domingo, 22 de diciembre de 2019

La Voz de su amo, pero...buena gente!

«Las cuotas de acceso bajarán en enero para conseguir nuevos socios»

El presidente del Centro Asturiano en las instalaciones del Naranco. / ALEX PIÑA
El presidente del Centro Asturiano en las instalaciones del Naranco. / ALEX PIÑA

José Manuel Granda, presidente del Centro Asturiano | «Nos haría falta mucho más dinero por parte del Ayuntamiento, pero algo es algo. En Oviedo harían falta ocho centros asturianos»

OVIEDO.
Fue la sombra de Alfredo Canteli durante su presidencia en el Centro Asturiano y ahora le sustituirá durante cuatro años. José Manuel Granda no tuvo rival en las elecciones que el club de campo organizó este otoño. Su candidatura fue la única que se presentó a los comicios, pero no será hasta enero cuando él y su equipo tome posesión de su cargo. Este puesto no será nuevo para él. Hace diez meses, el entonces presidente dimitió para ser candidato por el Partido Popular en las elecciones locales y él le sustituyó. Recuerda ese momento como «triste» porque se fue su amigo, con el que tantos momentos ha compartido y nunca se imaginó que ocuparía el despacho principal de las instalaciones del Naranco.
-¿Cómo lleva la presidencia?
-Con cierta tranquilidad porque yo esto ya lo conocía.
-La experiencia siempre es un factor positivo.
-Son veinte años al lado del anterior presidente y eso siempre da confianza, aunque sustituir a Alfredo es muy complicado. Dejó el listón muy alto y tampoco pretendo superarle en nada.
-Presentarse a unas elecciones y no tener rival no es fácil.
-Le pasó lo mismo a Canteli en los últimos comicios.
-Pero en el resto sí los tuvo.
-Es cierto. Yo estoy muy agradecido a los socios porque mi intención hace diez meses era ocupar la plaza de Canteli hasta la convocatoria de las elecciones. Nunca me imaginé que me llegaría a presentar.
-¿Qué le hizo cambiar de opinión?
-Los socios empezaron a presionar y me convencieron. El problema era que no contaba con el apoyo de mi familia, pero al final mi mujer cambió de opinión.
-¿Alguna vez se imaginó ocupar este puesto?
-Nunca lo pretendí ni lo quise ni lo busqué.
-¿Cómo es un día a día en la presidencia del Centro Asturiano?
-Hago lo mismo que Canteli. Subo todos los días a las diez de la mañana, despacho con el gerente y las personas de la oficina y a las 13.30 me voy. Los fines de semana paso por aquí entre la una y las dos de la tarde porque es cuando más afluencia de gente hay y te comentan los problemas.
-¿Suelen ser muchos?
-Tenemos un buzón de sugerencias y los miramos una vez al mes. En la última revisión nos encontramos tres, que no llegaban a quejas, y te da una idea de cómo lo estamos haciendo.
-Su proyecto, dice, es continuista. ¿Qué tiene en mente para estos cuatro años?
-Quiero hacer las pocas obras que quedan, son dos, y que el club tenga un mantenimiento exhaustivo. Las instalaciones deben estar como una patena. No puede cambiar nada en cuanto a la jardinería, limpieza,... Eso hay que mantenerlo al cien por cien.
-Las inversiones que tienen pendientes son cubrir las pistas de pádel y la construcción del gimnasio.
-Eso es. Estamos pendientes de los permisos, ya están en manos de la Consejería de Patrimonio. En cuanto nos den el visto bueno, buscaremos empresas para que nos pasen los presupuestos y acometerlas.
-¿Calculan para cuándo tendrán toda la documentación?
-Esperemos que, en 2020, tener todos los permisos y poder empezar los trabajos.
-¿Las harán de forma simultánea?
-Todo depende de los permisos. Si vienen juntos, los haremos a la vez. En caso contrario, las haremos por separado. Lo que tengo claro es que las queremos hacer en estos cuatro años de mandato.
-¿Cuánto dinero invertirán?
-El gimnasio nos costará aproximadamente 650.000 euros y las canchas, 300.000 euros. Prevemos que las dos asciendan a un millón de euros.
-Son muchos los deportes que aquí se practican. ¿Han pensado en alguno nuevo?
-El balonmano, pero requiere cancha cubierta y en este momento no estamos muy sobrados. Todo se intentará.
-Otra área muy demandada es la de niños.
-Siempre está a tope. Lo ideal es que el espacio fuese el doble, pero ahí no podemos llegar.
-¿Van intentar ampliar un poco la zona de bebés porque está más saturada?
-Allí los niños están acompañados por sus padres. Hay unas mesas para que ellos puedan leer una novela o una revista, pero si hay cincuenta niños hay, como mínimo, otros tantos padres.
-Su intención es ganar quinientos nuevos socios y para ello quiere poner en marcha una campaña. ¿Cómo será?
-Estamos trabajando en ello, pero nosotros hasta el 15 de enero no tomamos posesión. Los socios serán los primeros en ser informados sobre cómo será.
-Concrete.
-Yo no tomaré ninguna decisión que no sea honesta para el Centro Asturianos. Hemos perdido ochocientos socios en veinte años y cada año fallecen entre treinta o cuarenta miembros. La persona que se queda viuda, a veces, también se borra. Lo que necesitamos ahora es un rejuvenecimiento y meter unos cuantos socios más.
-¿A cuánto ascienden las cuotas?
-Hoy en día son de 4.000 euros de acceso si no tienes ningún familiar dentro, pero a partir de enero las cantidades van a bajar para conseguir nuevos socios.
-¿Cuánto?
-Aún no está cerrado. Hablamos que nos hacen falta quinientos inscritos nuevos, pero igual nos bastan con trescientos. Después, los miembros pagan al mes una cantidad.
-¿Esta cifra bajará?
-No, pero tampoco quiero ser el presidente que las suba. Alfredo, que es mi referente, nunca las subió. Solo bajarán las cuotas de acceso hasta que consigamos el número de socios oportuno.
-Les han devuelto la subvención municipal que les quitó el tripartito. Esto beneficiará a las arcas del Centro.
-Aquí necesitamos de todo porque tenemos 250.000 metros cuadrados de finca con otros ciento y pico mil en el monte. Haría falta un banco que le sobrase el dinero para poder invertirlo todo aquí.
-¿Qué le parecen las críticas de algunos sectores por esta ayuda?
-Mi pregunta es por qué nos la quitaron. Yo no sé porque el Centro Asturiano se considera una casa de ricos cuando es todo lo contrario. Sobrevivimos gracias a las cuotas y son pequeñas. Si estas instalaciones no existiesen, estos niños tendrían que hacer deporte en otra parte.
-Habría más instalaciones municipales...
-Nosotros, con mucho gusto, soportamos esta carga y lo lógico es que se nos ayude. Para mí nos haría falta mucho más dinero, pero algo es algo. En Oviedo harían falta ocho centros asturianos.
-¿Por qué?
-Cuanto más deportes y cultura tengan los chavales, menos pensarían en otras cosas.
-¿Alguna vez han pensado en abrir instalaciones deportivas para todo el público y obtener así nuevos ingresos?
-No porque cuando tenemos las competiciones se llenan. No hay sitio para más. Abrimos las puertas a todo el mundo el día del Bollo y los socios tienen invitaciones para darles. Además sería una faena para los socios.

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