El post del España-Croacia: Lucho le quita hierro a la cosa
Dos partidos, dos sobradas. Dos rivales de enjundia, dos huracanes españoles. Lucho le quitó hierro a la cuestión nacional de la selección de fútbol, tan importante o más que el estado de la nación en muchas ocasiones, con un segundo triunfo consecutivo en la Liga de Naciones de la UEFA.
La segunda receta de Luis Enrique curó al enfermo del pasado Mundial. Como un reconstituyente, este prestidigitador de vestuarios que es el asturiano logró extraer lo mejor de la vitalidad del grupo de futbolistas convocados. Ahora sí.
Así que, en esa mezcla de garra con toque para protagonizar llegadas rápidas en oleadas, como incursiones aéreas bélicas, España aniquiló a base de bien a Croacia, un fantasma errante (con bola y todo) de la que alucinó al mundo con el reciente subcampeonato en Rusia.
La nueva España fue un ciclón, la tormenta perfecta. Goles de todos los colores y bien repartidos, como los equipos buenos que no dependen de un solo ‘killer’. El festival del gol, en nombres, lo concursaron Saúl, Asensio (por dos veces aunque el segundo fue en propia meta de Kalinic), Rodrigo e Isco. Seis. Set en blanco. El toro a las seis (por los goles), el torero a los veintitrés (por los convocados).
Isco y Modric durante el España-CroaciaGetty Images
Y los cambios del seleccionador en comparación con la plaza toreada de Wembley tampoco causaron estorbo. Aliviaron los sistemas de conducción, con Gayá por Marcos (porque por aquí no va a pasar Jordi Alba), Ceballos por Thiago y Asensio por Aspas.
Casualmente, tres pipiolos lo fueron todo en el partido: Saúl, al que el fútbol español debe una explicación por su ostracismo ruso; Asensio, otro que tampoco fue allí lo que es ahora, el nuevo martillo de Thor a lo Augenthaler; y Rodrigo, que cada vez parece mejor. Enfrente de mitos como Modric y Rakitic, cadáveres deportivos andantes de esta pantomima croata.
El espectáculo de las selecciones no volverá hasta el 15 de octubre, con el España-Inglaterra al que seguirá un mes después la devolución de visita a Croacia. Esta Liga de Naciones está chupada.
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