El Principado mediará entre Defensa y Santa Bárbara para que se firme el contrato del 8x8
El Gobierno sacará a licitación pública el encargo pero «aún hay posibilidades», asegura la directora general de Industria
La fábrica de armas de Trubia ha perdido una batalla, pero la guerra por la modernización de las Fuerzas Armadas ni siquiera ha terminado de arrancar. La Dirección general de Armamento y Material del Ejecutivo en funciones de Pedro Sánchez declaró el lunes desierto el contrato para la producción del Vehículo de Combate Sobre Ruedas (VCR) 8x8 Dragón en la villa cañonera, tras rechazar la propuesta productiva que había presentado Santa Bárbara Sistemas en su rol de única contratista invitada a participar. Ahora, el Ministerio de Defensa ha anunciado que reabrirá el contrato y que la forma elegida para sacarlo adelante podría ser la de la licitación abierta. No obstante, y tras valorar lo que podría presentarse como un nuevo mazazo a la industria asturiana, el Gobierno del Principado actuará como mediador entre Defensa y la empresa para que el 8x8 no se despida de la región de forma definitiva. «Vamos a hacer todo lo posible para que ambas partes acerquen posturas y se firme este contrato. Todavía hay posibilidades, no está todo cerrado», manifestó ayer la directora general de Industria, Rosana Prada.
«Existe una lógica preocupación en lo que respecta al contrato, estamos ya al corriente de las negociaciones desde hace meses», explicó Prada, y afirmó que, tras ponerse en contacto con las partes, «el punto de desencuentro es el del presupuesto», aseveró. «El que propone el Ministerio es insuficiente para la empresa. Además, hay que tener en cuenta que el presupuesto sería cerrado durante los ocho años de duración del contrato y no admitiría ningún coste extra, con el consiguiente riesgo que ello conllevaría», argumentó la directora general de Industria.
De hecho, la solución, en palabras de Prada, podría tener dos caras. «El Ministerio podría revisar el presupuesto al alza o disminuir las exigencias incluidas en el pliego de condiciones», concluyó.
Aun así, los planes de Defensa son claros. Después de rechazar a la filial en España de General Dynamics, el contrato será lanzado de nuevo, aseguraron fuentes gubernamentales al portal especializado Infodefensa, «manteniendo el techo de gasto y el número de vehículos a obtener, flexibilizando otros parámetros». Es decir, los 348 blindados del primer lote y un presupuesto de 2.083 millones de euros para fabricarlos. «El objetivo fundamental es que el Ejército de Tierra disponga de estos materiales a la mayor brevedad posible y que este incidente no suponga un retraso significativo», aseveraron las mismas fuentes del Gobierno.
Y es que la tesis de Defensa defiende que la oferta de Santa Bárbara no cumplió con los requisitos del pliego de prescripciones técnicas en sus apartados de plazo de ejecución, suministro de vehículos de serie y prototipos, y hasta el orden de producción de las trece configuraciones diferentes del blindado. Y además no asegura la invariabilidad de los costes de producción en caso de imprevisto. Aun así, según las declaraciones a las que ha tenido acceso este diario, la empresa presentó una oferta «que responde tanto técnicamente como económicamente, y con precios de mercado» a lo que habían solicitado desde Defensa.
«Santa Bárbara Sistemas seguirá adelante persiguiendo el 8x8», constataron las mismas fuentes, siempre y cuando haya opciones productivas para llevarlo a cabo. Un enunciado que se queda en el camino de la intención, ya que, de salir a concurrencia pública el programa, otra empresa extranjera podría terminar liderando la modernización del Ejército español.
Postura unánime
Por eso, desde el Ayuntamiento, la portavoz de Somos, Ana Taboada, llamó ayer, a través de una nota de prensa a los grupos municipales y al Gobierno asturiano a actuar conjuntamente ante este duro revés para el empleo en la capital, que supone la pérdida de al menos 91 empleos directos en Trubia durante una década. «Tanto desde el Ayuntamiento como desde el Ejecutivo autonómico se debería mover ficha para forzar al Ministerio de Defensa a reconsiderar una decisión que supondría un duro golpe para nuestro ya precario mundo laboral», reclamó la líder morada.
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