REDACCIÓN
Es uno de los grandes debates que surgieron con la expansión de la pandemia y, aunque ha estado aparcado, Adrián Barbón ha vuelto a traerlo a la primera línea de actualidad. El uso de las nuevas tecnologías para rastrear a los infectados tiene detractores y defensores por igual, pero entre estos últimos se sitúa el presidente del Principado. Al menos esa es la conclusión que se extrae de uno de los mensajes del líder del Ejecutivo en Twitter -red social que las últimas semanas le ha servido para dar noticias de calado- en el que asegura que «en los próximos días» realizará un anuncio «importante» en relación a la implantación en Asturias de una app de rastreo.
La principal ventaja de este tipo de herramientas es que permite realizar un minucioso seguimiento de las personas infectadas y de sus contactos. Esto facilita la detección de posibles nuevos casos y permite frenar en seco la expansión. El gran argumento que utilizan los detractores es que podría vulnerar la ley de protección de datos, y en su contra juega que en otros países en los que se ha usado era de carácter voluntario y la mayoría de la población no la utilizaba.
El incremento de positivos en las últimas semanas era previsible debido al fin de las restricciones a la movilidad que fijaba el estado de alarma. A pesar de ello, el objetivo del Principado es que la situación no se descontrole. Por ello, ha ido aprobando nuevas medidas casi semanalmente. La primera de ellas fue el uso obligatorio de la mascarilla, después se prohibió el botellón y más tarde limitó la actividad en hostelería, restauración y ocio nocturno. Estos locales deberán cerrar a las 2.00 horas, no podrán recibir nuevos clientes desde las 1.30 horas y los clientes deberán estar sentados en mesas a partir de la medianoche.
Además, el Ejecutivo autonómico también implantó la obligatoriedad de «fichar» a los clientes de negocios como hoteles, peluquerías, salones de belleza, gimnasios, saunas o spas, entre otros. En el caso de los locales de hostelería se trata de una recomendación y no una obligación. Barbón explicó que el motivo es evitar problemas legales, por lo que habrá que esperar para ver qué fórmula se utilizará con la app para sortear esa problemática.
Por el momento no se conocen los detalles de cómo funcionará esa app, si será de carácter voluntario u obligatorio y qué tipos de datos deberán facilitar los usuarios. Barbón se ha limitado a responder en la red social a la pregunta de si el Principado tenía pensado implantar la app Radar Covid como herramienta de rastreo. Su respuesta ha sido contundente: «Sí. De hecho los próximos días haremos un anuncio importante en este sentido, en el marco de la colaboración público-privada».
Preocupante aumento de los contagios
Los contagios por coronavirus en Asturias no paran de crecer y las cifras se aproximan ya a las del mes de abril. La buena noticia es que la tasa de mortalidad nada tiene que ver con la de entonces. El Principado ha detectado en las últimas 24 horas un total de 26 casos nuevos, lo que indica la línea ascendente del Covid-19. El Ejecutivo autonómico mantiene en seguimiento a 400 contactos estrechos de las 95 personas infectadas desde el 7 de julio, fecha en la que se rompió la racha de 25 días consecutivos sin nuevos positivos.
Sanidad ha informado además de cinco brotes activos. El más antiguo es el de la cervecería Urban´s de Oviedo, que suma dos positivos en 24 horas y eleva la cifra total a 12. El que tiene más casos activos es el que está vinculado a un viaje de estudios a Málaga. Este suma otros dos positivos y la cifra se eleva a 13. En el caso del bar La Buena Vida de Gijón se han registrado dos positivos más (ya van 4) y en un brote en la empresa Grúas el Roxu hay otros cuatro casos. Por último, el positivo de una empleada en un geriátrico de Siero ha provocado que se decrete otro brote.
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