sábado, 28 de abril de 2018

El Calatrava pierde otro emblema....

El Corte Inglés también abandona el Calatrava

La tienda de complementos en la planta 2 del centro comercial Modoo, y la de moda de caballero en el piso de debajo. / FOTOS: MARIO ROJAS
La tienda de complementos en la planta 2 del centro comercial Modoo, y la de moda de caballero en el piso de debajo. / FOTOS: MARIO ROJAS

Los 100 trabajadores actuales de la cadena, que cerrará el 15 de julio, serán reubicados en tiendas de Oviedo, Gijón y Avilés

DANIEL LUMBRERAS OVIEDO.
11
El Corte Inglés también dice adiós al centro comercial del Calatrava. Abandona. Lo hace tras una fuga continua de tiendas sufrida en los últimos años en el que estaba llamado a ser el motor económico de la zona alta de la ciudad. El Corte Inglés, que ocupa 10.000 de los 40.000 metros cuadrados de superficie útil (el 40%) del centro, anunció ayer que cerrará sus puertas el próximo 15 de julio.
La medida afecta a unos cien trabajadores de las tiendas que tiene abiertas la cadena en el espacio de Buenavista: supermercado, moda hombre y mujer, complementos, Sephora y viajes. Informó de que serán reubicados en centros comerciales de OviedoGijón y Avilés. «Esta plantilla reforzará el equipo comercial de los centros asturianos, que se encuentran en reestructuración y refuerzo con el objetivo de mejorar la oferta comercial», abundó El Corte Inglés en un comunicado.Sus posesiones, que ocupan las plantas 1 y 2 del centro comercial Modoo, se encuentran ya a la venta. Para hacerse una idea, en septiembre de 2017 cuando El Corte Inglés comenzó a deshacerse de locales por toda España, el de Uría, 20 (los viejos cines Aramo), de 3.114 metros cuadrados, se valoró en 28 millones de euros. Aún sigue esperando comprador.
Una vez que abandone Buenavista, el Modoo tendrá 3.000 metros cuadrados con tiendas abiertas. Es decir, solamente un 7,5% de la capacidad total del Calatrava seguiría ofreciendo productos a los clientes, con pasillos enteros vacías.
Desde la compañía rehusaron ayer valorar los motivos del cierre. Tampoco lo hizo la actual gerencia del Modoo, en manos de la empresa JLL Management. Sin embargo, fuentes cercanas a la operación apuntaron lo obvio, que «no va bien» a nivel de ventas. «Ahí ha cerrado todo el mundo», sentenciaron otras fuentes próximas.
La mayor parte del Modoo (el 80%; el 20% restante lo posee El Corte Inglés) pertenece a Benson Elliot. El fondo de inversión británico lo compró el pasado diciembre, en medio de un gran hermetismo, a la firma del mismo país Alpha Real Capital. Benson Elliot es un fondo que apuesta fuerte con España; ha comprado el pasado mayo el hotel Silken de Barcelona. La intención del grupo es transferir la gerencia del Modoo a Estabona Management, que ya se hizo cargo del centro comercial Imaginalia en Albacete en 2014 y lo relanzó con una zona de juegos infantiles.
Poco ha trascendido de los planes de la nueva propiedad. A priori, el objetivo es «hacer una adaptación a un centro de ocio», incluyendo unos cines, vieja aspiración del centro muy demandada por la clientela.
Por su parte, El Corte Inglés está presente en Oviedo con su propio centro comercial en Uría, donde tiene también la tienda de Sephora, y Sfera, en los antiguos cines Aramo; tres plantas en Salesas, dos supermercados, dos corredurías de seguros y seis tiendas de viajes. Según explicó en una ocasión su presidente, Dimas Gimeno, llevan «cuatro ejercicios seguidos de incremento», pero libran una dura batalla contra los gigantes logísticos Amazon (EE UU) y Alibaba (China).
La historia del Modoo es la de una decadencia. Tiene capacidad para 146 tiendas, arrancó con 126 hace una década y ya no llega a treinta en la actualidad, tras las deserciones el pasado febrero de Zara Home y, por sorpresa, la tienda de golosinas Belros. En línea con la crisis de otros centros comerciales como Los Prados, fueron cerrando Pull and Bear, Massimo Dutti o Zara.
La marcha de El Corte Inglés sentó no gusta a los vecinos de Buenavista. Para Ramón del Fresno, presidente de la Asociación Vecinal y Comercial de El Cristo-Buenavista, «el futuro cada día es más incierto y las soluciones, poco ilusionantes. No hay duda de que las pocas tiendas que quedan pasarán por el mismo camino. No nos coge de sorpresa pero es bastante desalentador», lamentó.
A su juicio, este es un capítulo más de la «agonía» que vive El Cristo desde que se trasladase de allí el viejo HUCA en mayo de 2014. La asociación tiene censados en el barrio, desde entonces, 155 locales cerrados. Y a pocos metros está el Centro Cívico, que «es la sombra de lo que fue». «Este problema nadie lo resuelve y cada día avanza más. Se está dejando la solución no para mañana, sino para pasado mañana», apostilla. Pero con este incierto hoy, no sabe si habrá porvenir.

No hay comentarios: