lunes, 25 de noviembre de 2019

Miradas sobre el Oviedo 4.0

«Oviedo tiene que asumir que es capital de una Asturias que ha cambiado»

Víctor García Oviedo en su estudio. / M. ROJAS
Víctor García Oviedo en su estudio. / M. ROJAS

El urbanista repasa el estado de la revisión del Plan General, el plan de El Cristo y el encaje y la importancia del área metropolitana

JUAN CARLOS ABADOVIEDO.

Victor García Oviedo recibe a este diario en su estudio, sobre la gran mesa irá depositando problemas y diagnósticos de la gran urbe asturiana que percibe como hecho físico: el área central metropolitana. Inmerso en la redacción del nuevo Plan General de la capital del Principado, junto al también urbanista Ramón Fernández-Rañada, a García Oviedo, le preocupa poner en marcha ya, cuanto antes la ciudad región. En un monólogo torrencial, solo al final aceptará preguntas acerca del encaje de Oviedo en el nuevo ente: «Tiempos nuevos, estructuras nuevas», afirma.
Y sigue: «Nos encontramos en una situación de incertidumbre y hay que intentar repensar lo que se hizo hace 40 años. Entonces nos preocupaba urbanizar, poner calles, colegios, centros sociales, hoy las necesidades han cambiado. Debemos construir la ciudad del futuro y como urbanistas tenemos esa responsabilidad. Como referencia, lo que percibe la gente es que a mediados del siglo XIX se rompen las murallas, la ciudad se extiende en la tan traída y llevada mancha de aceite que, en resumidas cuentas ya eran áreas metropolitanas. Ahora tenemos un problema. Tenemos que construir la región metropolitana sin haber solucionado lo anterior: Construir la región metropolitana y, por otro lado, construir su centro, ambas cosas está ligadas. Porque se construye solo, es dinámico, la propia ciudad, como hecho físico, se construye; podemos liderarla pero ella va buscando su hueco. Oviedo crece con su tendencia natural. Gijón, lo mismo, cada concejo va buscando sus vías. ¿Por qué ahora? ¿Qué pasa ahora? No tenemos más tiempo y necesitamos proyectos de futuro, algo por lo que luchar. Y hay que empezar por algo. Quizás la movilidad, la accesibilidad, sea lo más facil».-¿Dónde encajamos Oviedo en ese área central?

-El problema que tiene Oviedo y que también es su virtud es que es la capital de Asturias. Si yo soy capital, la cabeza de un organismo que ha cambiado, yo tengo que cambiar. Asumir que es capital de una Asturias que no tiene nada que ver con la del 77 o la del 76 cuando la diputación preautonómica construyó la autopista 'Y'. Tiene que asumirlo desde la capitalidad.
-También aplica aquí su decálogo sobre la ciudad, en la revisión del Plan General.
-Me dicen que lo fuerzo. Podría haber doce o trece ciudades y la revisión del Plan General se tiene que enfrentar a eso. A cuál se le va a dar más peso. Para mí, la clave de Oviedo, que no quiere decir que lo demás no importe, es la Universidad, porque es la que tiene el conocimiento y Asturias no tiene futuro sin su Universidad. Esta que tenemos, otra, una tercera... No soy especialista pero hoy en día una sociedad que no tenga conocimiento y valor añadido está condenada a no desarrollarse. Otra cosa es que cuando hablamos del área central empecemos por algo más sencillo.
-Hablaba de la movilidad.
-Acesibilidad, que es algo más. El derecho que tienes como ciudadano a llegar donde te propongas. Accesibilidad, movilidad y transporte público aparecen en el discurso de la ciudadanía. Soy ciudadano y tengo derechos y obligaciones.
-El documento de prioridades lo conocemos.
-Está ahí, estos (PP y Ciudadanos) tienen que decidir. Puedo decir que no hay nada por nuestra parte que podamos poner en duda que no vaya a salir. Al final somos una asistencia técnica. Hemos tenido varias reuniones, las cosas pintan bien, pero ellos tienen que tener su tiempo. Todos ponemos en duda el bipartidismo pero tenía una virtud; al día siguiente de las elecciones, la administración estaba lista para funcionar. Los partidos nuevos necesitan su infraestructura. Nosotros, entre comillas, hicimos un documento no ideológico y de eso que no abunda: el sentido común. Dejamos materiales encima de la mesa, ingredientes. Ahora la ciudadanía y la clase política tendrán que discutir qué quieren y con esos ingredientes decirnos qué plato quieren que les cocinemos para la aprobación inicial.
-La Ronda Norte no está en los pliegos, ¿qué harán?
-Nosotros cumplimos, pero si la competencia es estatal haremos lo que diga el Estado, nosotros cumplimos los pliegos porque como asistencia técnica no podemos hacer algo ilegal. Unos aspectos pueden influir, otros no. El discurso no es inexorable hay quien está a favor de la ronda y quien está en contra. El documento sirve para identificar los problemas. Las áreas de oportunidad, proyectos que para mí son fundamentales como el Naranco. O El Cristo, La Vega o la Fábrica de Gas. Proyectos de capitalidad sobre los que hay que tener mirada central y regional que trasciendan al Ayuntamiento. Creo que se me entiende.
-Hubo cierta polémica con El Cristo y el plan especial, ¿lo incluirán en el PGO?
-Nosotros reflejamos de una manera neutra lo que se estaba haciendo. Creo que ahí se dio una reacción en cadena. Me costaba hasta a mí seguir la historia y de dónde sale la noticia. El Cristo estaba recogido ya en parte en el plan vigente que decía que cuando acabara la actividad, se desarrollarían mediante plan especial para usos sanitarios. Ahí es donde se topan con que no se necesitan usos sanitarios y, de una modificación puntual, se va a la revisión parcial en ese ámbito. Evidentemente no es un problema del plan especial, se discute si esa modificación, al ser tan sustantiva no pasaría nada que se incluyera en la revisión del plan general.
-¿Y el Bulevar?
-El bulevar no es un plan, es un proyecto. Hubo un concurso, se falló, los autores consideraron hacer lo que hicieron y ahora hay una nueva Corporación que igual lo quiere cambiar. Para mí, como ciudadano, sin haber visto nunca el expediente, me parece que lo más difícil, que es la conexión entre Santullano y la fábrica de armas, sigue sin estar resuelta. Hay quien dice que la cota da para soterrar y otros no. Pero lo digo como ciudadano, hasta que a nosotros no nos pidan que opinemos, no procede que lo hagamos.
-¿Qué quieren hacer con el Naranco?
-Es la montaña mítica. No solo de Oviedo, sino de Asturias por los monumentos Prerrománicos. Precisamente Rañada en los 90, propone una actuación muy liviana, alejar la carretera y un microhotel en la cima. Es el eterno debate de petrificarlo todo y no tocar nada o llenarlo y en ello ayudar a protegerlo. Qué pasa aquí, que los patrimonialistas lo tienen como una especie de religión. Si aparecieran los clavos de Cristo, que no existen, los querrían proteger.

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