Marc Márquez pulverizó todos los registros y a sus rivales en el circuito de Termas de Río Hondo adjudicándose su tercera mejor clasificación de entrenamientos en lo que va de temporada. El de Honda logró el mejor tiempo de entrenamientos de 1:37.683 y aventajó a Jorge Lorenzo en más de siete décimas de segundo en la única tanda oficial. Las cuatro primeras posiciones fueron para pilotos españoles pues tras Márquez y Lorenzo concluyeron Dani Pedrosa y Aleix Espargaró.
Como un auténtico caníbal a lo largo del fin de semana se podría definir la actuación y el rendimiento de Marc que aprovechó todos los momentos que tuvo para mejorar sus tiempos y avisar a sus rivales de sus intenciones. Tanto que en el cuarto entrenamiento libre, que sólo sirve para preparar la moto para la tanda oficial, el líder rodó más rápido que en todo el fin de semana. En su décimo giro marcó un tiempo de 1:39.103, casi cuatro décimas de segundo más rápido que cualquiera de sus rivales en la pista en ese momento, siendo Dani Pedrosa el que más se acercaba y rebajando unas milésimas más el mejor tiempo de todo el fin de semana. Aquello era sólo una premonición de lo que después iba a acontecer.
En la primera clasificación lograron su pase a la segunda Bradley Smith y Nicky Hayden que, por primera vez en la temporada, consiguió pasar a la misma con la nueva Honda. Para no dejar ningún lugar a la duda en la segunda vuelta de la calificación definitiva, Marc Márquez ya rodó en 1:38.227, el mejor tiempo de todo el fin de semana y con ocho décimas de ventaja sobre Aleix Espargaró y algo más respecto a Dani Pedrosa. El piloto de Repsol Honda puso el listón muy alto para cualquiera de sus rivales que, en apenas diez minutos, debían esforzarse al máximo para intentar enjugar unas diferencias que por entonces se antojaban inalcanzables.
En la misma vuelta rápida de Márquez, Bradl sufrió una espectacular caídaal resultar literalmente catapultado de su moto; pudo continuar en pista con la segunda moto y acabar noveno. Una vez alcanzado su objetivo, Marc regresó a su taller para realizar las últimas modificaciones en su Honda para regresar a la pista con algo menos de cuatro minutos de entrenamiento efectivo, tiempo suficiente para asestar un nuevo y definitivo golpe a todos sus oponentes.
Tras una vuelta de lanzamiento, el de Cervera volvió a rebajar su tiempo,pero como la discreción no parece ser su máxima puso el mejor tiempo de la categoría en un espectacular 1:37.683, el único piloto que rodó en ese segundo. Lorenzo lo hizo en 1:38.425 y Pedrosa en 1:38.651. Al parecer, tanto Lorenzo como Rossi recurrieron en esta carrera al basculante de la moto del pasado año, el que ahora emplean tanto Aleix como Colin Edwards en la escudería Forward Yamaha, mucho menos radical con el consumo del neumático trasero. Ese cambio podría ser la razón fundamental de la mejora en el rendimiento de Lorenzo y Rossi, sexto.