NYT.Trump dice que suspenderá la inmigración mientras algunos gobernadores dan los primeros pasos para reabrir los estados.
El presidente Trump anunció un plan para cerrar Estados Unidos a las personas que intentan venir al país para vivir y trabajar. Justificó el paso drástico como un paso necesario para proteger a los trabajadores estadounidenses de la competencia extranjera una vez que la economía de la nación comienza a recuperarse del cierre causado por el brote de coronavirus.
"A la luz del ataque del enemigo invisible, así como de la necesidad de proteger los trabajos de nuestros grandes ciudadanos estadounidenses", escribió el Sr. Trump en Twitter a última hora de la noche del lunes. "¡Firmaré una Orden Ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración a los Estados Unidos!"
El anuncio se produjo sólo unas horas después de que el presidente y varios miembros de su administración hubieran presentado explicaciones largas, y a veces defensivas, de su esfuerzo por proporcionar a los Estados las pruebas generalizadas que necesitarán para reabrir sus economías. Y siguió a los anuncios de un pequeño grupo de gobernadores —encabezados por tres republicanos en el sur— de que estaban dando los primeros pasos para hacer precisamente eso.
Pero el anuncio nocturno del presidente marcó su intento más amplio hasta ahora de sellar el país del resto del mundo.
En las últimas semanas, la administración Trump ha dicho que los problemas de salud justificaban pasar rápidamente hacia impedir que los solicitantes de asilo y los inmigrantes indocumentados entraran en el país, alarmando a los defensores de inmigración que han dicho que el Sr. Trump y sus asesores están utilizando una pandemia para ampliar las políticas de línea dura.
Bajo el tipo de orden ejecutiva que el presidente describió, la administración Trump ya no aprobaría ninguna solicitud de extranjeros para vivir y trabajar en los Estados Unidos por un período de tiempo indeterminado, cerrando efectivamente el sistema de inmigración legal de la misma manera que el presidente ha abogado por mucho tiempo cerrando las fronteras a la inmigración ilegal.
A los trabajadores que durante años han recibido visas para realizar trabajos especializados en los Estados Unidos también se les negaría el permiso para llegar, aunque los trabajadores en algunas industrias consideradas críticas podrían estar exentos de la prohibición, dijeron personas familiarizadas con la decisión del presidente.
El número de visas emitidas a extranjeros en el extranjero que buscan emigrar a los Estados Unidos ha disminuido en aproximadamente un 25 por ciento en los últimos tres años, a 462.422 en el año fiscal 2019, de 617.752 en 2016.
Incluso antes de la pandemia, el presidente y algunos de sus asesores más duros habían estado ansiosos por reducir aún más la inmigración legal, argumentando que la promesa de campaña del Sr. Trump "America First" debería considerarse como una protección de los estadounidenses nativos de tener que competir con trabajadores extranjeros.
Stephen Miller, el arquitecto de la agenda de inmigración del presidente, ha presionado repetidamente por regulaciones y acciones ejecutivas que limitarían la cantidad de inmigración que se permite cada año.
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