jueves, 14 de junio de 2018

Hay que cerrar el protocolo este año!

El alcalde de Oviedo espera que el protocolo para la reversión de La Vega esté listo en julio

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Rivas, López y Piñuela en el salón del Casino de Trubia ante militantes y simpatizantes del partido socialista. /MARIO ROJAS

Admite que ya ha habido contactos con el nuevo gabinete ministerial de Margarita Robles

JUAN CARLOS ABAD OVIEDO.

Wenceslao López no quiso ayer poner fecha a cuándo tomará la decisión de si optará a la reelección como alcalde en las próximas elecciones pero, por el contrario, sí que esbozó un calendario acerca de cuando va a retomar la negociación con el Ministerio de Defensa para la reversión a la ciudad de los terrenos de la antigua fábrica de armas de La Vega. «El protocolo está conformado en un 90%. Estamos esperando que el nuevo gobierno se asiente y podamos retomar el proyecto», explicó López, que deseó que, con un gobierno socialista en Madrid, «podamos avanzar más rápido y con más seguridad» para asegurar la titularidad de los terrenos y el patrimonio de la fábrica con «un protocolo, que me ha llevado mucho tiempo elaborar y negociar tanto dentro del equipo de gobierno como con Defensa. Espero que antes de que comience agosto, a finales de julio, podamos tenerlo». Asimismo, reconoció que el Ayuntamiento ya está en contacto con el nuevo gabinete de Margarita Robles, pero que tras el impasse de la moción de censura, que obligó a cancelar una reunión programada con el anterior gabinete, lo preceptivo es «dejar que el nuevo gobierno se asiente» antes de fijar un nuevo encuentro.
El alcalde empleó, para referirse a La Vega, un paralelismo con lo logrado hasta ahora con la reordenación de El Cristo-Buenavista y un símil ferroviario al que acostumbra: si el proyecto para el antiguo Hospital está «con la locomotora en marcha» tras años «paralizado», pretende con el recinto fabril «colocar el tren sobre la vía» en lo que queda de mandato. Una actuación que ligó al proyecto del bulevar de Santullano del que destacó su «complejidad», avisando además de que «estamos obligados a ejecutarlo, a riesgo de perder» los diez millones de fondos europeos.
Esa previsión para el año que resta de mandato, la hizo López ante los medios antes de un acto con militantes y simpatizantes que se celebró en el Casino de Trubia y con el que el Grupo Municipal Socialista al completo celebró los tres años de mandato.
También hizo balance de la experiencia tripartita en la ciudad: «Estábamos acostumbrados a un abuso de poder y, en estos tres años, hemos puesto de manifiesto que nuestra identidad es el diálogo», afirmó el alcalde, que centró su alocución a los medios en «los grandes avances para la ciudad» y en el «vuelco de la política del 'tira para adelante que libras'» del 'gabinismo'. Destacó, asimismo, los esfuerzos del Consistorio para mitigar los efectos de la crisis y en las actuaciones del día a día que «pasan desapercibidas pero que para el ciudadano son grandes cosas». Cosas tales como el reasfaltado de calles, la limpieza, mejoras en el saneamiento o el transporte público, dijo.
Dentro del auditorio, acompañado por la portavoz del grupo, Ana Rivas, y por el secretario general de la AMSO, Iván Piñuela, López tuvo tiempo de desgranar las virtudes del equipo de gobierno que preside. Piñuela, por su parte, se centró en las dificultades que afrontó el gobierno municipal al entrar en un Consistorio con «menos plantilla que en 1991» y cargó contra «el campo minado» de «la herencia recibida».
«El balance», afirmó Piñuela, «es un cambio de políticas absoluto en la que se ha puesto al ciudadano en el centro. Se ha reducido la deuda en 20 millones y se han aumentado las partidas sociales en 6», explicó el número uno del partido socialista en Oviedo que enumeró desde El Asturcón a la SOF, pasando por el Tartiere y Villa Magdalena, entre las dificultades del equipo de gobierno a la hora de poner en marcha políticas propias.
Preguntado acerca de la relación con los socios de gobierno, Piñuela destacó que lo que el alcalde transmite a la AMSO es «tranquilidad. Somos tres partidos diferentes y cada uno quiere tener su parcela, pero la dirección la hemos tomado todos juntos y estamos en el camino correcto», valoró.
Ana Rivas, por su parte, quiso, antes de repasar las virtudes de las áreas que controlan los socialistas en el gobierno, Atención a las Personas, Seguridad Ciudadana e Infraestructuras, contar un chascarrillo acerca de cómo ven el resto de sus concejales a López. «Como se decía en un anuncio de una compañía de seguros, el alcalde lo arregla todo. Todo, todo, todo», afirmó Rivas antes de reconocer que «la mitad del tiempo nos la pasamos arreglando marrones» y que ha habido «proyectos con retraso» por «las trabas administrativas y legales que nos imponen».
Tiempo. Será el año que viene cuando, según el propio López y Piñuela, el hoy alcalde tome la decisión de volver a presentarse o no como cabeza de lista. «Su trabajo le avala», afirmó este último, que añadió que «es una opinión personal que la militancia tendrá que ratificar». Eso será año que viene; este verano, antes, toca La Vega.

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