Un año más, El Confidencial presenta su particular clasificación de los mejores pilotos en la temporada 2013. Discutible y subjetiva como todas, intenta reconocer el mérito relativo del piloto que nunca puede desvincularse, desgraciadamente, del material a su disposición. Pero también sirve como propuesta para que los lectores y aficionados aporten sus propias opiniones.
1. Sebastian Vettel
Sí, el piloto alemán contaba con el mejor monoplaza de la parrilla, pero su compañero no podía exprimirlo al mismo nivel. Cierto que sus victorias consecutivas se dispararon a partir del cambio de gomas de Pirelli, pero en Canadá era líder del campeonato con 36 puntos de ventaja sobre Alonso.
La simbiosis entre las características del RB9 y el estilo de pilotaje de Vettel ha sido extraordinaria. Sólo cuando se produce semejante matrimonio se pueden lograr los números de Sebastian Vettel en 2013. Pero también cabe que se deba a un singular talento capaz exprimir cualquier material –chasis, escapes de soplado y neumáticos- . No olvidemos que ha ganado ya con dos marcas de neumáticos diferentes.
Sin embargo, por encima de cualquier otra consideración atribuible al RB), el nivel de excelencia en 2013 como piloto ha sido sublime. Comparando con años anteriores, ¿cuántos errores de pilotaje ha cometido el piloto alemán esta temporada, tanto en entrenamientos como en carrera? Con la respuesta a esta cuestión se justifica por sí misma la posición que ha ocupado en la clasificación general.
2. Fernando Alonso
“Lo que siempre buscas es ese coche que está cosechando puntos, que no debería estar ahí, y buscas quién es el que lo pilota... Y, de forma abrumadora, es Alonso”. La frase de Martin Whitmarsh certifica la posición de Fernando Alonso en el campeonato 2013. Un año más, el piloto estuvo muy por encima del F138. Mercedes y Lotus contaban con mejor monoplaza desde mitad de campeonato. Sus pilotos terminaron por detrás.
El error de Malasia al tocar a Vettel, su actuación en Mónaco y alguna sesión de entrenamientos no del todo exprimida se apuntarían en el debe en 2013. Pero sigue destacando la intensidad competitiva que Alonso mantiene, año sí, año también, y que le llevó a enfrentarse a su propio equipo, a revolverse ante sus limitaciones técnicas. Ahora, el equipo italiano ya sabe que puede perder a su piloto al final del próximo año.
3. Kimi Raikkonen
Con una victoria este año, el finlandés también batía también a su compañero en el cómputo total en entrenamientos (10-7), considerando la endiablada velocidad de Grosjean a una vuelta. Como el propio Raikkonen reconoció, perdió el pulso con unos nuevos neumáticos que no favorecían su estilo de pilotaje, así como con las normas más estrictas de uso establecidas por Pirelli tras la debacle de Silverstone
Sin la misma intensidad en la dedicación a la Fórmula 1 de un Alonso o un Vettel en la labor cotidiana con el equipo –Bouiller ha reconocido que ni pisa el simulador- , el talento natural de Raikkonen sigue sorprendiendo incluso a estas alturas de su carrera. Todo parece hacerlo fácil. Fue una lástima que su magnífica aventura con Lotus terminara de la manera ya conocida y con la firma inconfundible del personaje.
4. Romain Grosjean
Su evolución durante la temporada ha sido extraordinaria, superando a Raikkonen y asumiendo el liderazgo en Lotus en la recta final de la temporada. Ni rastro de sus “fundidas de cable” del pasado año. En las últimas pruebas no cometió prácticamente ningún error y optimizó al máximo sus opciones, convirtiéndose en una alternativa a Red Bull como fue el caso, por ejemplo, en Japón.
5. Nico Hulkenberg
Hace tan solo una década los grandes equipos se hubieran pegado por firmar opciones para hacerse con el piloto alemán, un talento extraordinario que pide a gritos un monoplaza puntero. Algo pasa en la Fórmula 1 cuando no ha sido así. El cambio de Pirelli favoreció a Sauber, y fue entonces cuando el piloto alemán tuvo material a mano para confirmar ese talento que, cualquiera que entienda de este deporte, sabe que le rebosa. Ya lo dijo también Alonso la pasada semana en Brasil El cuarto puesto de Corea, con el español pegado en su nuca, fue una buena muestra de ello. Que siga en 2014 en la clase media de la parrilla es un desperdicio para los aficionados.
6. Lewis Hamilton
Con cinco poles –alguna de ellas extraordinaria- y una victoria, sin embargo no hemos visto al Lewis Hamilton exuberante y con el mordiente de otros años. Su posición en la lista podría intercambiarse perfectamente con la Rosberg, porque ambos se han visto afectados por los altibajos competitivos de Mercedes. Para el británico, esta fue su primera temporada en el equipo, con un monoplaza al que no siempre tenía cogido por la mano (frenos, mapas motor en agua) y con unos neumáticos Pirelli reñidos con su estilo de pilotaje. A su favor, la honestidad con la que ha reconocido sus problemas sin nunca buscar excusas. Volverá.
7. Nico Rosberg
El enfrentamiento directo con Hamilton pudo haber devaluado su posición pero, en el cómputo total, ambos han terminado en tablas en 2013, aunque el alemán lo hiciera por detrás de su compañero en la clasificación final. La fiabilidad mecánica también jugó en su contra en comparación a Hamilton, a quien tuvo que respetar por órdenes de equipo en Malasia. Tras el enfrentamiento con Schumacher y Hamilton, su reputación ha mejorado en la Fórmula 1. Y Ross Brawn la ensalza sin rubor.
8. Daniel Ricciardo
En nueve citas logró entrar en el Q3 en nueve ocasiones, perdiendo solo en cuatro ocasiones frente a Vergne el sábado. Todo ello, con un monoplaza que el mismo Horner ha reconocido como “difícil”. Por algo se convertirá en el segundo piloto del Red Bull Junior Team tras Sebastian Vettel que asciende al primer equipo.
9. Max Chilton
Para contar con un monoplaza de fondo de parrilla, sin ser un piloto espectacular, se merece el reconocimiento que supone terminar en todas las carreras del campeonato.
10. Mark Webber
Tercero en la clasificación final,  su rendimiento queda deslucido en comparación a las cifras de su compañero de equipo. “Perro viejo no aprende trucos nuevos”, declaraba recientemente para reconocer sus problemas con los Pirelli y los escapes de soplado. Sin embargo, parte de su temporada se ha visto mermada por numerosos problemas mecánicos y operativos en boxes. En este sentido, su esquina del cuadrilátero ha sido muy deficiente en comparación con la que ha apoyado a Vettel durante la temporada, hasta el punto de parecer equipos distintos.