Los redactores del PGO instan a terminar viales abandonados para mejorar las comunicaciones
El fracaso de algunas actuaciones puede «perpetuar conexiones interrumpidas» entre barrios y partes de la ciudad, advierten
Los ejemplos están por todas partes: en La Lloral hay cuatro kilómetros de calles a medio hacer, los viales de Quinta del Alba mueren en sendos prados y entre Las Campas-Paniceres y La Florida han quedado dos esbozos de lo que deberían ser los ramales de enlace de aquella Ronda Norte de Cascos, para cuyo nuevo diseño Fomento estudia alternativas. Los efectos de la crisis sobre el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) vigente, el de 2006, no son solo solares abandonados y recalificaciones irreversibles, también ha dejado numerosos viarios interrumpidos para los que los redactores del nuevo plan piden una actuación más directa de la administración local para evitar «perpetuar de manera indefinida o a muy largo plazo las conexiones interrumpidas entre barrios y partes de la ciudad». Abogan, en concreto, «por actuaciones más directas de los sistemas de ejecución del PGO», por no dejar en manos solo de la iniciativa privada completar las obras de estas calles, sino que el Ayuntamiento actúe de forma subsidiaria.
No son cosas menores. El fracaso de algunas unidades de gestión y actuaciones ha dejado a otras aisladas o casi, mermando su desarrollo y dificultando aún más las comunicaciones internas de la ciudad. También afecta a los planes de futuro para la ronda interior de Oviedo -el anillo que forman la Ronda Sur, Muñoz Degraín, Hermanos Pidal, la avenida de Santander y General Elorza, las calles con más tráfico de la ciudad-, cuyo intenso tráfico supone una barrera para la movilidad entre el centro de la ciudad y los barrios, además de contaminación y ruido. El documento de prioridades entregado por la UTE PGO Oviedo, en línea con el Plan de Movilidad en trámite, aboga por «la posibilidad de reordenación de estas rondas con criterios de bulevar», reduciendo su capacidad y carriles y facilitando la permeabilidad peatonal y ciclista entre la periferia y el centro.
- Entre
- La Florida y Las Campas medió un rodeo de seis kilómetros por carretera durante años.
- Desavenencias
- Entre promotores y los malos tiempos del sector dejaron a los dos barrios incomunicados entre sí.
- Una década
- Tardaron en completarse y parcialmente las obras de Las Campas-Paniceres. La conexión abrió en 2012.
La idea choca, por ejemplo, con el fracaso de la denominada ronda intermedia. Un vial, diseñado en el PGOU de 1999 y ampliado en el de 2006, que corría en paralelo a la ronda exterior (A-66) desde La Manjoya a Cerdeño, uniendo las actuaciones de la primera, Otero, Quinta del Alba, Mercadín y Cerdeño con una calle de dos carriles por sentido y casi veintitrés metros de anchura. Tramos aislados, como el que forma la calle Salvador Fuente González o Villafría, es todo lo que hay hecho a día de hoy.
El documento esboza alternativas y casi no renuncia a ninguna. Apunta la conveniencia de acometer los viales de la malhadada actuación de Loma del Canto, donde tras la espantada de la promotora los minoritarios se enfrentan a una millonaria expropiación, para dar salida al tráfico de la zona oeste hacia el Naranco y Prados de la Fuente. Incluye la conexión entre este último barrio y Fitoria, con la transformación en un vial rodado del actual paso peatonal entre ambas zonas, un frente en el que ya trabaja el Ayuntamiento pisando la reserva de suelo del plan vigente para la Ronda Norte.
En el otro extremo de la ciudad, con el desarrollo de El Campón encauzado y con perspectivas razonables para el ambito de Altos de Santo Medero, los redactores pintan entre los objetivos completar el vial previsto en la colindante actuación de Santa Marina de Piedramuelle, lo que permitiría unir el campus de El Cristo y el futuro desarrollo del área del antiguo HUCA con las vías de alta capacidad del centro de la región.
Queda buscar una solución para mejorar las comunicaciones de San Claudio. La propuesta de los redactores deja vivas todas las opciones: la Ronda Norte en la que trabaja Fomento o la alternativa de una vía rápida a través de Montecanales, pero pone fin a aquel vial Vallobín-San Claudio que el Ayuntamiento cargaba a los promotores de la zona. Lo hace 'matando' el ámbito urbanizable de Tresllames, al que se cargaba un importante tramo de esta calle de cuatro carriles, cuyo arranque estaba en la prolongación de Marcelino Suárez.
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