«Hay que reajustar el presupuesto, no vamos a dejar a ningún ovetense tirado»
«Sánchez debería haber puesto a España a fabricar mascarillas desde el minuto cero», critica el regidor; «el 7 y el 8 de marzo fueron nefastos»
Lleva quince días en casa, como el resto de ovetenses. El alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli (Teverga, 1946), atiende a EL COMERCIO por teléfono para explicar la táctica esencial del Ayuntamiento en la lucha contra el COVID-19. La agenda clara, dirigir los esfuerzos municipales a tratar de encauzar la grave situación en términos económicos y sociales en la que quedará Oviedo tras el fin –todavía incierto– de la crisis del coronavirus. Un reajuste del presupuesto municipal que favorecerá la implementación de paquetes de ayudas a autónomos y familias, los más castigados. Todo ello, sumado a un «entendimiento pleno» con el Principado para las cuestiones que incluyen al resto de administraciones. Eso sí, critica el regidor, el escenario podría ser muy distinto si el Gobierno de Pedro Sánchez «hubiese comenzado a tomar medidas mucho antes, y puesto a España a fabricar mascarillas desde el minuto cero».
–¿Cómo está pasando estos días de confinamiento?
–En casa, como todo el mundo, y muy preocupado. Un día me acerqué al Ayuntamiento y me mandaron dar la vuelta. Es muy serio, pero estamos todos trabajando a al cien por cien, tomando decisiones permanentemente.
–Sus hijos viven fuera y también son días para preocuparse por la familia, ¿cómo están viviendo esta situación?
–Ellos están bien, trabajando desde casa, como casi todos. Con sus familias. La familia es lo primero y claro que estoy preocupado por ellos. Pero también lo estoy por los ovetenses, que están sufriendo mucho, aunque en Oviedo están yendo las cosas medianamente bien.
–¿La crisis del coronavirus les ha cogido por sorpresa?
–Sí, pero una cosa es que nos coja a nosotros y otra que coja al Gobierno de la nación. Nosotros somos nosotros, sin capacidad de prever lo que se venía encima. El Gobierno falló claramente. Lo que pasó los días 7 y 8 de marzo en España, con conciertos, partidos y la manifestación, fue una monstruosidad que había que haber evitado, pero tiraron para adelante.
–¿Cómo se organiza desde casa?
–Me levanto temprano, como todos los días, y estoy permanentemente colgado al teléfono. Recibo mensajes de apoyo cada día y tengo que contestar a todo el mundo. Estoy permanentemente en tensión, y muy preocupado: por el futuro de esas familias que se quedan sin sus seres queridos y no pueden ni despedirlos, y pensando en el futuro de Oviedo, Asturias y España.
–¿Los ovetenses están respondiendo al confinamiento como deberían?
–Estoy muy orgulloso de los ovetenses. Es complicado quedarse en casa cuando no quieres hacerlo, el día es muy largo. Se están comportando extraordinariamente bien y están demostrando que quieren ayudar y que están orgullosos de su Oviedo. Apenas se proponen multas.
–¿Barajan que la Policía sea menos permisiva y endurezca los controles?
–Ellos tienen instrucciones de ser rígidos, el mensaje está muy claro y lo están cumpliendo a la perfección. Todas las fuerzas implicadas están colaborando y cooperando como una sola.
–¿Usted se suma al aplauso desde su balcón?
–Lo hago desde un chalet y se me escucha poco, pero aplaudo todos los días a los trabajadores que están en primera línea luchando contra el virus, es de ley. También salgo a cantar el himno del Real Oviedo y a una cacerolada si hace falta. También aplaudo por los trabajadores de la limpieza, los nuestros fueron pioneros en salir a desinfectar las calles. A esa gente hay que lanzarles un abrazo y decirles gracias. Me siento muy orgulloso como ovetense y como español, consiguen que Oviedo siga funcionando.
–¿Cree que la gestión del Principado de la crisis está siendo acertada?
–Va un poco a remolque de lo que pasa en Madrid, y eso no es del todo positivo. Deberían tomar más la iniciativa. Más importancia y protagonismo. Asturias puede ir a un ritmo superior que Madrid. Madrid se retrasó mucho. Tenemos que tener más iniciativa. Lo hecho en falta.
–¿Y la del Gobierno central?
–Esperaron demasiado para tomar decisiones. Italia debería haber sido una escuela para nosotros, pero optaron por decir que esto no era nada en vez de abrir el paraguas cuando vieron que al vecino le estaba cayendo el chaparrón. Las aglomeraciones del 8 de marzo deberían haberse suspendido una semana antes como mínimo.
–Sigue faltando material sanitario.
–El Gobierno de Sánchez debería haber puesto a España a fabricar mascarillas desde el minuto cero. Pero no podemos lamentarnos. Si nosotros hemos podido habilitar un centro en La Corredoria, el resto también puede hacerlo. Nuestras primeras mascarillas saldrán el lunes.
–¿La Administración local es lo suficiente ágil para responder al tiempo que evoluciona la crisis?
–Son muchas las cosas que están surgiendo y el Ayuntamiento no se está parando en ningún caso. Todos los concejales están volcados al máximo. Fuimos pioneros en el cierre de instalaciones deportivas y culturales de gran afluencia, en cerrar las zonas de juegos infantiles y parques, y yo fui el primero en pedir el cierre de los colegios.
–¿El Consistorio estaba preparado para el teletrabajo?
–Todos estamos trabajando así desde el primer día. Los funcionarios se han adaptado muy bien.
–¿En qué situación puede quedar Oviedo después del COVID-19?
