«Los núcleos rurales están abandonados, si llueve no puedes salir de casa»
Eva Sánchez | Presidenta de la FAVO: «El estado del Paseo de los Álamos no puede ser el que es y necesitamos un Plan de Ordenación Urbana lo antes posible»
La corredora de seguros Eva Sánchez (Oviedo, 1954) es desde marzo la nueva presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos Oviedo (FAVO), en sustitución de Emilio Peña. Desde hace ocho años dirige la entidad de residentes de Limanes y también es secretaria de la Asociación de Amigos de Faro. Por tanto, lleva una vida «dedicada por completo» a los movimientos vecinales y a «tratar de resolver los verdaderos problemas» de la ciudadanía ovetense.
-¿Cómo han sido estos meses en el cargo?
-Intensos, con mucha responsabilidad. Ahora está en mis manos un grupo con más de veinticinco años de andadura. Estoy contenta, porque tengo unos compañeros en la junta ejecutiva y la directiva (del resto de asociaciones) con los que la comunicación es excelente. Aun así, tengo constantemente la presión que da el querer hacerlo bien y dar lo mejor de uno mismo. Si sale mal, dolerá, pero lo intentaré por todos los medios.
-¿En qué han estado trabajando desde la FAVO?
-Desde que se constituyó la nueva junta ejecutiva, de seis personas, hemos estado organizando mesas de reuniones con todos los grupos políticos para tratar todos esos problemas de los barrios que llevamos años queriendo solucionar. El único que no nos ha respondido hasta la fecha es el Partido Popular. Nos hemos reunido con la Policía Nacional y con la Guardia Civil; es decir, con los se encargan de velar por la seguridad de los vecinos en la ciudad y en el pueblo. Nuestro objetivo es tener un contacto más directo con las fuerzas de seguridad.
-¿Qué les han pedido que no se haya demandado ya?
-Las peticiones siempre son las mismas, ese es el problema. Sobre todo, en la zona rural del municipio.
-Estos últimos meses ha llovido mucho, ¿en qué condiciones están los núcleos rurales?
-Las cosas están bastante mal. Este año ha llovido mucho y la zona de Limanes, por ejemplo, se queda intransitable cuando caen cuatro gotas, no se puede salir de casa. No se están asfaltando las carreteras, hay carencia de alumbrado, de desbroces y limpieza de las cunetas. La zona rural está muy abandonada. Hay carreteras en las que los coches se quedan encajados en los socavones.
-Pero ustedes también representan a colectivos urbanos.
-El núcleo duro de Oviedo también tiene sus cosas. En nuestras reuniones con las autoridades municipales hemos dejado muy claro que el estado del mosaico del Paseo de los Álamos no puede ser el que es, y que necesitamos, entre otras muchísimas actuaciones, un plan de ordenación urbana lo antes posible.
-¿Usted ha introducido cambios en la organización de la FAVO?
-El anterior presidente hizo su labor y la hizo muy bien. Antes, yo estaba más centrada en Limanes, por eso no conozco de manera pormenorizada cómo funcionaba entonces; sin embargo, sé como funciona ahora, y se basa en la complicidad entre los colectivos.
-¿Se les ha unido alguien más en estos meses?
-Se nos han federado dos asociaciones recientemente: la Asociación de Vecinos de Cuyences (de nueva creación) y la asociación de vecinos San Andrés de Trubia.
-Ya son más de veinte...
-Sí, la FAVO engloba treinta y un asociaciones federadas que trabajan en conjunto.
-¿Cuál es el siguiente paso?
-Visitar a los no federados, porque estamos con los brazos abiertos a recibirlos a todos. Cuantos más seamos, mejores cosas conseguiremos.
-Es usted una de las pocas lideresas vecinales, ¿cómo sienta eso?
-Realmente bien. Es algo que llevo con mucho orgullo. Soy la primera presidenta, en casi treinta años, de la federación, y eso es todo un logro. Además, en la nueva junta ejecutiva prima la paridad. Somos tres hombres y tres mujeres. La FAVO tiene ahora presidenta, vicepresidenta y vicesecretaria. Esto no es solo cosa de hombres.
-¿Metas para 2019?
-De todos los planes que tenemos, casi el más importante es que se haga de una vez por todas un reglamento de distritos como es debido, para que los distritos puedan empezar a funcionar.
-¿Esa organización no es demasiado ambiciosa para una ciudad de 220.705 habitantes?
-La ciudad de Oviedo está dividida en siete partes: cinco urbanas y dos rurales. La división en distritos ya está hecha, solo falta darle el último empujón entre el Ayuntamiento y las agrupaciones vecinales. Algo así terminaría uniendo aún más a las asociaciones, a los empresarios y a los colectivos culturales de cada zona a través de sus representantes elegidos. Es una forma de democratización.
-Aunque no haya un régimen regulador común, algunos distritos sí funcionan como tal. ¿Cómo se organiza el suyo, el rural dos?
-A través del diálogo. Los presupuestos dirigidos a las asociaciones de vecinos se ponen en común entre todos y lo destinamos para las actuaciones que sean más urgentes. No obstante, desde febrero no se han celebrado más reuniones sobre el tema, y el plan global está sin ejecutar.
-¿Cómo compagina su compromiso con Limanes con la FAVO? ¿Y con el secretariado de la asociación de amigos de Faro?
-Viviendo para ello. Aun así, lo compagino bien, porque los canales de comunicación están siempre abiertos.
-¿Cuáles han sido sus principales logros desde que ocupa el cargo?
-El tener un contacto directo con los grupos políticos, con la Policía y con distintas autoridades del gobierno autonómico. Esa comunicación puede agilizar los procesos en los que están envueltas las asociaciones de vecinos, como la problemática de los permisos que no llegan cuando se organizan las fiestas, por ejemplo. Nosotros logramos que el alcalde nos escuchara. Aun con todo, nuestra voluntad y compromiso son los principales logros.
-¿Se mueve la FAVO con una ideología concreta?
-En absoluto. La política queda fuera de la federación. Lo importante es moverse en colectivo.
-¿Y qué le falta al museo de alfarería de Faro?
-Llevamos ocho años en la misma tesitura, pero hay buenas noticias: ahora ya tenemos parcela, un solar ubicado en el centro social de Faro al que le faltan cien metros cuadrados para ser edificable. Ahora está en manos del Ayuntamiento.
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