad es el objeto de deseo de quienes quieren tener en Asturias una segunda residencia, como consecuencia del cambio climático. Creo que el fenómeno de la segunda residencia se producirá en localidades más pequeñas. La ciudad tiene potencial para un turismo de otro orden. Tiene edificios que se pueden hacer hoteles y ser una importante fuente de inversión. Está la gente que compra fuera y la gente que vende dentro y que cree que puede ser una buena jugada. ¿La turistificación tiene como efecto la expulsión de los “arraigados” hacia la periferia tanto como la llegada de segundos residentes? Tanto uno como otro producen vivienda vacía y vaciamiento de gente. Vaciamiento de comercio. El turista no necesita una ferretería, ni un colegio, ni una biblioteca. Necesita un sitio donde comer o un sitio donde comprar ropa. El desarrollo del comercio hostelero será impotrante en ese sentido. ¿Y como combina eso con una ciudad con peso y vocación industrial , con una conexión portuaria y una acería a escasos kilómetros?. Acaban de invertirse 425 millones en la descarbonización. Cuando los futbolistas se retiraban, compraban pisos o ponían un bar. Entiendo la vocación industrial pero ser rentista es una tentación muy elevada. En Asturias no se da ese caso todavía, porque mantiene ciertos impuestos, pero en otros territorios, el marco fiscal para ser rentista es mucho más favorable. ¿Crees que el impuesto de sucesiones y de patrimonio que el gobierno socialista asturiano defiende casi de una manera numantina, ¿funciona como una barrera frente a la gentrificación y la turistificación? Funciona de una manera casi psicológica. El marco fiscal de algunas comunidades conduce hacia un mercado mobiliario que dispone de una rentabilidad loca. No puede ser que lo más rentable en este país sea comprar pisos. No puede ser que el rentismo más favorable que la inversión productiva. Por eso decía que el peso industrial en Asturias equilibra esa balanza, es decir, que puede actuar como contrapesa a la posibilidad que todo se concentre en la actividad turística y en la venta de inmuebles. Será un debate en los próximos lustros Lo está siendo porque los grandes empresarios amenazan constantemente con llevar sus actvidades a Madrid para evitar el impuesto de sucesiones, principalmente. Y es un relato que ha construido la derecha, logrando persuadir a muchos ciudadanos con que el impuesto de sucesiones o de patrimonio “crujirá” a todos. Pero es el relato. Y es similar a los ocupas. Han logrado convertir un problema que sólo tiene el 0,01 de los españoles en un problema general y que todos tengan miedo. Ha fallado la izquierda a la hora de ofrecer los datos Los relatos son mucho más poderosos que los datos y si no fuera así no existiría Dios, no existirían los celos o los vínculos familiares. Minimizar el relato del impuesto de patrimonio o sucesiones. Tu quieres que te afecte, te gustaría que te afectara y manifestarte en contra del impuesto te colocaría en un puesto social al que te gustaría pertenecer y aquí intuyo que empezarán a llegar inversores por otro lado. El inversor mexicano que vive en Madrid, cogerá el AVE y se presentará en Gijón y dirá que esto está muy bien y que merecerá la pena colocar una oficina y empezará a comprar edificios Ya está pasando. Comienzas comprando un equipo de fútbol y acabas reformando el Plan General de Ordenación Urbana. Ha sucedido en Málaga. Hace 25 años era una ciudad fea. Acogió inversores extranjeros y hoy al gente está encantada porque ve movimiento a pesar de que es una ciudad gentrificada. En Gijón siempre ha existiendo un sentido de pertenencia a sus servicios públicos muy arraigado. De qué manera esto puede ser una barrera para la gentrificación y turistificación de las ciudades. La vinculación a lo público genera una conciencia que puede funcionar. Pero Gijón es una de esas ciudades en las que hay más perros que niños. Si mandas a la gente fuera, los colegios se van quedando sin clases. El trasvase de gente que se va fuera por la que entra. El ensanche de Vallecas lo vivió así. Para hacer la ESO, hoy hay cinco colegios concertados. Lo público tiene que ver desde el centro de salud a la plaza o sea, la calle o, incluso, la playa. Pensamos que la playa es pública pero Rajoy publicó una ley que dice que los servicios privados pueden ocupar el 40% de una playa.

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