–Me preocupa mucho cómo va a quedar. Hay negocios que ya iban forzados y esta situación les complica mucho la vida. Nosotros estamos esperando por las decisiones de los gobiernos, pero estaremos ahí al lado de autónomos y familias. Tenemos que ser cautos con lo que no es directamente de competencia municipal, pero hay que pedir.
–La industria ovetense también está siendo castigada, ¿cómo ha recibido el ERTE de la fábrica de armas?
–Tengo un correo del director donde me asegura que es un tema temporal. Esperemos que no retrase ese 8x8 tan necesario. Empresarialmente no pueden tener a la gente de baja. Pero tienen carga de trabajo todavía y más que pueden tener. El contrato del blindado es muy importante, casi mil empleos. Oviedo apenas tiene grandes empresas, Trubia es el polo industrial.
–¿Cuánto tiempo tardaremos en recuperarnos?
–No lo sé, pero Oviedo es muy creativo. Espero que todos unidos lo consigamos. El Ayuntamiento no va a fallar, porque depende de nosotros. Sufriendo un poco, saldremos adelante. Oviedo renacerá en ese Oviedo alegre que yo quiero, y lleno de gente como el que se estaba viendo hasta ahora. Lo vamos a sacar, y sin tardar mucho.
–El Principado explica que hemos frenado la curva.
–Tiene mejor pinta ahora. Y esa es una ilusión que espero que se convierta en realidad. Fuimos más despacio que otras comunidades, pero estamos por encima de la media.
–¿Cuántos recursos destinará el Ayuntamiento a reactivar la ciudad ante la crisis económica que se avecina?
–Todo aquello que nosotros podamos, todos los recursos que sean posibles, pero es aventurado hablar de cifras. Ya le dije al concejal de Economía que rehaga el presupuesto para que reabsorba las necesidades actuales de la ciudad. Estamos en ello y hay que hacerlo, no vamos a dejar a nadie tirado.
–¿Un nuevo presupuesto?
–Uno nuevo no, hay el dinero que hay. Habrá que dejar de hacer algunas cosas como conciertos o competiciones, y el gasto que se ahorre será integro para la recuperación de Oviedo. Hay que reajustarlo de inmediato.
–¿Ya han suprimido servicios con algunas contratas?
–Agua, limpieza y electricidad está funcionando al cien por cien. Es lo importante. Las cosas pequeñas se pueden suspender momentaneamente. Hay que improvisar, porque está viniendo todo muy rápido.
–El concejal de Economía ya anticipó que habrá ayudas para empresarios, modificación de ordenanzas y ventajas fiscales para autónomos...
–Van a ir por ahí los tiros, hasta donde llegue la manta. Haremos todo lo que podamos dentro de nuestras posibilidades, pero quiero dejar muy claro que no vamos a dejar a nadie en la estacada.
–Servicios Sociales destinará medio millón de euros a ayudas de emergencia, ¿es suficiente?
–El cálculo lo hicieron ellos y seguro que están acertados. Si tuviéramos más, más destinaríamos.
–¿Las personas sin techo volverán a la calle cuando todo vuelva a la normalidad?
–Me preocupaba mucho. Esa gente está recolocada contando con la colaboración del Principado, y fue un trabajo muy importante. Aun así, los hay que no quieren estar en una residencia y que nacen para estar en la calle. Pero vamos a intentar que estos lugares que hemos habilitado permanezcan para ellos. Lo hablaremos con el Principado para que estas personas tengan la posibilidad de no dormir en la calle.
–¿Barajan habilitar más espacios para alojamiento? Usted apoyó la propuesta del viejo HUCA.
–Le ofrecí al consejero el mercado de La Corredoria, y ahí están. Es mejor eso que otras naves, pero en cualquier caso, eso no depende de nosotros. En cuanto al viejo HUCA, di la idea, pero no fue escuchada. Ellos sabrán mejor que nadie si se puede o no se puede. Si no fraguo, será porque no es posible.
–Las AMPAS han solicitado una tarjeta de alimentos para los beneficiarios de becas de comedor.
–Las entregaremos esta misma semana, el martes o el miércoles. Son tarjetas monedero que llevan un importe para gastar, el de las becas de este periodo. No era fácil armarlo, pero eso es preocuparse por la economía de las familias menos favorecidas para compensar esa falta de dinero por la crisis.
–¿Los mayores están atendidos?
–Todo lo necesario está cubierto. Las necesidades reales se están cubriendo de una forma aceptable. Faltan equipos y llegan las cosas con cuentagotas, pero aportamos todos.
–¿En qué punto quedan ahora los grandes proyectos de ciudad?
–No debería afectar negativamente. La Vega, la plaza de toros, el traslado de las pistas de atletismo o las obras del Palacio de los Deportes están ahí, solo se aplazan dos meses. Lo que pedimos es que la regla de gasto se libere y permita al Ayuntamiento gastar el dinero que tiene, con los controles que quieran, pero que nos dejen gastar el dinero. La idea es hacerlo, un año más o un año menos.
–¿Qué será lo primero en lo que se pondrán a trabajar?
–En adjudicarlos rápidamente y cumplir el presupuesto que teníamos. Va a ser algo muy importante, cientos de puestos de trabajo, que es lo que necesita Oviedo.
–¿Hablar de La Vega ahora es algo secundario?
–Lleva ahí muchos años parada, puede esperar dos meses. Es lo más acertado ahora.
–¿Tiene algún mensaje para la ciudad?
–Unidad. Les pido unidad, porque podemos con esto.
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