jueves, 29 de octubre de 2009

El AVE se abre paso.

Y derrota claramente el avión.

El AVE acaba con la hegemonía del avión en la ruta Madrid-Barcelona
Publicado el 29-10-09 , por A. Marimón

Un año y medio. Éste es el tiempo que ha tardado el tren de alta velocidad en poner punto y final a la hegemonía del avión entre Madrid y Barcelona, el corredor de transporte más transitado de España.


El AVE dio caza a su rival en el tercer trimestre de este año con 651.498 pasajeros, lo que supone un crecimiento del 21%, frente a los 643.512 viajeros que se subieron a los aviones de Iberia, Spanair, Air Europa y Vueling, las aerolíneas que cubren el trayecto. Las líneas aéreas perdieron un 7,5% de clientes en comparación con el tercer trimestre de 2008.


Desde que inició sus operaciones en febrero de 2008, el ferrocarril ha ido robando cuota a su rival, primero velozmente y, en los últimos meses, décima a décima, ante la resistencia del avión y la ralentización de la demanda por la crisis.

Durante los primeros meses de la llegada del AVE, el número de viajeros totales en la ruta, sumando avión y tren, creció a ritmos superiores al 15%, mientras que ahora lo hace apenas al 5%. «A partir de ahora, los aumentos del AVE serán muy lentos, porque ha alcanzado un gran grado de madurez. Todo dependerá de si introducen más frecuencias directas entre ambas ciudades», señala una fuente del sector aéreo.

Desde Renfe, el operador del servicio, aseguran que no tienen previsto modificar, por ahora, sus 27 frecuencias en cada sentido, de las que diez son trenes directos.

La compañía está concentrando su ofensiva comercial en sellar acuerdos con las principales empresas, los grandes clientes de la ruta, para que bajen del avión y suban a los trenes.

Terreno
El más perjudicado por el asalto del AVE es Iberia, hasta la llegada del tren la dominadora gracias a su servicio de Puente Aéreo, que permite volar sin reserva. La aerolínea no revela las cifras de su destino estrella, pero reconoce que la crisis de esta ruta es la principal responsable de que la demanda en el mercado nacional haya caído un 11% en los nueve primeros meses.

Fuentes de Iberia señalan que esperan recuperar terreno en los próximos meses, ya que, en verano, su servicio de Puente Aéreo entre Madrid y Barcelona se vacía de pasajeros de negocios. La aerolínea española transportó el año pasado a cerca de dos millones de personas entre Madrid y Barcelona.

El problema para la mayor compañía española es que la huelga de sus tripulantes de cabina de pasajeros está provocando una cascada de cancelaciones en la ruta, con la consiguiente fuga de clientes hacia el tren. Los paros continuarán los próximos 10 y 11 de noviembre, tras la huelgas del pasado lunes y martes.

Contraataque
Frente al órdago del AVE, Iberia se ha resistido con todas sus armas. Nada más llegar el tren, aplicó una fuerte reducción de su oferta de asientos, de hasta el 20%, para adaptarse la demanda. Antes de verano, la aerolínea española contraatacó aplicando una reducción de la tarifa general del Puente Aéreo del 14%, hasta 353 euros, la primera en la historia del servicio. Además, decidió unificar la operativa del Puente Aéreo y la de vuelos regulares entre Madrid y Barcelona con el objetivo de ser más flexible.

De las cuatro aerolíneas que operan en la ruta, la única que crece es Vueling que en los nueve primeros meses del año transportó a 490.000 pasajeros, un 20% más que en 2008. La compañía, que está participada en un 45% por Iberia, se está beneficiando de que tiene unas tarifas más bajas que la competencia.

Las aerolíneas confían en captar más pasajeros aprovechando que la reciente apertura de la nueva Terminal 1 del aeropuerto barcelonés de El Prat ha reducido el tiempo de viaje en diez minutos. El nuevo edificio está más próximo a las pistas de vuelo, por lo que los aviones tardan menos minutos en hacer el recorrido. La batalla por el corredor de transporte sigue abierta.

Más oferta
- La principal baza del avión frente al tren es el tiempo. Iberia ofrece hasta 30 vuelos en cada sentido por las 10 frecuencias directas de Renfe. La aerolínea cubre el trayecto en 50 minutos. Los trenes, sin paradas, en 2 horas y 38 minutos.

- El ferrocarril es más cómodo que el avión. No hay que llegar con mucha antelación a la estación, ni pasar exhaustivos controles de seguridad. Además, se pueden hacer llamadas y hay conexión por Internet.

- La tarifa general del Puente Aéreo es de 353 euros. El precio del Puente AVE, que permite dejar abierto el regreso un año, vale 176 euros.

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