El Senado resolverá este martes la gran incógnita que quedaba por despejar de la Ley de Cajas: la simultaneidad de cargos entre la caja (que se convertirá en fundación) y el banco a través del que ejerce su negocio. Tal como adelantó El ConfidencialCiU presentará hoy una enmienda pactada con el PPsegún la cual los actuales presidentes podrán simultanear sus cargos, si bien durante un período más reducido del que pretendían: tres años. Esta limitación pretende superar las reticencias de la troika, que siempre ha mostrado su oposición a esta simultaneidad.
Según fuentes políticas, la enmienda que está prevista introducir no es la anunciada inicialmente por el PNV, que para sortear la oposición de la troika planteaba que los presidentes de las fundaciones en que se convertirán las cajas no podrán tener consideración de ejecutivos ni ocupar ningún cargo directivo en el banco. Dado que la troika (Comisión Europea, BCE y FMI) ya no monitoriza el sector financiero español tras el fin del rescate, se tramitará otra enmienda de CiU en la que no se imponen esas limitaciones. La compatibilidad tan sólo tendrá una limitación temporal, los tres años citados.
Las reservas de la troika provienen de los escándalos por el control político de las cajas que han terminado con la catástrofe que ha hecho necesario el rescate del sistema financiero. Para impedir que se repita en el futuro, el punto 23 del MoU (Memorándum de Entendimiento) con las autoridades comunitarias establece que "las autoridades propondrán medidas para reforzar las normas de idoneidad de los órganos de gobierno de las cajas de ahorros y para adoptar requisitos de incompatibilidad para los órganos de gobierno de las antiguas cajas de ahorros y los bancos comerciales bajo su control".
Esta redacción se plasmaba en el proyecto de ley original cuando prohibía esta compatibilidad de la presidencia de la nueva fundación bancaria con la del banco a través del que ejerce su negocio, aunque concedía a los presidentes actuales un período transitorio de un año. Sin embargo, los patronos de las cajas que no han recibido ayudas -Isidro Fainé (La Caixa), Amado Franco (Ibercaja), Braulio Medel (Unicaja) y Mario Fernández (Kutxa), más Manuel Menéndez (Liberbank)- se rebelaron al entender que ellos no deben pagar por los pecados de las que lo han hecho mal. Su argumento no minó la resistencia de la troika, así que buscaron una fórmula que pudiera ser aceptable: no tener consideración de ejecutivo en el banco, sino de dominical como representante del accionista, es decir, la fundación.
Sánchez Llibre y Duran Lleida en el Congreso. (EFE)Sánchez Llibre y Duran Lleida en el Congreso. (EFE)Sin embargo, este plan recibió un varapalo en el informe de la Comisión Europea y el BCE referido a la visita de los 'hombres de negro' a España en septiembre. En él se decía explícitamente que "es necesario que los esfuerzos para adoptar las medidas acordadas y su implementación continúen como estaba previsto, en particular en el área de la reforma del gobierno corporativo de las cajas de ahorros". El texto completo del informe, conocido la semana pasada, insistía en esta actitud. 
Tres años frente a los seis que pretendía el sector
En este tira y afloja, el Gobierno decidió centrarse en la cuestión del fondo de reserva, más relevante para el sector que los personalismos en la presidencia, y aplazar la cuestión de la compatibilidad para el trámite en el Senado. La estrategia consistía en dilatar este trámite para que se produjera después del día 15 de noviembre, cuando se aprobó el fin del rescate, y de esta forma se suponía que ni siquiera habría que convencer a la troika. Esto no ha sido exactamente así, según las fuentes citadas. Las autoridades comunitarias no se han plegado a estos planes, pero habrían aceptado la simultaneidad de forma transitoria. Eso sí, con un período inferior al que pretendían los 'cajeros españoles', que llegaba a seis años.
Según las fuentes, la enmienda incluirá un período de dos años para esta simultaneidad, que se sumará al año que tienen las cajas para transformarse en fundaciones y adoptar el resto de disposiciones de la norma; en total, tres ejercicios, lo que sitúa el final de la copresidencia a principios de 2017, ya que la ley entrará en vigor el 1 de enero de 2014. Según fuentes del sector, "un período suficiente para que concluya la reforma financiera".
En la Comisión de Economía del Congreso celebrada el 30 de octubre, se aprobó la enmienda del PNV por la que las cajas deberán elegir entre vender el 51% de su banco o dotar el famoso fondo de reserva, que no se incluirá como capital del banco, tal como adelantó El Confidencial el 24 de octubre. De esta forma, se impuso la tesis de la troika, pero a cambio nuestro Gobierno consiguió que tengan un período transitorio de cinco años para proceder a la desinversión y que esta se haga mediante un plan confidencial, con lo que evita que tengan que "malvender", como temían los 'cajeros'. Asimismo, esta venta no tendrá penalización fiscal.