Tenis - Albert Ramos: "No sé muy bien por qué aquí se han dado estos resultados"
Albert Ramos hace todo lo posible para ser "un tipo normal", como le definió Garbiñe Muguruza, pero no puede evitar que los focos de Roland Garros se fijen en el tenista número 55 del ránking y, contra todo pronóstico, cuarto finalista del Grand Slam de tierra batida.
En su rostro afilado y su nariz aguileña, sus ojos como platos escrutan cada detalle del torneo que vista por sexta vez, pero del que descubre rincones desconocidos: las pistas más nobles y las salas de prensa más grandes. Es el trato que el torneo reserva a los mejores, a la aristocracia en la queRamos ha hecho, a sus 28 años una incursión como un intruso.
Tras cuatro fracasos en primera ronda en las anteriores cuatro tentativas, el tenista de Mataró ha dado la campanada y ya está entre los ocho mejores del torneo. Para ello, ha tenido que derrotar a dos argentinos y a dos cabezas de serie, el estadounidense Jack Sock y, sobre todo, al canadiense Milos Raonic, al que derrotó este domingo con una facilidad inesperada por 6-2, 6-4, 6-2.
"No sé muy bien por qué aquí se han dado estos resultados, llevo muchos años trabajando duro, no he hecho nada diferente (...) siempre trato de mejorar cosas de mi juego", aseguró el tenista en la principal sala de prensa de Roland Garros. Unos minutos antes, Muguruza, que a sus 22 años jugará por tercera vez los cuartos de París, había ocupado su mismo puesto y había asegurado que Ramos, junto a quien entrenó muchas veces en Barcelona, era "un tipo normal".
Una definición que el catalán se apropió cuando le invitaron a describirse: "Me gusta estar en Mataró, estar tranquilo, con mi novia, mis amigos, ver fútbol. No me gustan cosas raras, la verdad, soy una persona normal". A partir de ahora, a esa normalidad tendrá que añadir una línea en la que precise que ganó a un "top 10" en un Grand Slam y que jugó unos cuartos de final de Roland Garros.
Pero nada más cambiará: "Voy a seguir entrenándome, cuidándome como hasta ahora. Si me va bien, sabré que tengo que seguir trabajando, las expectativas ahora mismo las mismas que tenía antes de venir aquí. Esto es un resultado excepcional y no siempre va a salir así. Voy a seguir trabajando igual".
Ramos evita todo superlativo. Cuando ganó a Sock y se clasificó para octavos por vez primera en su carrera en un grande dejó escapar una lágrima. Frente a Raonic, la segunda vez en su vida que vencía a un "top 10", tras haber ganado el año pasado en Shangai al suizo Roger Federer, ni siquiera se permitió esa licencia.
"Estaba tan concentrado en el 'smach' del punto de partido que no podía pensar en otra cosa. Pero sí, estoy muy contento de ganar a un jugador como Raonic en un Grand Slam, aunque no sea en su superficie preferida", afirmó. Convertido ya en la sorpresa de un Roland Garros que está perdiendo más estrellas por las lesiones que en la pista, Ramos sabe que seguir adelante no será una tarea sencilla. Su rival será el suizo Stan Wawrinka, defensor del título y número 4 del mundo.
"Es un tenista muy potente, cuando juega bien es muy difícil pararle", asegura el español, que la semana pasada probó la pólvora del helvético en el torneo de Ginebra, donde acabó derrotado en un doble 6-1. El la cicatriz más reciente que guarda de sus escaramuzas con Wawrinka, a quien solo ha arrancado dos sets en seis confrontaciones. "En Ginebra me ganó muy fácil, desde el principio no me dejó ni jugar. Pero este es otro torneo, es una nueva oportunidad para luchar. Él es el favorito, pero voy a intentar dar el máximo", afirmó.
La derrota en Ginebra tuvo un efecto devastador en la moral de Ramos. "Pensaba que podía hacerlo mejor y por eso estaba triste. Pero hice lo que hago siempre, trabajar para mejorar, buscar en qué podía mejorar. A veces lo intentas y no te sale, pero esta semana está saliendo muy bien", dijo. La guinda en el pastel es que Ramos puede acabar por subir tanto en el ránking que se gane el derecho a disputar los Juegos de Río. "Veremos cuando acabe el torneo. Me haría mucha ilusión ir, pero por ahora prefiero disfrutar este momento", aseguró.
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