Vecinos de El Cristo están decididos a recuperar la plaza de toros, actualmente en un estado ruinoso que impide su uso por motivos de seguridad. Para Ramón del Fresno, presidente de la Asociación de vecinos El Cristo, Montecerrao, Llamaquique y Buenavista, no se trataría de una rehabilitación con objeto de volver a celebrar ferias taurinas, sino para habilitar El Cristo Arena, un lugar de conciertos y eventos.
El presidente del colectivo, Ramón del Fresno ha enviado al alcalde, Alfredo Canteli, su idea del proyecto. Se trata de conservar los muros y aspecto exterior, modernizar el interior y colocar una cubierta translúcida y placas solares. “Hay que pensar en usos polivalentes, entre 6.000 y 8.000 localidades en función”, señaló Del Fresno en una entrevista concedida a onda cero. “Hoy por hoy la afición taurina en Oviedo es muy reducida”, reconoce. En honor a su origen “tal vez se podría instalar un museo taurino”.
Dada la alta protección patrimonial, el estilo mudéjar, el ladrillo y la cubierta teja se recuperaría. “Habría que hacer una cubierta moderna permanente, sin movilidad, para garantizar la estanqueidad y el uso en cualquier época del año: envolverla para que sea confortable y utilizable”, dice el presidente vecinal.
Se trata de una vieja reivindicación “muy importante para el barrio, uno de los temas abandonados desde hace año”, por lo que anuncian que introducirán una alegación en el plan especial del Cristo. “Estamos en contacto con el alcalde, Alfredo Canteli, y pendientes de tener una reunión para tratar un proyecto que creemos realizable”, aseguran.
El Ayuntamiento de Oviedo ha intentado en varias ocasiones dar un uso a la plaza, pero está actualmente protegida como Bien de Interés Cultural (BIC), por lo que cualquier proyecto para su reutilización es complicado, ya que en teoría no se puede modificar su estructura original, realizada por Juan Miguel de la Guardia en el año 1889.
Lo curioso es que su estructura ya no es la original, porque en 1932 un incendio obligó a su reforma integral y perdió una de tres alturas, que nunca recuperó. En 1957 se realizó una nueva remodelación integral, la última hasta su cierre por deterioro en 2008. Las últimas corridas de toros se organizaron en las fiestas de San Mateo del año anterior.
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